¿Faltó transparencia en la decisión del Gobierno para emplazar en San Antonio el futuro Puerto en Gran Escala (PGE)? Al parecer sí, de acuerdo a declaraciones formuladas a este Diario por el ingeniero civil industrial y magíster en ciencias políticas Javier León, expresidente de la Cámara Aduanera de Chile y actual secretario ejecutivo del Consejo Regional Logístico.
En relación a los estudios para tomar la decisión, precisa que "debieron de transparentarse a todo el país… los he pedido varias veces en distintas partes y no los muestran… empiezan a surgir sospechas sobre cuáles son los objetivos, que hay detrás de todo esto". Teme el dirigente que sumando el PGE en San Antonio y el anunciado proyecto ferroviario de intercambio modal en Santiago anunciado por la estatal EFE, se llegaría a un "puerto seco" en la capital. Precisa que llevar el puerto a Santiago "es una locura. La magnitud de la locura por llevar todo a Santiago va a terminar matando a Chile".
Focalizando el tema, para León el PGE en San Antonio significaría que Valparaíso muere como puerto de carga "porque la magnitud del puerto con ocho sitios, lógicamente va a abaratar los costos y las navieras irán hacia allá. Vamos a tener más concentración y más problemas cuando haya un tsunami o huelgas, porque los portuarios de San Antonio van a tener en sus manos el comercio exterior chileno". Al respecto recuerda un estudio de dos ingenieros estructurales que recomiendan terminales alternativos, bajando de 8 a 4 los sitios en San Antonio y dejando 3 en Valparaíso, esto previniendo fenómenos naturales o movimientos gremiales.
Este aspecto es atendible, más allá del riesgo del "puerto seco", pues el comercio exterior exige varias rutas de salida y entrada, asegurando así fluidez y continuidad.
En perspectiva futura León ve con optimismo la designación de Gloria Hutt en Transportes, pues "es receptiva y conoce todo este entramado que hay entre los gremios de comercio exterior y lo que quiere la gente de Santiago, que a veces no entiende de puertos".
Y con una mirada general expresa que para la decisión del PGE "se debió haber esperado que el próximo gobierno definiera las políticas del sector y dónde va a ser el desarrollo portuario… más que el megapuerto, se requiere establecer una red logística y una política adecuada para el país".
Tiene razón el dirigente, pues un gobierno no puede dejar el peso de la ejecución de una obra de esta magnitud al próximo. La experiencia del Transantiago en un punzante "téngase presente".
Además, dada la importancia que la iniciativa tiene para el futuro del comercio exterior, la transparencia es un punto esencial para despejar dudas y suspicacias y lograr aportes que pueden ser valiosos para el proyecto mismo.