Valeria Barahona/Agencias
La aparición de la especie humana se situaba hace 180 mil años, hasta esta semana, cuando la prestigiosa revista Science publicó una investigación afirmando que el homo sapiens apareció hace 350 mil años. Es decir, "el hombre que piensa" sería casi el doble de antiguo.
Los autores del estudio, académicos de la Universidad de Uppsala (Suecia), de Johannesburgo y de de Witwatersrand -estas dos últimas en Sudáfrica - utilizaron datos genéticos obtenidos de los restos de siete humanos.
Actividades
Tres de ellos se dedicaron a la caza y la recolección de alimentos hace 2.300 y 1.800 años, mientras que los otros cuatro fueron campesinos que vivieron hace 500 y 300 años. Todos vivieron en la actual provincia de KwaZulu-Natal, en la costa este de Sudáfrica.
El análisis arrojó que la transición de los humanos arcaicos al Homo Sapiens ocurrió hace 350 mil años, mucho antes de los 180 mil años que se creía hasta ahora.
Los autores del estudio respaldaron con esta conclusión la teoría del origen panafricano del Homo Sapiens, con evoluciones simultáneas en el continente.
Marruecos
Las primeras dudas sobre el inicio de la historia humana surgieron en junio de este año, con el hallazgo de restos óseos de más de 300 mil años, en Marruecos. Esto sugirió que la evolución desde el hombre arcaico al Homo Sapiens pudo haber ocurrido mucho antes de lo establecido hasta ahora.
"Este material es más antiguo que cualquier otra cosa presentada como Homo Sapiens", dijo a Nature el paleoantropólogo de la Universidad de Stony Brook, en Nueva York, John Fleagle.
Rasgos faciales
Los descubrimientos revelaron que lo primero en la evolución fueron los rasgos faciales, mientras que la parte posterior del cráneo permaneció alargada durante más tiempo.
"Estos homínidos estaban en la periferia del mundo en ese momento", agregó el arqueólogo del Instituto Max Planck, en Alemania, Michael Petraglia.
El cráneo y la mandíbula humana que permitió esta conclusión fue encontrado en 1961, a 75 kilómetros de Marruecos, en Jebel Irhoud.
El paleoantropólogo del Instituto Max Planck, Jean-Jacques Hublin, consiguió financiación para reabrir, en 2004, la cueva donde fueron encontrados los restos.
La idea era ubicarlos cronológicamente: "Tuvimos mucha suerte", afirmó Hublin. "No sólo obtuvimos referencias, sino que también más restos homínidos".
El equipo ahora posee nuevos cráneos parciales, mandíbulas, dientes y huesos de pierna y brazo de al menos cinco individuos, incluyendo un niño y un adolescente, además de herramientas de piedra.
Evolución del rostro
Al revisar detenidamente las piezas, los científicos encontraron un cráneo de zonas frontales más delgadas que el resto de la escala evolutiva, donde la cara era capaz de doblarse bajo el cráneo, en lugar de estar siempre hacia adelante, como las personas actuales.
Sin embargo, los fósiles marroquíes también tenían el cerebro alargado y los dientes "muy grandes", como las especies más arcaicas del Homo, escribieron los autores.
Una larga historia
Los fósiles sugirieron que los rostros evolucionaron antes de que el cráneo y el cerebro tomaran la forma globular actual. "Es una larga historia, no fue que un día, de repente, estas personas eran modernas", afirmó Hublin, agregando que los habitantes de Jebel Irhoud ya eran capaces de controlar el fuego.
Poblaciones migrantes en áfrica
Amplia comunicación
Las conexiones entre cráneos y objetos encontrados en África muestran "mucha comunicación a través del continente", dijeron los académicos a Nature.
Sahara verde
Los seres humanos antiguos, según los analistas, eran una gran población que se extendía por África cuando el Sahara estaba verde, hace 330 mil años.
Herramientas
En diversas regiones del continente se han encontrado herramientas de piedra de similares características, las que pueden ser un sello del Homo Sapiens.
Obtener la edad con un diente
Para saber la edad de los restos humanos encontrados en Marruecos, el arqueólogo del Instituto del Max Planck, en Alemania, Daniel Richter, utilizó termoluminiscencia, técnica con la que pudo medir cuánto tiempo pasó desde que los minerales cristalinos -contenidos en las herramientas -fueron calentados por el fuego. Con esto, reportó Nature, el académico obtuvo una media de edad de 314 mil años, lo que se condice con un diente de 286 mil años.
ciencia