Terminal 2
El viernes 11 de mayo, la ministra de Transportes expresó que la idea de oponerse al Terminal 2 es "un gusto personal del alcalde de Valparaíso". Esta forma tan elemental de pensar solo responde a un centralismo obsesivo.
Un gran sector de la ciudadanía de Valparaíso se opone a un proyecto diseñado e impuesto por empresarios de Santiago. Valparaíso no es San Antonio ni Ancud. Entonces, en Santiago, el feudo, la ministra se estaría dando un gusto personal con las nuevas líneas del metro y taxis eléctricos, pero el resto del país, el patio trasero, debe conformarse con la obras menores o las llamadas obras de mitigación: los buses dados de baja en Santiago, por ejemplo.
¿Cuándo va a ser el día que las autoridades del feudo entiendan que las regiones merecen un mínimo de respeto y que el progreso debe nacer con la comunidad, no en contra de ella?
Pedro Osses González
Jefe de Personal
El Mercurio de Valparaíso, del sábado 12 de mayo, destaca en su primera página la defensa que el jefe de Personal del municipio de Viña del Mar hace en defensa de la legalidad de los pagos extras hechos a favor de los funcionarios de esta municipalidad. Son escasas las jefaturas que son capaces de defender a sus funcionarios en casos como el mencionado y, desde luego, felicitamos a este jefe de Personal que, como buen jefe, sale en defensa de sus colaboradores.
Prof. Isaías Aguayo E.
Piedras
Es de esperar que todas las reuniones efectuadas y las que están por venir entre los máximos líderes de las grandes naciones de nuestra tierra, alejen a la humanidad del fantasma de la Tercera Guerra Mundial y así no se cumpla una de las tantas citas de quien siempre se arrepintió de haber sugerido el uranio como fuente de energía y que terminó siendo el principal insumo de la primera bomba atómica.
"No sé qué armas se usarán en la Tercera Guerra Mundial, pero puedo decirles cuáles se usarán en la Cuarta: ¡Piedras!", Albert Einstein (1879-1955).
Luis Enrique Soler Milla
Valparaíso primero
Escribo sólo "Valparaíso primero", ya que el vocablo "siempre", que se unía históricamente a esta emotiva oración, aportando a los habitantes y visitantes alegría y buenas vibras, vista la realidad actual de la ciudad, debemos reconocer, ha perdido, sino toda, gran parte de su importancia, coherencia y significación.
Los turistas y visitantes se quejan amarga y abiertamente de la suciedad, los rayados, la pestilencia, la delincuencia, el invasor comercio ambulante y preguntan derechamente por qué las autoridades pertinentes no gestionan ni proceden a enmendar esta contrariedad, que hoy exhibe profusamente nuestra capital regional, devolviéndola su antiguo esplendor, valor intrínseco que hizo de Valparaíso un lugar característico e inconfundible, lejano, recóndito, admirado por sus virtudes y digno de ser visitado.
Si las autoridades políticas de la región y la comuna no ejercen con transparencia y nitidez su responsabilidad administrativa y su liderazgo, en la mar de opiniones sueltas que hoy nos aprisionan e inmovilizan, cada cual persiguiendo con egoísmo su propia rentabilidad, Valparaíso terminará de perder también su jerarquía de "primero" entre sus iguales.
Jaime Salazar Rojas
Migrantes
La noticia que leímos sobre la mujer que fue violada por dos ciudadanos de origen haitiano es sin duda terrible. Sobre todo porque en las últimas semanas han existido muchas denuncias similares: contra La Manada en España; los hinchas de la Universidad de Chile; y la pequeña Ámbar. Nuestro país está más sensible ante estos crímenes y más rabia nos provoca que otra mujer sufra una violación. Sin duda, los criminales deben ser juzgados y condenados.
Dicho esto, es lamentable que tengamos que llamar a no torcer este hecho para promover una postura antimigratoria. No podemos generalizar ni culpar a toda la comunidad haitiana migrante por el crimen cometido ni tampoco es correcto creer que la violación es una práctica exclusiva de una sola nacionalidad. Los casos mencionados anteriormente reafirman que es un fenómeno global, es fruto de una sociedad que ve a la mujer como un objeto sexual, que está siempre disponible para el deleite del hombre. Esta cultura de la violación está presente en todas las naciones. Es esto, y no los extranjeros, lo que debemos expulsar del país.
Álex Fajardo
Renuncia
El mejor servicio que el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, debería prestar al país sería renunciar, ya que no cometió un simple error, al financiar un viaje privado con recursos fiscales, sino un acto horroroso e impresentable, por ser él la persona responsable del uso de la billetera fiscal.
Jaime Ojeda T.