Durante el segundo semestre del 2017 y las primeras semanas de enero del presente año, la comuna de Valparaíso ha recibido una serie de noticias que han reformulado el debate sobre el futuro de la ciudad. Lo sucedido con la problemática de las cargas limpias, el éxodo de líneas de cruceros a San Antonio, sumado a la resolución de la Corte Suprema sobre el Mall Barón, y el reciente anuncio de la Presidenta Michelle Bachelet sobre la construcción del Puerto a Gran Escala (PGE) han predispuesto a tener una mirada muy pesimista del "puerto principal".
El ámbito de la inversión es el más sensible a estas noticias, dado que lo sucedido promueve un clima de incertidumbre e inseguridad sobre el futuro, alejando a posibles inversores. Tampoco podemos pasar por alto el impacto que tienen estos anuncios sobre el turismo de la ciudad, el cual, sin inversores, es muy poco probable que pueda aumentar, mejorar y establecer nuevos servicios. Por último (pero no menos importante), comunidad de Valparaíso es testigo de cómo la ciudad mantiene un comportamiento que no la ha permitido avanzar a grandes pasos hacia un desarrollo sustentable y responsable.
En este contexto, se debe destacar el trabajo realizado por San Antonio, partiendo por los entes gubernamentales, estatales y municipales, destacando también a los empresarios, inversionistas, a la industria local y a la comunidad, que han logrado presentar al puerto como la mejor opción para el desarrollo de un PGE. Un trabajo colaborativo y proactivo que les permitió realizar una serie de estudios que argumentan válidamente la decisión del PGE, además de romper por sexto año consecutivo la barrera del millón de TEU transferidos.
Todo lo anterior debe abrir nuestra mirada a Valparaíso y ampliarla a un mediano y largo plazo. El futuro sigue siendo prometedor para el desarrollo de la ciudad. La industria del turismo debe ser una señal clara para los inversores, porque Valparaíso jamás perderá su identidad, sello, belleza ni atractivo. Por otra parte, el desarrollo de una nueva terminal debe concretarse, si bien TPS está en un nivel óptimo de trabajo actual que permite ofrecer precios competitivos, si estamos pensando en un megapuerto regional (Quintero, Valparaíso y San Antonio) para un trabajo coordinado, es necesario tener la posibilidad de ofrecer mayor transferencia de carga.
Tampoco podemos olvidar el desarrollo del polo de innovación que tiene Valparaíso, presentando una serie de instituciones (3IE, AC3E, Núcleo biotecnológico de Curauma, IF Valparaíso, entre otros) que entregan sus servicios con una alta capacidad de innovación, tecnología, investigación, propuestas y aplicabilidad, lo que podría convertir a Valparaíso en un potencial "Silicon Valley". Lo anterior sumado a Impulsar: Cluster de Escuelas de Negocios, permitirá un trabajo colaborativo entre instituciones de educación superior y empresas para una formación exitosa de futuros profesionales.
Felipe Muñoz
Director carreras Logística y Comercio Exterior Duoc UC sede Viña del Mar