Carreras clandestinas
En relación al artículo "Vecinos en alerta por carreras clandestinas en la calle Álvarez", en El Mercurio de Valparaíso, puedo decirle que hace unos meses escribí a la Municipalidad expresando mi preocupación por la alta velocidad con que se desplazan los vehículos por las calles Álvarez y Limache, especialmente buses y camiones.
Solicité la colocación de reductores de velocidad, considerando que hay cuatro colegios y un hospital en la zona. La respuesta que recibí fue negativa.
Desde entonces han fallecido dos personas atropelladas; la última, una joven madre de dos niños, de tres y cinco años, que fue arrollada por un vehículo que pasaba a gran velocidad frente al Fricke. Esos pequeños hoy tendrían a su madre si hubiera habido más preocupación de la Municipalidad por la seguridad de los vecinos, en lugar de sacarles dinero cobrando cada vez más por estacionar vehículos.
A esto se agregan las carreras nocturnas a escape libre, hasta altas horas de la madrugada, especialmente los días jueves.
Jorge Galbiati Riesco
Gestión fallida
Lo de Wanderers ya superó el límite de lo comprensible y tolerable. El fundamento de la concesión suponía gestión y apoyo económico. De la primera, ni hablar. No existe proyecto ni objetivos deportivos, que es la esencia de la institución. Se transfiere a los jugadores con proyección rápido al mejor postor y se justifica el fracaso con la monserga de la labor social. Para eso existen instituciones de beneficencia que recibirían felices el aporte de los controladores, no hace falta valerse de Wanderers al costo de destruirlo como entidad deportiva arraigada en el alma de Valparaíso.
En lo económico, el apoyo se limita a hacer préstamos a interés, a tasas que impone el mismo grupo que obliga al club y se autopaga. ¿Eso es aporte económico? Decirlo insulta la inteligencia.
En breve, Wanderers recibirá el pago inicial por la venta de sus derechos en el Canal del Fútbol. ¿Es dinero del grupo concesionario? Habría que verlo, eso es patrimonio de la institución y las concesiones no incluyen normalmente el derecho a apropiarse de los activos inmateriales de quien las otorga, cuando éstos son anteriores y ajenos a la gestión del concesionario. Tales fondos pueden ser el sustento financiero para una nueva conducción del club, en la cual sus responsables estén presentes, a la vista, sufriendo las derrotas y disfrutando de los éxitos, porque el fútbol es gestión y pasión.
Hoy Wanderers está acéfalo, en manos de sus acreedores-concesionarios con sede en Santiago, que no tienen otro propósito que cobrar su "aporte" con intereses. Esto es tan cierto, que si un jeque árabe se interesara en invertir en el club, sólo podría entenderse con la agradable señora que vende camisetas en la sede. El resto, no existe.
Mario Cortés Cevasco
¿Adónde va Wanderers?
Ciertamente, las últimas semanas han sido una verdadera pesadilla para los hinchas de Santiago Wanderers.
Muchos creímos que el descenso sería el punto más bajo al que se podría llegar, pero con el paso de los días, las cosas se han puesto peor. La semana pasada, entre cuatro paredes, sin consultar a la Comisión Fútbol ni a la Corporación, se tomó la decisión de mantener en el cargo de entrenador a Nicolás Córdova, decisión entendible sólo desde lo económico.
Esto remarca la política de la S.A. de estar lejos de los hinchas. Hoy, la Corporación Santiago Wanderers no es tomada en cuenta, menos aún los fanáticos que ni siquiera son socios.
Ahora, según informó El Mercurio de Valparaíso, se anuncia una reducción presupuestaria de 40% y la eliminación de personal. ¿Cómo se explica esto si prontamente se recibirán 3,2 millones de dólares por venta de CDF y 500 mil más por participar en Copa Libertadores? ¿Nada de eso será reinvertido en armar un plantel competitivo para la categoría que permita luchar de inmediato por el ascenso? Oscuro panorama se le viene al club.
Patricio Erlandsen
PSU
Viendo los resultados de la Prueba de Selección Universitaria (PSU), es a lo menos preocupante que, dentro del ranking de los 100 mejores colegios según su resultado, sólo cuatro hayan sido municipales y dos del sistema de copago. Lamentablemente, ese parece ser el resultado de una reforma que buscó criminalizar a los administradores de los colegios y nunca puso su eje en la calidad y que, una vez más, termina perjudicando a los jóvenes más vulnerables de nuestra sociedad.
Pedro F. Toledo J.
Análisis
A propósito del fin de año y de las múltiples reflexiones que se realizan, ¿la izquierda supo que perdió las elecciones?
Maximiliano Urenda Ossa
Mall Barón
Excelente noticia la del mall Barón. Ahora podremos seguir disfrutando de un predio desocupado y sucio, al que nadie puede acceder, sin aporte alguno a la ciudad. Bien por los porteños.
Juan Pablo Tierno