La figura de Harold Mayne-Nicholls irrumpió con fuerza en el mundo del fútbol chileno hace unos años. Si bien desde el inicio de los '90 estuvo ligado a la FIFA, su rostro estaba lejos de ser reconocido popularmente. Sin embargo, su arribo a la ANFP en lugar de Reinaldo Sánchez (2007) y principalmente el haber convencido a Marcelo Bielsa para que asumiera en la Selección Chilena, lo convirtieron en una persona especialmente reconocida y apreciada.

Hoy, con 57 años, Mayne-Nicholls vuelve a la carga. Quiere reasumir en la presidencia del fútbol chileno, aunque sabe y asume que el escenario es muy distinto, marcado por los coletazos que sigue dejando la administración de Sergio Jadue y por las divisiones internas que existen en el organismo que, según él mismo sostiene, se verifican en la presencia de tres candidaturas al sillón de la ANFP. Junto al periodista participarán del proceso eleccionario, fijado para el 29 de noviembre, los dirigentes Sebastián Moreno y Jorge Uauy.

- ¿Por qué quiere volver a la ANFP?

- En los trabajos que hago en la Fundación "Ganamos Todos" viajo mucho por el país. Me entrevisto con muchísima gente y siempre existió una pregunta recurrente: ¿cuándo vuelve al fútbol?. Eso era de todos los días.

- Sin embargo, al interior del Consejo de Presidentes, cuyos miembros son los que votan en la elección, me parece que el tema está bien dividido...

- Claramente, y sería especular de mala manera el decir que tengo el apoyo necesario como para ganar la presidencia de la ANFP. Hoy existen profundas divisiones al interior del fútbol. Tan así que es primera vez, que yo recuerde, que se puede dar la posibilidad de tener tres candidatos. Eso habla claro de lo que está sucediendo al interior de la actividad y genera, entre comillas, un desafío mayor. Para mí el objetivo siempre fue el recuperar y acrecentar la imagen del fútbol chileno tras el desastre de Sergio Jadue. Ahora, ello también habrá que complementarlo con el lograr una unidad mucho mayor. Una cosa son las elecciones, en donde todos podemos tener diferencias, pero eso no significa que después no nos sentemos a conversar. Acá hay también un potencial social gigante por lo que no nos podemos dar el lujo de estar tan divididos, porque nos miramos feo, ya que al final es el mismo fútbol el que paga los platos rotos.

- Pero las divisiones en el fútbol van bastante más allá que por mirarse feo. ..

- Claramente, y eso hay que tratar de revertirlo, porque así no podemos seguir. El fútbol no puede hacerse daño a sí mismo. Hay que empezar a trabajar el tema con otra visión. No puede ser que alguien sea estigmatizado por sentarse a conversar conmigo. El mundo no es así, acá hay derecho a intercambiar opiniones. El fútbol está demasiado polarizado y ese es un grave problema.

- ¿Una polarización que se da por el tema económico?

- No necesariamente. Acá hay mezclas de todo tipo. Si tú observas el componente de los distintos sistemas encuentras que está todo muy mezclado y difícil de desentrañar.

- El caso Sergio Jadue marca un antes y un después para el fútbol chileno.

- Sin duda. Con Sergio Jadue el prestigio se fue al suelo, todo el sistema sufrió porque fue una verdadera "bomba atómica". Se sufrió en lo deportivo, en lo económico, el sistema financiero, la credibilidad, la imagen pública. El daño que causó no tiene defensa y eso es lo peor... el tema de (Sergio) Jadue es indefendible.

- ¿Qué siente cuando ve las imágenes de Jadue caminando por Miami?

- Da lo mismo lo que yo sienta, lo único que pido es que devuelva la plata que se llevó. Que la reintegre al fútbol chileno.

- Siguiendo con el mismo tema, ¿no le da la impresión que hay varios dirigentes y exdirigentes que aún no han asumido del todo su responsabilidad en lo que fue la gestión de Jadue?

- Puede ser, pero a esta altura no se gana nada. Ya pasó y me imagino que cada uno sabe dónde le aprieta el zapato.

- ¿Cómo evalúa la gestión de Arturo Salah al frente del fútbol chileno?

- La evalúo bastante bien. Hablando en términos futbolísticos, a Arturo (Salah) le tocó bailar con la fea. Le tocó de lo peorcito, tuvo que entrar a ordenar un lío muy grande que había y que le impidió desarrollar algunas áreas.

- ¿Le ofreció a Antonio Bloise que lo acompañara en esta aventura por volver a la presidencia de la ANFP?

- Sí, le pedí que me acompañara porque siento que sería un tremendo aporte. Pero él tiene sus cosas personales y aún no me ha respondido. La verdad es que me encantaría que me acompañe en la ANFP.

- Pero tuvieron sus desencuentros en el pasado...

- Y eso ayuda muchísimo, porque quiere decir que el mismo problema lo vemos con visiones distintas y al final del día hay que ponerse de acuerdo y construir.

- ¿Cuáles son las diferencias más importantes entre usted y las otras dos candidaturas?

- No las sé y no las entiendo. Puede ser el estilo o la forma de presentarse, porque los grandes temas ya están resueltos y los otros hay que convivir día a día, porque te obliga el sistema.

- Una gestión que se encontraría sin CDF.

- Por eso digo que los grandes temas ya están resueltos.

- ¿Qué piensa de la arremetida de la política en el fútbol?

- Es que se trata de algo inevitable. Aunque no guste, en tiempos reales siempre se ha dado. Cuando se creó la Federación en 1895 uno de los primeros candidatos o presidente, la verdad no recuerdo, fue el almirante Arturo Fernández Vial, Ministro de Defensa de la época. No hay cómo evitarlo.

- Más allá que los hinchas no voten en la elección, usted sabe que tiene un respaldo popular gigantesco. ..

- Y eso es lo que me hace seguir adelante. Yo sé que la gente te apoya y por mi forma de ser, no les voy a dar la espalda.

"El fútbol está demasiado polarizado y ese es un grave problema" "Da lo mismo lo que yo sienta, lo único que pido es que (Jadue) devuelva la plata que se llevó. Que la reintegre al fútbol chileno""

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Nos ha faltado la puntada final y fortuna. Yo asumo mi responsabilidad como técnico, pero Colo Colo aún está para pelear sus opciones".

héctor tapia, técnico del Cacique luego del empate ante O'Higgins