DT de "Lobitas": "Son el futuro por los próximos diez años"
BALONMANO. Felipe Barrientos, DT de la selección femenina que concluyó en un histórico lugar 18 en el Mundial Juvenil, ahora jugará y dirigirá en España.
A mediados de agosto, la selección juvenil femenina de balonmano cerró una histórica participación en el Mundial de la categoría desarrollado en Polonia. Al mando técnico del villalemanino Felipe Barrientos, las "Lobitas" superaron con creces sus objetivos luego de debutar con un inédito triunfo en la fase grupal ante Egipto por 23-12.
Desde ahí en adelante las nacionales fueron trabajando el torneo partido a partido, buscando sumar 2 puntos más que las llevaran a los octavos de final del certamen. Muy cerca estuvieron de lograrlo, pero cayeron por 21-20 con Croacia en el último duelo de la fase grupal, quedando ad portas de escribir un hito histórico en el balonmano femenino nacional. En la denominada Copa Presidente, las chilenas vencieron a Eslovaquia por 29-23, perdiendo el último partido con Montenegro por 30-16.
"siempre quiere más"
"Ese ser competitivo que llevamos dentro siempre quiere más, pero en general, haber llegado al puesto 18, ganando dos partidos, aunque suene un poco a triunfo moral, y luego de haber perdido por un punto con Croacia y haber sido competitivos con Suecia y Dinamarca, la verdad es que deja buenas sensaciones", asegura Barrientos, agregando que "el proceso ha sido bueno y las jugadoras juegan mejor. Entendieron cosas que en el camino era imposible entrenarlas, y lo asimilaron bien, así que en ese sentido estoy contento y conforme".
En vista de resultados a todas luces históricos para el balonmano femenino de nuestro país, el también portero de la selección masculina adulta no esconde su esperanza en torno a la enorme proyección que tiene el equipo que le tocó dirigir.
"Tanto la generación del mundial Junior (donde fue ayudante técnico), como Juvenil, hay que proyectarlas y con mucha ilusión para los Juegos Panamericanos del 2023 en Santiago. También hay adultas que son muy jóvenes y que tienen 22 o 23 años y llegarán perfectamente, con menos de 30 años, al 2023. Muchas ya han tenido experiencia en Europa, y entre los dos mundiales se han quedado seis jugadoras jugando allá, asi que van a tener mucha más calidad y experiencia pensando en el futuro. Es una realidad que este es el futuro del balonmano femenino para los próximo diez años", sostiene Barrientos.
Proyección con apoyo
Sin embargo, a la hora de ahondar en el futuro de la selección femenina, el entrenador villalemanino es enfático en señalar que para pensar en grande es necesario que se mantenga el apoyo y que se aumente el financiamiento, y para ello deben trabajar todos los estamentos, desde el Comité Olímpico de Chile hasta la Federación.
"Esto no es magia, no porque eres bueno en Junior vas a ser bueno en Juvenil o en Adulto. Aquí hay que mejorar los medios en los cuales se desarrollan nuestros deportistas, porque para el 2023 quizá no van a ser tan buenas si no tienen Proddar o cobertura médica, o giras en Europa seguidas todos los años. Esos son estándares mínimos para pensar en una medalla panamericana en el 2023", recalca Barrientos.
A su juicio, en ningún caso hay que esperar hasta el 2021 o 2022 para comenzar un proceso con el campeonato a la vuelta de la esquina. Desde su perspectiva y experiencia, el trabajo debe ser a largo plazo, esa es la clave. "Si no las apoyan y no está lo mínimo para llegar arriba, efectivamente nos quedaremos en que había un equipo bueno", añade.
Desde España
Por estos días, Felipe Barrientos se encuentra en España, donde llegó a defender el pórtico del Club Balonmano Zamora, que milita en la División de Honor Plata, la segunda categoría nacional de balonmano masculino hispano. Allí trabajará también como entrenador en la sección femenina, con el equipo senior, que juega en tercera división, y el infantil, con niñas de 13 y 14 años.
"Más que cerrar una etapa, creo que me sigo perfeccionando, y no me desligo totalmente del balonmano chileno. Voy a estar pendiente y cada vez que tenga que ir a Chile tendré participaciones con las selecciones nacionales", confiesa.
"Es venir a buscar acá más aprendizaje, más experiencia y buscar una mejor versión de uno para volver a Chile a final de temporada o en dos o tres años más. Y también dar una mano, todo lo que uno va aprendiendo acá tratar de traspasarlo a la gente joven y a los entrenadores en Chile", agrega.
Motivado
A Barrientos se le escucha motivado, con muchas ganas, sobre todo porque estará bajo el alero de un ambiente mucho más competitivo, y en su caso como jugador, una estructura profesional.
"Lo tomo como una buena forma de encadenar un proceso de fin de carrera deportiva a un muy buen nivel, exprimiéndome hasta el último y tratando de estar en mi mejor estado de forma a todos los niveles y encadenarlo ya ojalá a una carrera profesional de entrenador, ya sea en Chile o en el extranjero", afirma el villalemanino, quien sueña con ganarse un lugar en el Zamora y después, por qué no, dar un salto a las grandes ligas. "Mis aspiraciones no tienen límites", avisa con una ilusión enorme.
"A la generación del mundial Junior y del Juvenil hay que proyectarlas y con mucha ilusión para Santiago 2023"
Felipe Barrientos, Entrenador nacional"