Alerta desde el Túnel Zapata
Incendio de un bus en el interior del ducto advierte sobre el tema de la seguridad y también sobre la conectividad Valparaíso-Santiago. La Ruta 68 resulta hoy insuficiente lo que hace necesario tanto su mejoramiento como la creación de alternativas, entre las cuales la ferroviaria, de alta capacidad y probada seguridad, no se puede dejar de lado.
Pudo haber sido una tragedia, pero, afortunadamente, solo fue una advertencia. Una advertencia, un llamado de alerta para tener en cuenta, para no olvidar. El incendio de un bus con 28 pasajeros al interior del túnel Zapata ocurrido el pasado martes encierra varias observaciones. La primera de ellas refiere a la seguridad y a la condición de los buses de largo recorrido que circulan por las vías concesionadas. Ello exige una investigación a fondo de la máquina siniestrada, en particular, y la insistencia en los controles periódicos de todas las flotas, considerando al alto número de pasajeros que utiliza ese medio de transporte y también la antigüedad de los vehículos. En este caso particular, hay que destacar reacciones oportunas de conductores y pasajeros evitándose situaciones de gravedad.
Otro aspecto, de mayor alcance y que en los últimos meses ha cobrado actualidad es el relativo a la modernización de la interconexión ferroviaria entre la capital y el Gran Valparaíso. Hay una propuesta en curso que debe sortear diversas etapas, pero que tiene el gran mérito de contar con respaldo económico.
La propuesta que significa un triple enlace entre Santiago, Valparaíso y San Antonio cubriría servicios de pasajeros y transporte de carga.
La pasada interrupción del túnel Zapata Norte de la Ruta 68 en el sentido Santiago-Valparaíso significó alteraciones en el flujo de viajeros en transporte público y particular en vísperas del feriado extendido de Semana Santa. Y, por otra parte, produjo alteraciones en el tráfico de vehículos de carga con destino al terminal portuario de Valparaíso, situación especialmente delicada cuando hay aumento en los despachos de fruta de exportación.
El desarrollo de la ruta entre Valparaíso y Santiago ha sido una inquietud de sucesivos gobiernos. Ya en 1947, Presidencia de Gabriel González Videla, se aprobó la Ley 8.733 que autorizaba la contratación de préstamos para la construcción de los túneles de Zapata y Lo Prado. Zapata fue inaugurado en 1955, Gobierno de Carlos Ibáñez, y Lo Prado en 1970, Presidencia de Frei Montalva. Fueron insuficientes y posteriormente se construyeron túneles paralelos ante las crecientes demandas de tránsito. Esto asociado al sistema de concesiones y pago de peajes actualmente en vigencia.
Con todo, la Ruta 68 actualmente resulta insuficiente lo que hace necesario tanto su mejoramiento como la creación de alternativas, entre las cuales la ferroviaria, de alta capacidad y probada seguridad, no se puede dejar de lado, materia que debería estar en la agenda de los flamantes ministros de Obras Públicas y Transportes y también en la gestión del intendente y del Gobierno Regional de Valparaíso.