Luis Cabrera del Valle

Cuando tenía 14 años, Ambar Soruco le pidió a su abuelo que la llevara a probarse en el equipo de fútbol femenino de Everton. Bajaron desde su casa en Achupallas, por el Camino Internacional, hasta el complejo del club oro y cielo ubicado en Reñaca Alto. Ese mismo día le comunicaron que había quedado seleccionada.

Así partió la relación de la viñamarina con el profesionalismo. Su vínculo con el balón venía de antes, quizás lo heredó por la sangre, porque su padre Manuel Soruco es un reconocido futbolista amateur a nivel regional.

"En mi familia son casi puros hombres, y me llevaban a la cancha todas las semanas, mi papá y mi abuelo jugaron siempre. En muchas partes conocen a mi familia por el fútbol", explica la jugadora.

Ese vínculo atávico de los Soruco hoy se refleja en Ambar, quien integra la Roja adulta que clasificó al Mundial femenino de Francia 2019 y además acaba de ser fichada por el EDF Logroño, equipo que milita en la Primera División de España. El viernes pasado viajó a Europa para integrarse a su nuevo club.

"Mi abuelo me acompañaba todas las noches a entrenar, porque las prácticas eran de 7 a 9. Fui a Everton sólo porque soy de Viña, no podía irme a Santiago porque era muy chica", relata la lateral derecho.

Cuando creció, fue convocada a la Selección Nacional Sub 17 y luego defendió a Valparaíso en los Juegos Binacionales. Enfrentando al equipo de la Región Metropolitana la vio el entrenador de las capitalinas, quien le ofreció llevársela a Universidad de Chile, el equipo del que Ambar Soruco se declara hincha.

Cuando estaba en la "U", partió por tres meses a jugar en el Abu Dhabi CC de Emiratos Árabes junto a otras dos compañeras. En mayo de este año, en tanto, emprendió rumbo a Brasil para defender por un breve lapso al club brasileño Associaçao Esportiva 3B da Amazonia. Hoy, su presente está en Logroño.

"Desde chiquitita quería irme a jugar afuera, mi primer objetivo era llegar a la selección, y después de eso me llevaron a jugar en Emiratos Arabes, tenemos un representante que es Edgar Merino, de la agencia Solo Cracks, que es el que hace todos los contactos. Estuve tres meses allá y volví a la 'U'. Después me fui a Brasil y hace poquito regresé. Edgar me buscó un club en España", explica la futbolista.

Soruco no se amilana por la experiencia que le tocará vivir en Europa, aunque será la primera vez en que no compartirá equipo con otras chilenas.

La viñamarina se lo toma con optimismo, y afirma que "vamos a ver la experiencia que me toca, ojalá sea para mejor. No tengo ni una información del club al que voy, sólo sé que recién subió a Primera, por eso se empezaron a reforzar y me tocó a mí. Desde chiquitita que he salido, no me da tanta pena dejar a mi familia".

Sobre Logroño no sabe mucho, sólo que es "un pueblo chiquitito y lindo". Luego mira al techo y dice que "ojalá esté bien y me sienta cómoda con las otras niñas. Igual los españoles son medios fríos y pesados, ojalá me acomode bien".

La cabeza en el mundial

En términos deportivos, la achupallina dice que esta experiencia es "lo mejor que le podía pasar", porque sabe que para jugar el Mundial del próximo año necesita un ritmo competitivo que en nuestro país no iba a encontrar.

Con la ilusión de jugar los amistosos de Chile contra Estados Unidos del 31 de agosto y el 4 de septiembre, la defensa de la Roja reconoce que no tienen la experiencia de otros equipos que sí han jugado Copas del Mundo.

"No sé cómo ha ido mi evolución, creo que tengo una gran proyección, puedo ganar experiencia en la selección por compartir con chiquillas que son mayores que yo. El entrenador no me dice nada, no habla mucho, se enfoca principalmente en los entrenamientos y ya. Pero no se acerca a nosotros y nos dice que nos falta tal o cual cosa, aunque sí trabaja mucho", resume al hablar sobre su experiencia.

Lo quen vivió durante la disputa de la Copa América en La Serena también es relevante para Ambar Soruco. Se emociona al recordar el aliento que tuvo el equipo durante la disputa del torneo aunque reconoce que ella no es conocida, pues no le tocó ser titular en el certamen.

"Fue grande el apoyo cuando jugamos la Copa América, la gente apareció de la nada, nos iban a ver todos los días a la concentración. Fue 'heavy', nunca pensamos que iba a ser así, de un día para otro perdimos nuestra privacidad, pero está bien, porque nunca habíamos sentido ese apoyo, nunca habíamos llenado un estadio con fútbol femenino, fue lindo. Yo no me siento un personaje público tampoco, otras sí, como la 'Tiane' (Endler) que son más conocidas, yo estoy recién partiendo", asegura.

Sobre la relevancia del fútbol femenino en nuestro país, la deportista oriunda de Viña del Mar tiene una postura clara: "hoy tenemos más ojos encima".

Por eso mismo explica el revuelo que causaron las palabras de su compañera Fernanda Pinilla, quien se declaró feminista y reveló ser lesbiana.

"El fútbol femenino no había sido tan visto y hoy que la situación cambió se sabe que tenemos distintas posturas, somos todas normales, pero distintas. Fernanda Pinilla se quiso expresar, habló de ella y bien, a mí me pareció bacán. Ella es muy feminista y está bien, me parece que sirve para que la gente abra un poco más la mente y nos apoye más. Dentro de la selección no se conversan demasiado este tipo de cosas, pero sí somos compañeras, la Pinilla es mi amiga", relata Soruco.

La ola feminista es otro de los temas que le preocupan a la futbolista, quien celebra el cambio de paradigma en la sociedad chilena.

"Me parece muy bien lo que está pasando en el país con el feminismo, y creo que Fernanda Pinilla sabe del tema, sabe cómo hablar, sabe expresarse mejor que muchas, por eso me parece bien que haya hablado. Es una líder, aunque no sea capitán del equipo, creo que todas aportan en cosas distintas", dice.

Y también le da una vuelta al impacto que puede tener este equipo: "pienso que vamos a ayudar a las niñas que vienen más abajo. Eso es lo que todas queremos, que esto siga creciendo y que las niñas que vienen desde abajo tengan todo lo que nosotras no pudimos tener. Espero que de ahora en adelante los mismos papás apoyen a sus hijas, porque a muchos no les gusta, seguimos teniendo esa mentalidad de que el fútbol es sólo para hombres".

"A mí me apoyó toda mi familia. Mi papá le dice a todo el mundo que estoy en la selección, y no me gusta mucho, ni las entrevistas ni que hable de mí. Pero así es él, soy su orgullo, no tengo nada que hacer"

Ambar Soruco, Lateral de la Roja"

años tiene la viñamarina Ambar Soruco, seleccionada nacional y refuerzo del EDF Logroño de España. 22