Pamela Boltei

En febrero de 2010, el Teatro Municipal de Viña del Mar resultó seriamente dañado por el megaterremoto. Ese mismo año cerró sus puertas por los peligros que representaba para la comunidad y, poco a poco, fue recibiendo shows pequeños en su foyer. Sin embargo tras siete años de aquel suceso, y ocho desde que fue declarado Monumento Nacional, aún no se inician las obras de la segunda fase -y definitiva- de su restauración, la que permitirá volver a presenciar grandes eventos en el auditorio construido en 1925 y abierto al público cinco años después.

En 2013 se ejecutó una primera restauración que permitió consolidar la estructura del edificio de 2.500 metros cuadrados y realizar funciones en el foyer. Con esto se esperaba rehabilitar la estructura en su totalidad e incluso ampliarla en 2.216 metros cuadrados.

Pero aún no hay obras levantadas, y ni siquiera se sabe qué empresa se hará cargo de las faenas. En octubre de 2015 se pudieron asegurar los dineros para esta segunda etapa que cuesta $7.395.183.000. Los montos fueron aportados por la Subsecretaría de Desarrollo Regional ($4.090.199.000) y el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes ($3.304.984.000), después de lo cual en junio del año pasado se llamó a una primera licitación pública que resultó desierta debido a problemas con la oferta económica.

En febrero de este año se volvió a abrir el concurso y el mes pasado se cerró el plazo de postulación. Cuatro empresas presentaron ofertas, de las cuales sólo tres siguieron en carrera. El martes pasado la administración municipal presentó las ofertas a los concejales: Constructora Valko S.A., Constructora GHG S.A., e Ingeniería y Construcción Puerto Principal S.A., indicando que la alternativa que proponían para su aprobación era esta última firma por cumplir de mejor manera los requisitos.

Dudas de edilesSin embargo, para los ediles hay bastante más que analizar que lo que les plantea la alcaldía, sobre todo después de los complejos escenarios en que han dejado a la Municipalidad las obras fallidas de Gómez Carreño, los módulos de la plaza de los artesanos de Av. San Martín, los errores -según algunos concejales- de las bases de la licitación del proyecto de parquímetros en la Población Vergara y, yendo más atrás, lo difícil que fue sacar adelante el proyecto de reparación del Estadio Sausalito.

Además, hay un factor añadido. Si bien en el primer concurso público se evaluaba la experiencia previa de las firmas postulantes, en esta ocasión -al menos en las bases presentadas- sólo se toma en cuenta para el puntaje final el valor de la oferta y los plazos propuestos, situación que no había ocurrido en otros proyectos similares como en la restauración del Palacio Rioja.

"Cheques en blanco"Por eso los concejales pidieron más plazo para analizar las propuestas. El próximo martes se volverá a discutir para ver si es posible votarla en la sesión del Concejo del jueves, y si quedan dudas, algunos estiman que sería conveniente volver a posponer. El edil Rodrigo Kopaitic (RN) advirtió que "en una política seria y de cara a la ciudadanía, no tienen cabida hoy en día los cheques en blanco y la buena fe a la hora de votar. Hoy la prudencia indica que debemos ser muy acuciosos en el estudio de las propuestas públicas, más aún cuando estas involucran montos considerables de dineros públicos a desembolsar".

En ese sentido, indicó que "aspectos tan importantes como el monto de las ofertas y su directa correlación con los aspectos técnicos y la acreditación de experiencia por parte de las empresas, junto con el plazo ofertado para llevar a cabo los trabajos, son puntos esenciales a tener en cuenta al momento del análisis. El Teatro Municipal representa un ícono turístico y patrimonial de Viña, por lo mismo, todo justifica el elevar los estándares de prolijidad y seriedad en las decisiones que deberemos tomar".

La edil Laura Giannici (DC) sostuvo que "el Teatro Municipal es de suma importancia para la ciudad, no sólo por su valor patrimonial sino que también es necesario recuperarlo para la realización de eventos culturales que tanta falta hacen en nuestra ciudad. Ya llevamos siete años sin este espacio y ahora hay que dedicarle más tiempo a estudiar las propuestas porque eso permite conocer el estado de la empresa que se lo adjudique. Así no tendremos problemas de abandono de obras por falta de recursos y experiencia".

En tanto, el concejal Víctor Andaur (PC) consideró que "es lamentable la demora de la obra porque el Teatro Municipal es un emblema de la ciudad necesario, no tenemos mayores recintos de cultura o espectáculos y que no esté listo es una limitación. Los recursos estaban hace más de un año".

Criticó, a su vez, que "hasta ahora no ha habido una exposición directa, clara, sobre el proyecto y los oferentes, sino que ha sido muy superficial... Es una inversión de miles de millones de pesos y la decisión de quién se queda con la obra no puede ser una cosa al aire. Además, hay preocupación respecto a lo que fue la licitación del Palacio Rioja, la empresa que se la adjudicó tenía una experticia muy importante y se notó cómo quedo el recinto, y hoy existen dudas respecto de si las empresas que están siendo propuestas en el Teatro Municipal tienen esa experticia para una obra que tiene que tener un sello importante".

El independiente pro PS Sandro Puebla estimó que "todos los concejales estamos de acuerdo en que es necesario revisar con lupa los contratos que licita la municipalidad, ya que finalmente nosotros somos quienes votamos aprobándolos o no, y damos la cara a la ciudadanía si hay problemas después. Voy a estudiar muy bien las propuestas que nos hagan los equipos técnicos y me tomaré los tiempos necesarios para analizar, asesorarme y decidir".

"Necesitamos tiempo"

Macarena Urenda (UDI) dijo: "Necesitamos tiempo para poder estudiar esta propuesta. Lo que ha pasado en ocasiones es que nosotros hemos reclamado como concejales porque cuando queremos traspasar la decisión de una semana a otra se nos dice que no hay tiempo para hacerlo ya que estamos en el límite de plazo".

"Esa -continuó- es la queja más recurrente que hemos hecho los concejales, porque uno quiere estudiar las cosas con detalle y para eso requiere tiempo", aunque comentó que "muchas veces uno toma la decisión muy responsablemente y la empresa se cae por otras razones. Pero aquí no estamos hablando del Teatro Municipal de Viña del Mar, sino que es un teatro con características que involucran a toda la región, es el gran teatro de Valparaíso".

El también UDI Jaime Varas, presidente de la Comisión de Obras y de la de Finanzas, afirmó que "atendido el monto de la inversión y la importancia de la recuperación de este patrimonio viñamarino, es absolutamente justificado, responsable y razonable que el Concejo Municipal se tome el tiempo necesario para su aprobación".

"En una política seria y de cara a la ciudadanía, no tienen cabida hoy en día los cheques en blanco y la buena fe a la hora de votar"

Rodrigo Kopaitic, Concejal de Viña del Mar"

De qué se trata el proyecto que busca reabrir el Municipal

La restauración completa del Teatro Municipal contempla la habilitación de butacas para 1.100 espectadores. De acuerdo a declaraciones municipales cuando se adjudicó por primera vez la segunda fase del proyecto, esta incluía la renovación de las instalaciones eléctricas y de agua potable, la remodelación de los servicios higiénicos, la ampliación de sectores que antes no existían para quienes trabajan en el recinto y una cafetería.

También se harán modificaciones y ampliaciones en distintos niveles, y se contemplan butacas nuevas en platea y butacas reparadas en otros sectores. Algunas de estas instalaciones se realizarán con fondos municipales que no están incluidos en esta licitación.

Se trata de $685 millones que aportará el municipio para equipamiento, luces, sistema de sonido y butacas más unos $ 1.400 millones de la Subdere para consultoría y equipos, por lo que la totalidad de las obras totalizará $9.535 millones. El municipio comentó sobre el proceso que "avanza de manera adecuada".

años han pasado desde que el Teatro Municipal resultó con graves daños tras el terremoto de 2010. 7

empresas son las que analizan los ediles para la adjudicación del emblemático proyecto. 3