Sensación de tardanza
VALPARAÍSO. Cifra fue confirmada por encargado de aseo municipal, quien subrayó que se redoblaron esfuerzos de limpieza. Aníbal Pinto y Errázuriz, las zonas más críticas.
A las 7 de la mañana de ayer, la Plaza Sotomayor de Valparaíso lucía limpia tras la celebración de Año Nuevo que, como es habitual, concentra a miles de personas en la Ciudad Puerto. Sin embargo, otros puntos del plan fueron más complejos en cuanto a las labores de aseo. ¿La razón? De acuerdo al análisis en terreno de los encargados municipales, la basura acumulada en esta oportunidad superó con creces lo dejado el año pasado.
La plaza Aníbal Pinto, Errázuriz, Brasil y Bellavista se posicionaron como los puntos más críticos en cuanto a desperdicios presentes en la vía pública, por lo que las labores de limpieza se extendieron hasta la tarde.
Esto, pese a la disposición de 250 trabajadores contratados por la Municipalidad de Valparaíso, la instalación previa de 12 bateas, 40 contenedores, 10 campanas para recolectar botellas de vidrio, 10 receptáculos para botellas plásticas y dos puntos limpios, más la operación de tres hidrolavadoras, tres camionetas de arrastre, dos camiones aljibe y cinco cuadrillas de lavado.
Botellas, latas residuos orgánicos, cajas, vasos, papeles y confeti, entre otros tantos productos propios de esta celebración, inundaron las calles porteñas, a tal punto que el encargado de aseo de la Municipalidad de Valparaíso, Felipe Vial, confirmó que la basura aumentó en un 30% en comparación con el año anterior.
"Puedo hablar del incremento de basura respecto del año pasado, por lo bajo, tenemos un 30% más de basura que el año pasado y eso responde directamente a la cantidad de personas que llegó a la ciudad. Hubo más personas que el año pasado y eso se refleja en el tema de la basura. Se detectó más del 30% de basura en el plan y lo que es cerro se mantiene como el año pasado", aseveró.
Para limpiar las calles del centro porteño, explicó Vial, este año se incorporó el hidrolavado. "La particularidad de este año, a diferencia de otros, fue que se hicieron lavados con hidrolavadoras, operación que se realizó simultáneamente por el plan de la ciudad. Fueron tres máquinas que pasaron principalmente por las calles que tuvieron problemas con desechos orgánicos y derrame de líquidos", precisó.
Este tipo de limpieza se efectuó sobre todo en calles principales, en la plaza Aníbal Pinto, en la avenida Errázuriz y Bellavista, que fueron los puntos más complejos.
Por su parte, el delegado municipal nocturno, Juan Carlos González, quien hizo un recorrido permanente por la ciudad, coincidió con Vidal en relación a que la basura se focalizó en ciertos sectores, aunque en cuanto al número de gente su visión fue distinta.
"Vimos una baja disminución en la cantidad de personas que llegó a la ciudad y me imagino que eso tiene que ver con la oferta tan variada que hay en el borde costero. Yo estuve en las calles, estuve en terreno durante toda la noche y la gente se portó increíble, tuvimos un show maravilloso con el cierre de Chico Trujillo. Esto claramente la gente lo agradeció, por lo que tenemos una excelente evaluación de Año Nuevo".
Ahondando en el desarrollo de la celebración durante la madrugada, el funcionario municipal puntualizó que "estuvo bastante bien, no tuvimos ningún incidente grave, no hubo choques y otros hechos que lamentar. Fue una noche muy tranquila en todos los términos, estamos bastante contentos con la situación. Todo estuvo controlado y la gente se comportó bien".
En relación al aumento de desperdicios en la vía pública, el también llamado alcalde nocturno reconoció que pese a los llamados a cuidar y respetar la ciudad, el problema persistió en esta ocasión, aunque, aclaró, "aumentó la basura de forma ordenada. Teníamos muchas bateas, contenedores, se colocaron en la Plaza Sotomayor, lugar que se demoró una hora en estar totalmente limpia".
En este sentido, a las 7 de la mañana de ayer, el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp (quien decidió no hacer declaraciones a la prensa durante la jornada, según informó el Departamento de Comunicaciones de la Municipalidad), se reunió con los trabajadores de aseo en un desayuno para coordinar las acciones en los diferentes puntos de la ciudad.
Uno de los puntos conflictivos en cada Año Nuevo es el sector de la plaza Aníbal Pinto y Cumming. Ante ello, el presidente de la Junta de Vecinos N° 74, del cerro Miraflores, Waldo Burgos, explicó que "cuando bajé pude ver que había menos gente que otros años, estaba más tranquilo por lo que vi. Yo bajé entre las 4 y la 7 de la mañana y vi esa situación. En algunos lugares faltó recolección, había mucha basura. Fui al cerro Alegre y estaba lleno de basura; mi barrio estaba que explotaba".
El viñamarino Guillermo Navarro fue también testigo de esta compleja realidad. "Nosotros somos de Viña del Mar, estuvimos donde una cuñada que vive en Cumming y la situación fue terrible. En la noche no nos dejaron dormir y la suciedad es algo insoportable, yo hace años que no venía por lo mismo y ahora ocurrió la misma situación. Hubo menos gente, eso es verdad, pero ensucian igual, no hay respeto con la gente"
En tanto, en la Ciudad Jardín, tanto autoridades municipales como Carabineros reconocieron que la situación en la comuna fue bastante tranquila, donde desde muy temprano se iniciaron labores de limpieza.
En ese sentido, desde el municipio señalaron que fueron más de 340 funcionarios los que participaron en las labores de aseo, en las cuales se utilizaron 40 camiones y 10 camionetas que permitieron retirar entre 38 y 40 toneladas de basura.
Por su parte, el capitán de Carabineros Francisco Carroza, de la Primera Comisaría de la Viña del Mar, indicó que no hubo mayores inconvenientes durante el desarrollo de las celebraciones, por lo que destacó el comportamiento de la gente que llegó hasta la ciudad.
"La gente que llegó a pasar el Año Nuevo a Viña del Mar se comportó de muy buena manera. Si bien durante las celebraciones hubo una importante ingesta de alcohol, el comportamiento de las personas fue el adecuado, por lo que no hubo mayores detenidos ni nada que haya causado un problema mayor", dijo el oficial de la policía uniformada.
Junto con ello, agregó que "tuvimos muy pocas infracciones por conducción bajo la influencia del alcohol o estado de ebriedad. La mayor cantidad de estas infracciones fueron por estacionar sobre la acera".
Algunos de los vecinos cercanos a la plaza Aníbal Pinto, Cumming y avenida Brasil, principalmente, denunciaron que las labores de aseo fueron tardías en comparación a años anteriores. Respecto a esto en particular, el encargado de aseo municipal, Felipe Vial, explicó que el horario de limpieza comenzó a las 7 de la mañana, al igual que el año anterior, pero la cantidad de basura dificultó la función de los trabajadores. "Esa sensación puede ser con el aumento de basura que se detectó este año. Lo que se puede comparar con el año pasado es la limpieza de la Plaza Sotomayor, que comenzó a la misma hora del año pasado. A las 7 de la mañana ya se encontraba limpia", aclaró Vial.
Basura se incrementa en
un 30% en este Año Nuevo
"Puedo hablar del incremento de basura respecto del año pasado, por lo bajo, tenemos un 30% más de basura que el año pasado y eso responde directamente a la cantidad de personas que llegó a la ciudad"
Felipe Vial, Encargado de aseo municipal"
8:30 horas comenzó el lavado de diferentes calles porteñas. Los puntos más complejos fueron la avenida Errázuriz, el sector de Bellavista y plaza Aníbal Pinto.
250 personas fueron contratadas por la Municipalidad de Valparaíso para dedicarse exclusivamente a la limpieza de la vía pública del Puerto después de la celebración de Año Nuevo.
40 contenedores, baños químicos y 12 bateas fueron algunos de los elementos que dispuso el municipio para mantener limpia la ciudad, sin embargo, tales medidas no tuvieron el efecto esperado.