A. Paredes / K.Escalona
Escondido en unas cabañas de Concón fue detenido el excarabinero, Andrés Cruz Rojas, sindicado como el líder de una organización criminal a la que se le atribuye un fraude inmobiliario cercano a los $ 60 millones. La banda suma hasta el momento 16 víctimas, a quienes les ofrecían departamentos en el condominio Villa Horizonte, de Gómez Carreño, en Viña del Mar, a tentadores precios.
Para adquirir un inmueble los compradores debían hacer entrega de entre 3 y 5 millones de pesos porque los departamentos, supuestamente, contaban con subsidio para los damnificados del megaincendio en Valparaíso, cuyos beneficiarios no habrían ocupado al no tener los recursos para solventar los gastos comunes.
Conocidas las denuncias, personal de la Brigada de Delitos Económicos (Bridec) de la PDI porteña, obtuvo una orden de investigar que culminó con la aprehensión de Andrés Cruz Rojas (46 años), un excabo primero de la policía uniformada, dado de baja en 2009, tras participar en una serie de asaltos a mano armada y estafas, por las que incluso cumplió condena.
Cruz Rojas desde el año 2003 a la fecha tiene un total de seis causas por estafa, dos de ellas cometidas en Viña del Mar. La pena más alta por estos delitos la cumplió en 2010 tras ser condenado a 6 años de cárcel. Incluso, ahora que fue detenido, la Fiscalía constató que el imputado tenía una causa vigente del Tribunal de San Felipe (27 junio) por el mismo ilícito.
Carrera delictual
El antecedente entregado por el Ministerio Público confirma que el sujeto continuó con una carrera delictual, a través de la cual obtenía importantes ingresos. Adquirió propiedades en el sector de Jardín del Mar, en Reñaca, en Gómez Carreño y en otros sectores de la Ciudad Jardín.
Además, a su hijo, quien también fue formalizado por este caso, se le incautaron dos modernos vehículos, una Ford Treverse año 2016 y un Volvo T5 año 2014, ambos avaluados en $ 32 millones. Trascendió que el sujeto presentaba marcados signos de ludopatía, siendo un asiduo apostador en la hípica y cliente frecuente del Casino de Viña del Mar.
El excarabinero operaba junto a su hijo, identificado como Alejandro Cruz Arenas (38), quien era captador de clientes, y Francisco Pinto Velásquez (35), quien aprovechándose de haber egresado de Derecho se hacía pasar por profesional y daba mayor confiabilidad al negocio. Ambos fueron detenidos, formalizados por el delito de estafa y quedaron con medidas cautelares.
En el caso, los detectives investigan posibles vínculos con la empresa inmobiliaria de la cual ofrecían los departamentos, ya que los implicados tenían acceso al departamento piloto para poder embaucar a sus víctimas.
"reclutaban víctimas"
El jefe de la Bridec de Valparaíso, subprefecto Claudio González, dijo que los falsos gestores inmobiliarios operaron durante los últimos cinco meses en Viña del Mar, donde "lograron reclutar a muchas víctimas y compradores, todos ellos con la esperanza de comprar estos departamentos en $3 millones. Una estafa en la cual hemos detenido al autor intelectual, además de su hijo y un tercero que hacía de asesor jurídico, estos dos últimos aprehendidos el pasado martes".
Tras diversos seguimientos y labor de inteligencia, detectives lograron ubicar al excarabinero que "permanecía en unas cabañas en las afueras de Concón, arrendando y oculto de la policía".
Fue precisamente una de las víctimas quien dio los primeros indicios para detener a estos supuestos gestores inmobiliarios, al momento que harían la entrega del dinero para "tramitar" la compra de un departamento.
"La promesa era la entrega del departamento en un corto plazo, dentro del 2017. Para ello sólo recibían dinero en efectivo y el compromiso de ellos era hacer todas las gestiones para gestionar el departamento, incluso entregaban un comprobante que no era más que un recibo comprado en librería", comentó el jefe policial.
Prisión preventiva
Tras la lectura del caso por parte del fiscal Pablo Bravo en la sala 2 del Juzgado de Garantía de Viña del Mar y ser presentados los antecedentes de seis causas por el mismo delito cometidos por Cruz Rojas, el magistrado determinó decretar la prisión preventiva para el líder de la banda mientras dure la investigación.
"No se descartan otros delitos, sin perjuicio de que generalmente hay documentos falsificados. Decir que yo trabajo, por ejemplo, en el Serviu o que soy un funcionario público sin serlo para poder estafar a una víctima son parte de las conductas engañosas dentro de esta ardid para poder estafar a las víctimas", aseveró el fiscal Bravo.
El persecutor dijo que por el caso se podrían formalizar a más personas y no se descartan más víctimas.
"Los detenidos tenían un buen pasar económico, con viviendas en sectores acomodados y autos de lujo. El líder, además, era un ludópata"
Claudio González, Jefe de la Bridec de la PDI"