Esta semana continuará la discusión del Presupuesto 2019 en la Cámara de Diputados, que ya fue analizada por la Comisión Mixta. Hace un par de semanas nos reunimos con un grupo de parlamentarios y alcaldes de la oposición para analizar distintas partidas del proyecto que tienen relación directa con el desarrollo de nuestra región y sus comunas, centrando el análisis en tres aspectos: Atención Primaria de Salud, Inversión Regional y Vivienda.
Dado que el reajuste en estas materias era exiguo, finalmente las partidas fueron rechazadas por la Comisión Mixta, con el objeto de que el Gobierno elabore una nueva propuesta.
En materia de Salud nos llama la atención el escaso reajuste existente en los fondos de atención primaria. Dichos recursos son suministrados a los servicios de salud regionales, los cuales, a su vez, los destinan a dos fines: para el financiamiento de los servicios de atención primaria administrados por ellos y para los consultorios de las comunas.
La distribución de estos recursos se realiza según un cálculo per cápita, basado en usuarios inscritos por consultorio. A nivel nacional, esta asignación per cápita solo tuvo un aumento de $ 200 pesos, muy lejos de los reajustes de los últimos años que bordeaban un 7%. En nuestra región, las transferencias para este ítem en el nuevo proyecto para el Servicio de Salud de Valparaíso-San Antonio es de un 4,92%, siendo el más bajo desde 2012; mientras que en el de Aconcagua es de 7,95%, el menor desde 2014.
En Inversión Regional al desglosar pudimos concluir que sólo existía un aumento artificial del presupuesto regional. Se esperaba -según lo expuesto por el Ejecutivo- que habría un aumento de un 4,2% para este año, pero notamos que la diferencia entre el financiamiento del 2018 y el nuevo proyecto se debe a que $ 4.500 millones son ahora transferidos directamente por la Subdere para fines patrimoniales y transporte y son los mismos recursos que el año pasado eran provisionados anualmente desde dicha Subsecretaría al Gobierno Regional: es decir, hay solamente un cambio en la administración, pero no en los montos. Ello nos arroja que, omitiendo dichos montos, existe una disminución de un 2%, respecto al año pasado.
En otro punto en que aparece castigada nuestra región es en el presupuesto de Vivienda. El Gobierno reduce el presupuesto del Serviu en un 15% -lo que significa una merma de $ 30 mil millones-, es decir, casi la mitad del presupuesto del Gobierno Regional. Todo esto va en perjuicio de la inversión en viviendas sociales y subsidios, lo cual es preocupante si se considera que nuestra región es una de las que presenta más altos niveles de hacinamiento y de campamentos, con un déficit habitacional de 34.615 viviendas, según cifras del Ministerio de Vivienda y Urbanismo.
Esperamos que el Gobierno pueda rectificar su propuesta y deje de restringir estas partidas. Estamos a dos años de la primera elección de gobernadores regionales, donde necesitaremos un mayor financiamiento si queremos una real descentralización que empodere a nuestras regiones.
Isabel Allende Bussi
Senadora Región de Valparaíso