Valiosas son las opiniones entregadas por el destacado arquitecto Marcial Echenique sobre decisiones claves del Gran Valparaíso. El profesional chileno, Premio Nacional de Urbanismo en el Reino Unido y exdecano de la Universidad de Cambridge, se refirió a polémicos proyectos que se emplazan en el borde costero, como mall Barón y el Terminal 2.
El urbanista expuso en un seminario realizado en la Universidad Católica, organizado por el senador Ignacio Walker y el centro de estudios Metropolítica, instancia en la cual manifestó sobre el mall una opinión favorable, destacando la preservación de la bodega Simón Bolívar, Monumento Histórico, integrada dentro del centro comercial. Desestimando que el proyecto vaya contra la ciudad, expresó que "más bien representa una mejoría para Valparaíso".
En cuanto al Terminal 2, reconoció no conocer en detalle la iniciativa, pero puntualizó que lo más importante "es tener una manera rápida de sacar los contenedores fuera del puerto, pues ese sector está muy restringido y no se pueden apilar los contenedores frente a la ciudad". En ese sentido, destacó la existencia de un espacio extraportuario destinado a ese objeto.
Hay que recordar que el Consejo de Monumentos Nacionales advirtió sobre el impacto del proyecto, señalando que las mitigaciones prometidas serían insuficientes. La materia también fue abordada por los senadores Chahuán y Lagos Weber, quienes destacando la condición portuaria de Valparaíso, manifestaron la necesidad considerar su calidad patrimonial.
Echenique, además, planteó un problema capital de Valparaíso: "Falta vialidad, pues es increíble que todo Valparaíso se mueva por una sola calle, que es la avenida España. Eso no puede suceder en una región de un millón de habitantes". Postula el urbanista crear "una segunda calle paralela que conecte los cerros con el centro de la ciudad, lo cual es un proyecto caro, pero que se ha hecho en otras partes del mundo con mucho éxito".
Concluyó el profesional expresando que "en Valparaíso son necesarios proyectos ambiciosos… proyectos grandes, bien pensados y que sean bien evaluados, tanto con justificación social como económica".
Cuestión fundamental es mirar en grande, con visión de futuro y con realismo a partir, como lo señala Echenique, de una justificación social y económica.
En lo social es básica una efectiva participación ciudadana, pero ilustrada con argumentos e información a la vista, que legitimen y estimulen la inversión. Y cuando se habla de inversión, ésta debe ser el resultado de la suma de esfuerzos públicos y privados.
Las opiniones del arquitecto son oportunas y clarificadoras en momentos en que las decisiones urbanas exigen definiciones que no se pueden seguir postergando.