Tensión global: secretario general de Naciones Unidas asevera que la "Guerra Fría ha vuelto"
CRISIS SIN CONTROL. António Guterres afirmó que en Medio Oriente se vive una situación de "caos" y alertó, en el Consejo de Seguridad, del riesgo de que las tensiones entre ambas superpotencias se disparen hasta llegar a un punto incontrolable.
El Secretario General de la Organización de las Naciones Unidas, António Guterres, declaró ayer el retorno de la Guerra Fría y denunció que la situación en Siria hoy presenta el mayor peligro para la paz y la seguridad internacionales.
"La Guerra Fría ha vuelto", dijo un convencido Guterres ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, durante una reunión solicitada por Rusia para discutir las tensiones en torno a Siria. Esto, después de que el Presidente Donald Trump, vía tuit, el pasado miércoles, advirtiera al Kremlin que disparará misiles contra el país del Medio Oriente en respuesta al supuesto ataque químico del pasado fin de semana. Esa acción mató a 40 personas en las cercanías de Damasco, la capital del país.
Según el Secretario General de la ONU, Medio Oriente vive una situación de "caos" y alertó de que las tensiones entre ambas superpotencias se disparen hasta llegar a un punto incontrolable.
"Las crecientes tensiones y la incapacidad de alcanzar compromisos para establecer un mecanismo de rendición de cuentas (sobre el uso de armas químicas en Siria) amenazan con llevar a una total escalada militar", afirmó Guterres.
El diplomático portugués también dijo que "esta nueva Guerra Fría" presenta el peligro de que las fórmulas que existían hace décadas para gestionar riesgos ya no están presentes e instó a las potencias internacionales a la necesidad de pactar la puesta en marcha de un mecanismo que atribuya responsabilidades al régimen del Presidente Sirio, Bashar Al Assad, por el uso de armas químicas en el país. Según recalcó Guterres, si hay impunidad se estará animando a continuar con la utilización de armas prohibidas, lo que debilitaría toda la arquitectura internacional de no proliferación.
Rusia dijo ayer que dispone de "pruebas irrefutables" de que el supuesto ataque químico del fin de semana pasado en Siria fue un montaje para culpar a Moscú y al régimen de Bashar Al Assad. "Tenemos datos irrefutables de que se trata de un nuevo montaje y que detrás está la mano de los servicios secretos de un país que en estos momentos trata de estar en la vanguardia de la campaña de rusofobia", afirmó el ministro de Exteriores del Kremlin, Serguéi Lavrov, en referencia al Reino Unido.
Disparos a londres
Lavrov acusó a Londres de haber escenificado el supuesto ataque químico para provocar que EE.UU. aumentara su intervención en el conflicto. "Tenemos pruebas de que Reino Unido está directamente involucrado en la organización de esta provocación en Guta Oriental", dijo ayer en Moscú el portavoz del Ministerio de Defensa ruso, Igor Konachenkov.
La respuesta del Reino Unido no tardó en llegar y el Ministerio de Asuntos Exteriores británico calificó de "ridícula" la acusación de parte de Rusia.
"Las acusaciones de Moscú son sólo las últimas en una cantidad de ridículas acusaciones de Rusia, que también ha dicho que nunca hubo ataque", manifestó el Gobierno británico.
"Tenemos datos irrefutables de que se trata de un nuevo montaje y que detrás hay un país en la vanguardia de la (...) rusofobia"
Serguéi Lavrov, Ministro de RR.EE. de Rusia"
"Las crecientes tensiones y la incapacidad de alcanzar compromisos (...) amenazan con llevar a una total escalada militar"
António Guterres, Secretario General de la ONU"
Crece el desastre humanitario sirio
Actualmente, Siria vive la peor situación humanitaria desde que, en 2011, comenzó la guerra en el país, aseguró ayer la Organización de las Naciones Unidas (ONU). La organización alertó del "desplazamiento masivo" de poblaciones, con más de 700 mil personas que han tenido que dejar sus hogares este 2018 y la violencia que hay en muchos frentes. El coordinador humanitario para Siria de la ONU, Panos Moumtzis, destacó la gravedad de la situación en zonas como Guta Oriental, Idleb, Afrín y Al Raqa.