Alexis Paredes R.

El arquitecto y académico Roberto Barría Kirkwood fue designado por el Ministerio de las Culturas para asumir la presidencia del directorio del Parque Cultural de Valparaíso (PCdV). Fundador del Departamento de Arquitectura de la UTFSM, lugar que dejó en marzo pasado tras 22 años de gestión, reconoce que el nombramiento lo tomó por sorpresa, pero está dispuesto para "asumir el desafío".

El escenario en el que se conformará el nuevo directorio de la entidad no es para nada sencillo. El Parque Cultural de Valparaíso enfrenta una grave crisis financiera, tras detectarse graves irregularidades de gestión y un desorden administrativo que ocasionaron un déficit de $ 250 millones y la solicitud de una auditoría a la Contraloría para aclarar el destino de más de $ 1.200 millones que otorga el Estado para su financiamiento, que incluso mantienen en incertidumbre la forma en que se pagarán los sueldos de los funcionarios en los próximos meses.

Producto de esta situación, el Ministerio de Bienes Nacionales entregó un plazo perentorio de 90 días para el uso del inmueble fiscal, a objeto de esclarecer todas las anomalías detectadas luego que la actual directora ejecutiva, Nélida Pozo, asumiera el cargo. Dentro de estas se cuentan rendiciones fuera de plazo, gastos sin justificar, proveedores que presentaban conflicto de interés con altos funcionarios, pagos de horas extras sin acreditar y reajustes de sueldos desmedidos, sumados a graves falencias en la administración y falta de control por parte del directorio de la entidad, que funciona como una corporación de derecho privado y que recibe, anualmente, un millonario aporte estatal.

El arquitecto Barría, que dentro de su vasta experiencia fue director del Programa de Recuperación y Desarrollo Urbano de Valparaíso y "rostro" de comerciales del ahora extinto proyecto del Mall Barón que impulsaba el Grupo Plaza, es cauto a la hora de adelantar juicios respecto a la situación del Parque Cultural.

"Lo primero es interiorizarse de cuál es la situación real, se necesita un periodo para hacerse una idea de la actual situación", consigna el profesional, junto con "agradecer la deferencia" para su designación.

Añade que "cuesta hacer una observación que sea relevante desde afuera, ya que uno podría estar culpando tal vez a personas que no tienen responsabilidad o, a su vez, salvando a personas que sí la tienen. Uno desconoce cuál es la real situación y sólo se ha enterado por la prensa, pero sin la información de los datos reales. Tengo entendido que hay auditorías en curso y toda esa información estará disponible para el directorio", con cuyos integrantes, cuatro de ellos también nuevos, espera reunirse a la brevedad para "poder conocernos y establecer los criterios sobre cómo funcionar".

- ¿Cuál es la relevancia del PCdV para la ciudad y su rol en materia de cultura?

- Es una entidad muy significativa para Valparaíso, la posibilidad que tiene de acercar a la ciudadanía al disfrute de una buena ciudad, la cultura es uno de los motores de las ciudades. Me parece que hay un arduo trabajo que marcar, seguramente habrá problemas que resolver y hay que mirar al futuro. Ver de qué manera se logra cumplir con las expectativas que tiene la ciudadanía de Valparaíso respecto de una organización tan importante como el PCdV.

- Tomando en cuenta el grave problema financiero que enfrenta el Parque, ¿es vital no perder la glosa presupuestaria que le inyecta el Estado?

- Evidentemente, cualquier pérdida de un criterio de financiamiento que lo ha sustentado en el tiempo sería perjudicial. Desconozco cuáles son las cifras del financiamiento y cómo está distribuido, pero quitar un financiamiento que ha sido parte del funcionamiento del Parque pareciera ser un contrasentido. Si es que existe un déficit, habrá que ver cómo se cubre. Como parte de un directorio lo que se tiene es más bien una mirada estratégica de direccionamiento hacia dónde el Parque debiera orientar su acción, siguiendo determinadas políticas culturales que están en boga y poder generar el rol del Parque en tal sentido. Respecto al tema del manejo financiero, el director ejecutivo debe tener la gestión clara y muy acreditado cómo se debe financiar la gestión durante un periodo presupuestario.

- ¿Producto de esta falta de recursos cree que es importante hacer algunas modificaciones al modelo de gestión del PCdV, que permita generar recursos por otras vías y no sólo por aportes estatales?

- Tras revisar la cuenta pública de la ministra, respecto de esos temas de financiamiento estaba abierta a generar todas las relaciones que fueran posibles de dirigir dinero hacia la gestión de las entidades culturales. Se me ocurre que la relación con otras empresas públicas, con otras empresas privadas, con otros agentes y gestores, está dentro de los lineamientos que son de la ministra. Desde luego que la asociatividad público-privada tiene varias alternativas y fórmulas de financiamiento, todo lo que son las donaciones culturales y exenciones tributarias por colaboraciones han sido, de alguna manera, incentivo al presupuesto de las distintas organizaciones culturales y eso hay que gestionarlo. Esa gestión corresponde al director del parque, uno va a abrir puertas y generar condiciones para que las distintas alternativas de financiamiento se abran lo más posible, resguardando que esto se haga no desde el usufructo del dinero, sino que desde el desarrollo cultural.

- ¿Cree que hubo una mala gestión de los anteriores directores ejecutivos -Justo Pastor Mellado y Jorge Coulón- que terminaron en el descalabro económico que ahora enfrenta el PCdV? ¿Faltó una mayor fiscalización por parte de ellos como responsables de velar por las finanzas?

- Uno lo que ha escuchado es información periodística, pero no tengo información respecto a indicadores o datos exactos. Es difícil tener una opinión o un juicio, uno se da cuenta al leer la información que se produce un déficit de recursos porque la gestión, aparentemente, no fue la mejor, pero desconozco absolutamente cuáles son los argumentos que permitan hacer dicha afirmación. Por eso entiendo que la Intendencia solicitó una auditoría y la Contraloría está realizando un análisis profundo. Cuando se constituya el directorio y haya una formalización, como ente uno espera tener la información para tomar las medidas adecuadas. Se está en una crisis de recursos, pero es difícil saber si esa crisis es por una mala gestión u otra causal, teniendo los antecedentes emitiré un juicio al respecto.

- ¿Conoce a la actual directora ejecutiva, Nélida Pozo?

- He trabajado con ella. Desde la Universidad Santa María tuve un proyecto con el Parque el año pasado, a través del Departamento de Arquitectura. Tuvimos un cierto conflicto en su remate, por lo tanto, en el inicio de la actual dirección he tenido contacto con ella para poder revisar este tema y como parte de la universidad estuvimos aclarando los temas. No he tenido ningún conflicto con ella, hemos trabajado y generado las instancias necesarias para resolverlo. Desde ese punto de vista, he estado en relación con la directora y hemos funcionado perfectamente.

- Algunos han propuesto cambiar la institucionalidad o el modelo de gestión con que funciona el PCdV. ¿Es posible o cree que con la actual corporación de derecho público se puede funcionar bien?

- Creo que la fórmula de corporación que tiene el Parque y que ha generado los estatutos y toda la mecánica para poder operar, cuando uno inicia un camino creo que no hay que partir diciendo que todo lo anterior estaba malo. Si ha habido una orgánica, que de alguna manera le ha dado sustentabilidad al PCdV, independientemente que pueda tener problemas puntuales, siempre será posible revisar criterios de ajuste, pero cambiar una institucionalidad es dar vuelta la página y no me parece razonable con las cosas funcionando. La solución del Parque no pasa por cambiar la institucionalidad, siempre habrá la posibilidad de revisar cuál es la orgánica que lo está gestionando, pero no me parece posible decir que vamos a hacer una nueva institucionalidad. Si es así, vamos a estar partiendo de nuevo cada vez que se toma una decisión y no parece razonable. Siempre se está abierto a todo, pero habiendo una orgánica de corporación, esto ha seguido un proceso y se revisará. Además, uno tiene un margen de acción que está limitado por lo que son los propios estatutos, existe una mecánica que está operando y dentro de eso se revisarán todas las situaciones y se verá cómo es que colocamos los énfasis en sacar adelante esta situación para que el Parque vuelva a cobrar la relevancia que tiene para el desarrollo de la ciudadanía de Valparaíso.

- Durante su exposición ante la Comisión de Cultura de la Cámara, el intendente Martínez fue enfático en señalar que, técnicamente, el Parque estaba en quiebra. ¿No le genera incertidumbre que la institución que usted va a presidir no tenga recursos ni para pagar a sus trabajadores?

- Por eso el desafío es grande. Cuando uno ha estado tratando de que Valparaíso surja y ha aceptado cargos como la dirección del Programa de Recuperación y Desarrollo Urbano de Valparaíso para poder generar instancias en las cuales, aparentemente, se está en una crisis terminal, pueda salir de ahí y aportarle a la ciudad nuevas oportunidades. En el sistema público, el tema de estar quebrado tiene que ver en cómo uno redirige recursos y optimiza en función de un plan. Entiendo que a mí me llamaron para ayudar a organizar ese plan, que resuelva un problema de crisis momentáneo y plantee un escenario en el cual la propia gestión del Parque pueda tener una autosustentabilidad de recursos. Esa es la misión y yo la entiendo así. La crisis es de un estado de situación de recursos que podría llamarse quiebra, pero la tarea es cómo reorganizamos toda la gestión para que esto salga adelante y tenga un rendimiento que sea eficiente en términos económicos.

"Hay un arduo trabajo que marcar, habrá problemas que resolver y hay que mirar al futuro. Ver de qué manera se logra cumplir con las expectativas que tiene la ciudadanía respecto de una organización tan importante como el PCdV""

"La crisis es de un estado de situación de recursos que podría llamarse quiebra, pero la tarea es cómo reorganizamos toda la gestión para que esto salga adelante y tenga un rendimiento eficiente""

Sharp y Mellado, convocados por la Comisión de Cultura

El intendente Jorge Martínez, la actual directora del Parque Cultural de Valparaíso, Nélida Pozo, y su antecesor, el líder de Inti Illimani, Jorge Coulón, asistieron ayer a la invitación que extendió la Comisión de Cultura y las Artes de la Cámara de Diputados, donde expusieron antecedentes sobre la crítica situación financiera que enfrenta la entidad, las acciones a seguir para establecer eventuales responsabilidades administrativas o incluso hechos que podrían tener carácter de delito. Además, respondieron múltiples consultas de los parlamentarios al conocer el calamitoso estado financiero del PCdV y las acciones para corregir las anomalías internas.

La comisión, presidida por el diputado Marcelo Díaz (PS), resolvió además realizar una nueva sesión para abordar la problemática del Parque, en la que se espera contar con la presencia del alcalde Jorge Sharp; el exdirector ejecutivo, Justo Pastor Mellado, quien durante su gestión contrató al removido jefe de Administración y Finanzas sindicado como el principal responsable de las irregularidades que tienen sin aclarar el destino de más de $1.200 millones, y al presidente del sindicato de la entidad.

Como presidente de la Comisión de Cultura y como diputado por Valparaíso, Marcelo Díaz enfatizó que "nos interesa preservar el Parque y que, además, en este ejercicio mixto público-privado, nos interesa que el próximo presupuesto de la nación siga contemplando recursos para el Parque y que esto no vaya a significar que se retiren los recursos y por esa vía el PCdV se muera".

El diputado Luciano Cruz-Coke se mostró disconforme con el informe presentado, el cual calificó que "no convence a nadie", por lo cual solicitó "oficiar a los órganos involucrados" en la investigación de las eventuales anomalías para "tener toda la información en este caso".

En tanto, el diputado Renzo Trisotti (UDI) propuso solicitar una comisión especial de fiscalización a la Contraloría General "para tener resultados mucho más rápido".

Díaz también levantó las dudas con respecto a los graves delitos que se denuncian en el informe elaborado por el PCdV, tales como falsificación de firma, conflicto de intereses y faltas a la probidad en contra de un funcionario, y si se efectuaron las denuncias correspondientes ante la justicia.

9 integrantes tiene el directorio de la Asociación Parque Cultural de Valparaíso, de los cuales su presidente es designado por el Ministerio de las Culturas y las Artes.

$ 1.200 millones es el presupuesto anual del PCdV, de los cuales cerca de $1.500 aún no han sido justificados del ejercicio presupuestario anterior, entre ellos un déficit por $ 250 millones.

90 días fue el plazo del permiso provisorio entregado por el Ministerio de Bienes Nacionales al PCdV, a objeto de nombrar el nuevo directorio y conocer el resultado de las anomalías denunciadas.