Sacerdotes locales esperan decisión del Papa para reconstruir la Iglesia
RELIGIÓN. Mientras algunos valoran avance en carta del Pontífice, otros se preguntan por qué los obispos esperaron hasta ayer para entregar sus cargos.
Desde valoraciones hasta cuestionamientos generó la decisión de los obispos de la Conferencia Episcopal chilena de dejar sus cargos a disposición del Papa Francisco entre algunos de los sacerdotes más reconocidos en la Región de Valparaíso.
Durante la mañana de ayer se conoció la decisión de los obispos chilenos, después de la reunión que sostuvieron con el Sumo Pontífice en Roma y tras conocer las duras conclusiones que redactó Francisco respecto a la investigación de los casos de abuso sexual en Chile, en las que calificó como actos "delictivos" la destrucción de documentos y el encubrimiento.
Pasadas las 6.30 de la mañana chilena, los 34 obispos chilenos pidieron perdón, dejaron sus cargos a disposición de Francisco y, posteriormente, aclararon que mientras el Papa no se pronuncie al respecto, ellos continuarán en sus cargos (ver detalles en página 12).
En el mundo católico lo ocurrido en Roma es un terremoto que, según algunos de los sacerdotes más conocidos de la región, y tomando en cuenta los antecedentes sobre abusos sexuales y de poder en el país, llegó algo tarde, aunque concuerdan en que es un paso para avanzar hacia la reconstrucción de la Iglesia y sus confianzas.
"No sé por qué entregan los cargos cuando ellos nunca dijeron que habían hecho algo malo antes. Muchos de los obispos habían presentado su renuncia antes. De hecho, nuestro obispo (monseñor Gonzalo Duarte, quien presentó su renuncia en septiembre del año pasado tras cumplir los 75 años) ya lo había hecho, así que no sé si es más un gesto político o qué, porque si los obispos dependen del Papa, no entiendo por qué lo hacen. Me preocupa que en Roma se hayan dado cuenta que actuaron mal y que por eso ponen el cargo a disposición, porque sería horrible que fuera así, que lo dijeran ante el Papa, porque ¿por qué no lo hicieron ante la comunidad antes?", dice Gonzalo Bravo, párroco de la Iglesia La Matriz de Valparaíso y profesor de la Facultad de Teología de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV).
"Si se cambiasen todos los obispos que se tienen que cambiar, no sé si el problema de la Iglesia quedaría solucionado. Quienes han ocultado información deberían decirlo. Hay que volver a lo sencillo, al Jesús profeta, al Jesús que se violentaba de la injusticia... son caminos tradicionales, pero son los únicos que harán de la iglesia un signo de salvación".
El padre Pedro Nahuelcura, párroco de la Iglesia Corazón de María, en el barrio Almendral de Valparaíso, señala que "estamos a pocos días, de hecho mañana (hoy) estamos cerrando Pentecostés, que es la venida del Espíritu Santo, y no me cabe duda que el Papa Francisco busca hacer un nuevo Pentecostés en una Iglesia que necesita luces, reconciliación con sus pastores, que estén a la altura de los tiempos, en sintonía con la gente y a la altura de la gente. El gesto que han tenido hoy frente al Santo Padre es un gesto de reconciliación tremendamente importante, nunca antes vivido en la historia de la Iglesia y es la oportunidad de enmendar, reparar, reconstruir y poder, sobre todo, poner esta iglesia profética, como llama el Papa, en los tiempos actuales entendiendo los signos de los tiempos porque los hechos que han ocurrido son, efectivamente, un signo de los tiempos lamentable como los abusos, el abuso de poder, el no sentirse comprendido o no haberse sentido escuchado por quienes tenían que entender, comprender y escuchar".
Al padre Enrique Opaso, director general de Refugio de Cristo y expárroco de la Iglesia de Reñaca, le ha afectado en lo personal la "actuación nefasta" de los obispos chilenos. "He seguido muy de cerca todo este problema porque nos atañe mucho a los curas, pues somos las otras víctimas de esta actuación nefasta de algunos obispos en Chile, porque es a nosotros a los que nos interpelan en la calle y se abalanzan contra nosotros. La primera información nacida de la Santa Sede fue deplorable, nos llenamos un poquito de angustia porque era una declaración que no decía nada y eso era súper desesperanzador, pero gracias a Dios se filtró el documento más importante que ha salido del Papado, un texto que nos hizo de nuevo soñar en la iglesia que queremos para Chile, de modo que mi oración en la mañana fue con ese texto y me hizo volver a tener la misma disposición de cuando me ordené de cura, el sueño de una iglesia sencilla, humilde, preocupada de las cosas de la gente. La carta del Papa ha sido un grito de alerta para la Iglesia del mundo, especialmente para la nuestra".
Añadió que "hay tareas todavía para la Iglesia, todos los obispos pusieron su cargo a disposición, pero una cosa es eso y otra es dar un paso al costado, y yo creo que muchos obispos tienen que dar ellos un paso al costado, sin necesidad que se lo pida el Papa para empezar a reconstruir una conferencia episcopal de obispos pastores que estén con su pueblo, y que esto nunca vuelva a ocurrir en Chile. Echo de menos un fuerte perdón".
Marcelo Catril, párroco de la Iglesia Asunción de María de Achupallas, dice estar "muy sorprendido por la determinación de los obispos, está muy bien que hayan puesto su cargo a disposición del Papa, creo que es un camino necesario para la cicatrización y sanación de los abusos, las omisiones y en algunos casos, encubrimientos que se han suscitado en estos espacios. Es la actitud que hacía falta. Hay que saber que la soberbia no es el camino que debemos tomar para vivir en comunión. Ahora el Papa está muy informado para hacer dimitir a los obispos que están en situaciones de entredicho, y yo creo que si son más que los obispos de Karadima, los 4, es positivo, porque efectivamente puede haber otros obispos que estén en situaciones complejas. Si ese es el caso, creo que el Papa tiene que pedirles la renuncia".
Además de ser parte de la Conferencia Episcopal que entregó sus cargos a disposición del Papa, el obispo de Valparaíso, monseñor Gonzalo Duarte, ya había presentado su renuncia al cumplir los 75 años, pero continuaba ejerciendo en espera de la decisión sobre su sucesor. Respecto a su sucesor, Catril advierte que, según su opinión, "sería ideal que Santiago Cerda pudiera ser nuestro obispo, lo conocemos, lo queremos, fue profesor mío, ha trabajado codo a codo con el Papa. Hay varios más idóneos, pero no es el momento para nombrarlos porque comenzaría la carrera episcopal que es contrario a lo que el Papa nos dice". De todas formas, señala que sería bueno que el nuevo obispo fuera de la región, "que conozca nuestra iglesia y, ojalá, que haya sido párroco. De todas formas, el proceso para elegir un obispo tiene que cumplirse según el derecho canónico, es decir, que sea un sacerdote de 35 años para arriba, más de 10 años de sacerdote, que cuente con la buena fama de la gente y, en lo posible, que tenga algunos estudios eclesiásticos mayores, alguna licenciatura, pero hay que buscar a alguien de ese perfil y ahí hacer las consultas que correspondan. Aquí el nuncio tiene que tener alguna responsabilidad mayor, no es una tarea fácil. Además, tiene que ser alguien elegido con una lupa grande y con unas pinzas muy precisas, no podemos elegir un hombre perfecto, eso está claro, no existe un cura perfecto, pero sí elegirlo con pinzas por todo lo que ha pasado".
El padre Bravo advierte que un buen perfil para el nuevo obispo de Valparaíso, dados los tiempos complejos de la Iglesia y del país, es "el de un pastor cercano, súper humano, una persona que sea valiente para cambiar alguna estructura de poder que se presente, una persona que tenga súper claro que Jesucristo es el Señor, que la protección de Jesucristo es a las personas más vulnerables, una persona de oración. No me imagino un administrador, una persona que esté muy cerca del poder, sino que sea de servicio. Alguien que más que recobrar la confianza en la Iglesia, recobre la confianza en Jesucristo. El tiempo que tome, no tengo idea, yo tengo gente súper buena que no cree en la institución y siendo profundamente cristiana se aleja porque siente que no los representa. La Iglesia se tiene que mostrar como tiene que ser: humilde, cercana, como dice el Papa. Lo importante no es tener confianza en la Iglesia, sino que en Jesucristo".
Nahuelcura comenta que "la situación que estamos viviendo no hace que esté en la primera línea el cambio de monseñor Gonzalo Duarte; creo que la prioridad es el caso de Osorno, de ver si el Papa acepta las renuncias de los otros tres obispos mencionados, de Linares, de Talca y de Santiago, incluido el de Osorno, y a raíz de eso, claro que va a tomar un tiempo tener nuevos obispos, quizás se haga no con el método tradicional, sino con el método del Papa Francisco, que es buscar obispos para estos tiempos con las características de estos tiempos. Pastores, como él dice, que sean verdaderos profetas de la verdad".
Además de agradecer el trabajo del obispo Duarte, Nahuelcura mencionó que espera que el nuevo obispo, "si es que viene pronto, esté también al servicio de los pobres, los migrantes, los enfermos y esta iglesia del día a día, que está en los cerros, los hospitales, las cárceles, en cada una de las personas que, a pesar de las crisis y pérdidas de confianza, siguen trabajando por el pueblo de Dios".
Por su parte, el cura Opaso señala que "nunca tendremos nombres porque eso es algo súper privativo del Papa, pero me gustaría que cambiaran al nuncio, porque es el gran responsable de esto, y lo digo con toda responsabilidad. Que llegue un nuncio nuevo y que sea capaz de sondear al pueblo de Dios para que la gente pueda decir qué quiere para cada lugar. En nuestro caso, creo que se necesita un sacerdote de mucha cancha pastoral, un sacerdote que se entregue por su pueblo, no por la curia".
"Me preocupa que en Roma se hayan dado cuenta que actuaron mal y que por eso ponen el cargo a disposición. ¿Por qué no lo hicieron ante la comunidad antes?"
Gonzalo Bravo, Párroco de la Iglesia La Matriz"
"Gracias a Dios se filtró el documento más importante que ha salido del Papado, un texto que nos hizo de nuevo soñar en la Iglesia que queremos para Chile"
Enrique Opaso, Director del Refugio de Cristo"
"El Papa busca hacer un nuevo Pentecostés en una Iglesia que necesita luces, reconciliación con sus pastores, que estén a la altura de los tiempos, en sintonía con la gente"
Pedro Nahuelcura, Párroco de Iglesia Corazón de Jesús"
Padre Opaso denuncia a obispo
El padre Enrique Opaso denunció la censura de un obispo chileno -del cual prefirió no dar el nombre, aunque aseguró que no era de la región- luego de que él diera una entrevista en este Diario comentando el viaje de la Conferencia Episcopal a Roma. "Recibí el llamado de un obispo que me retó fuertemente y me dijo tú no entiendes nada, lo que hay que hacer es otra cosa, como borrón y cuenta nueva. Entonces yo le mandé un correo diciéndole ¿sigues manteniendo lo que me dijiste días atrás? Porque es súper injusto, los curas estamos súper dolidos, estamos mal del alma porque nosotros somos los que ponemos la cara, entonces que además un obispo te reclame que cómo es posible que yo haya dicho eso de los obispos... yo le dije ahora 'bueno, pregúntale al Papa, ¿por qué les dijo lo que les dijo? Porque claro, si se los dice un cura no tiene mayor peso, pero el Papa dijo 10 veces más fuerte lo que yo dije en El Mercurio de Valparaíso hace 10 días".
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No podemos desaprovechar la instancia de tener una corporación regional que aborde las dos temáticas, patrimonio y turismo"
manuel millones, consejero regional UDI, sobre nueva Corporación