"Ya salimos segundos en el Panamericano, ahora nuestra meta es clasificar a Tokio"
En los últimos años, detrás de la figura de Marco Oneto, los hermanos Rodrigo y Esteban Salinas han surgido como piezas importantes del balonmano en la Selección chilena y en sus respectivos clubes en el extranjero.
No por nada los dos viñamarinos vienen ganando de forma alternada el premio del Círculo de Periodistas Deportivos (CPD) al mejor jugador de la disciplina, y este 2017, tal como en 2014, fue nuevamente el turno de Esteban. "Creo que llevamos como cinco años entre los dos ganándolo", dice, entre risas.
Desde España, justo después de terminar la primera vuelta de la liga Asobal, donde su club Benidorm marcha en el décimo puesto con 13 puntos, el pívot se muestra un poco sorprendido con la elección.
"Nunca me lo había planteado. Es segunda vez que lo gano, pero estos premios llegan por sí solos, uno nunca trabaja pensando en ellos, se trabaja por premio colectivos, no individuales", reconoce Salinas.
- ¿Cómo evalúa este año?
- La temporada comenzó bien, hice un Mundial muy bueno en Francia, a nivel individual me salió muy bien. Y después en la liga con el equipo he estado aportando. He mejorado bastante y sigo haciéndolo poco a poco.
-¿Se sientes más consolidado en la liga Asobal?
- Me siento bien, me siento un jugador importante dentro del equipo, pero claramente todavía falta mucho para consolidarme. Se puede decir que me conocen, pero me falta dar un paso más. Todo eso se hace con trabajo y saber esperar.
¿Cuáles son sus proyecciones en ese sentido en la liga?
- Primero como equipo queremos salvarnos lo antes posible del descenso para después ya empezar a mirar hacia arriba y tratar de llegar a competiciones europeas.
- Pasando a la Selección chilena, ¿qué tan positiva fue la experiencia en el Mundial de Francia, donde por primera vez se ganó en la fase grupal y a una selección europea?
- Fue la primera vez que le ganamos a un equipo europeo, en ese caso a Bielorrusia. Y competimos bastante bien, salvo contra Alemania, que es un equipazo, todos los demás partidos perdimos por poco y los tuvimos también para ganar. Lo lamentable fue que no le pudimos ganar a Arabia Saudita, el partido que era clave para pasar a octavos de final y lo perdimos por uno. Pero de esto se aprende, es muy difícil dar ese salto, aunque creo que como selección ya estamos bastante competitivos, ya no nos ven como antes.
- ¿Se considera uno de los líderes de la Selección, tomando un poco la batuta de Marco Oneto?
- Más que llevar la batuta, me siento un jugador importante en la Selección. Pero sobre todo me siento un obrero, estoy ahí para lo que sea. Si hay que tirarse de cabeza, pues me tiro, soy un jugador de esas características. Ahora en enero tenemos una gira por Dinamarca y yo feliz. Lo que más me gusta es competir por la Selección y también estar con el grupo que hemos formado. Varios somos amigos, por lo que es bonito reencontrarse con todos.
- ¿Tal como la selección adulta, ilusiona el trabajo que se está haciendo en las categorías menores, donde vienen clasificando a los mundiales Juvenil y Junior?
- Era lo que todo jugador quería, que las categorías inferiores de Chile fueran a los mundiales, porque ahí uno se da cuenta del nivel competitivo que hay en el mundo, ya que al final Europa es el continente más potente. Si vas clasificando a nivel Juvenil y Junior, ya vas ganando experiencia que no tienen otros jugadores, te van conociendo también y vas teniendo experiencia para poder jugar en ligas más competitivas, y eso le viene muy bien al balonmano nacional. Los chicos tienen que motivarse para querer jugar afuera, querer terminar el colegio e irse, es lo que necesitamos. Mientras más jugadores estén fuera, mayor nivel habrá. Se ven bien, físicamente están más grandes también. La altura y el peso es algo muy relevante. Al final, entrenando y jugando todos los días es como se va viendo el crecimiento.
- Ahora tienen estrategias más a largo plazo a nivel de selecciones, con giras en el extranjero y mayor infraestructura, cosas que en su momento eran impensadas para ustedes.
- Así es. Ya llevamos cinco años muy serios en la Selección, con las categorías Juvenil y Junior tomándole el peso a la importancia de hacer giras, concentraciones, a la alimentación, al tema de pagos también, porque hay muchos jugadores de regiones para los cuales es complicado irse a entrenar a Santiago. Ahí es donde hay que dar un paso más grande y tratar de tener hoteles y alimentación para jugadores de regiones, algo que ya se está haciendo. Hay avances, pero necesitamos seguir creciendo. También se ha dado un paso importantísimo con la liga nacional, ahora incluso la transmiten por la televisión. Eso es fundamental para que el deporte se haga más conocido y para que los clubes trabajen con un objetivo.
- ¿Por dónde siente que le sigue faltando al balonmano de Chile para nivelarse con selecciones como Argentina y Brasil, las potencias de la región?
- Para mí lo más importante es que los entrenadores se vayan formando, que aparte de hacer cursos en Chile también vayan al extranjero, que no es fácil porque involucra mucho presupuesto. Para mí el tema de formación de entrenadores es fundamental para que esto vaya creciendo.
- ¿La llegada del DT Mateo Garralda fue fundamental para este avance que ha mostrado la Selección el último tiempo?, más todavía con el regreso de los hermanos Feuchtmann...
- La llegada de Mateo da un cambio rotundo. Fernando Capurro hizo un trabajo fundamental para nosotros, con él se empezó a salir tercer lugar Panamericano, a competir con Brasil y Argentina. Él dio el pie para que varios jugadores fueran creciendo y formándose como tal. Y la llegada de los que habían renunciado, que ahora claramente son de un nivel competitivo muy alto, nos viene muy bien. Son jugadores que juegan en el extranjero, que tienen roce, míticos como Emil. Son jugadores que los necesitamos y menos mal que ya se arregló todo.
- ¿Con Mateo cree que se puede dar un salto todavía más grande a futuro?
- Sí, sin duda. Hablando por la boca de todos, lo que queremos es ir a los Juegos Olímpicos, y ahora el primer paso fundamental es salir en el primer lugar a nivel americano. Ya salimos segundos en el último Panamericano en Argentina, perdimos la final por poco con Brasil, por lo que nuestra meta es ir a Tokio. Hemos dado buenos resultados, pero queremos más. Sabemos que será muy difícil porque Brasil, Argentina, Groenlandia y Cuba también son selecciones con jugadores muy buenos jugando afuera, pero depende de nosotros.