Alexis Paredes R.

La organización del carnaval Mil Tambores enfrenta un nuevo escollo para desarrollar las actividades de este 2018. A la propuesta de la Gobernación de reducir el evento a sólo un día y la incertidumbre sobre el financiamiento que entregará la Seremi de las Culturas, se suma ahora la resolución del directorio del Parque Cultural de Valparaíso (PCdV), que rechazó la solicitud de la corporación que encabeza Santiago Aguilar para facilitar espacios del recinto para el desarrollo de parte del calendario del carnaval.

Además, el directorio del PCdV resolvió derivar los antecedentes al Comité de Ética de la Asamblea de Socios, luego que un funcionario del Parque denunciara una agresión verbal y física por parte de Aguilar, director del Mil Tambores, episodio que habría ocurrido el pasado 23 de agosto en el Edificio de Transmisión (exgalería de reos), cuando se analizaban alternativas para resolver el tope de fechas.

Cabe consignar que Aguilar es integrante del Centro Cultural de Playa Ancha, organización que pertenece a la asamblea de socios del PCdV, por lo que podría ser sancionado según lo estipulan los estatutos.

El presidente del directorio del PCdV, Roberto Barría, comentó "se trató de convenir con él (Aguilar) una modalidad de uso distinta, se estaba intentando negociar una posibilidad de combinar un uso parcial que pudiese complementar las iniciativas. Sin embargo, no hubo aceptación y se generó el problema. Había una voluntad de querer resolver el tema. No obstante, la propia actitud de esta persona, a través de medidas de presión o de violencia, ya no deja margen a poder ceder. El Parque estaba negociando con él".

En la misiva enviada por el directorio del Parque Cultural al propio Aguilar, se da cuenta que el 23 de julio pasado se solicitó formalmente el uso de espacios por parte de la Corporación Mil Tambores. Sin embargo, el requerimiento fue rechazado ya que desde el año pasado el recinto estaba solicitado por la Escuela de Psicología de la Universidad de Valparaíso para el desarrollo de un seminario internacional los días 5 y 6 de octubre, lo cual fue aprobado a fines del año pasado.

La carta dirigida a Aguilar también da cuenta que "dada la envergadura de este seminario y la cantidad de invitados nacionales e internacionales, con pasajes y reservas de alojamientos comprometidos, nos fue imposible gestionar cambio de fecha o utilización de otros espacios para el desarrollo del Carnaval Mil Tambores en nuestras dependencias".

Respecto al tema de la agresión al jefe de Mediación del PCdV, Barría explicó que funcionarios denunciaron que "hubo una actitud violenta de parte de Santiago cuando se le trataba de explicar esta situación, que terminó con una cierta agresión física, de lo cual hay testigos. El directorio analizó el tema y se resolvió informar al Comité de Ética de la asamblea de socios, según lo establecido en los estatutos, para que se pronuncie respecto a esta situación".

"Nos parece que cualquier acto de violencia enloda un poco el concepto que tiene el Parque, que es de la expresión de las culturas, que tiene que ver más con la aceptación del otro que con la negación del otro", sentenció Barría sobre el impasse. Agregó que "es una actitud que no aporta a la convivencia y a una racionalización del uso del Parque en base a acuerdos y no en base a presión".

Otro de los integrantes del directorio, Juan Ayala, confirmó que la solicitud de la Escuela de Psicología fue hecha con antelación y "por los canales formales que corresponden, según el acta, el señor Aguilar nunca formalizó la solicitud, no obstante es posterior a la realizada por la Escuela de Psicología. Se le ofrecieron alternativas de cambio de fecha, se hicieron múltiples gestiones; sin embargo, hubo un hecho que el directorio no acepta de ninguna manera, cual es la violencia física o verbal hacia cualquier funcionario".