Infraestructura y logística: herramientas para la competitividad y el bienestar
Según el Indicador de Actividad Económica Regional (Inacer), realizado por el INE, la Región de Valparaíso es la de menor dinamismo del país, anotando una caída en su actividad de 6,1% entre julio y septiembre de este año, en comparación a igual período de 2017. Una cifra preocupante que exige potenciar el desarrollo económico de la zona, siendo una arista muy importante para ello contar con mayor infraestructura y una mejor logística de aquí a 2030.
Es imperante una mirada de mediano y largo plazo para concretar proyectos que dinamicen a la Región, como el tren Valparaíso-Santiago (para mejorar transporte de pasajeros y traslado de cargas), potenciar los puertos de la zona, mejorar la conectividad interregional y las redes sanitarias, entre otros aspectos, según los especialistas.
"El desafío para la Región es mejorar sus corredores logísticos, desde la interacción del puerto con las ciudades, reforzar las vías de conectividad terrestres a través del desarrollo del transporte ferroviario y reforzar los pasos fronterizos, siendo lo más urgentes de resolver: contar con un Puerto a Gran Escala y concretar un ferrocarril de carga y pasajeros", comenta el gerente de Infraestructura de la Cámara Chilena de la Construcción, Carlos Piaggio, quien participará como expositor del panel Infraestructura y Logística del Seminario Región de Valparaíso 2030.
En el mismo foro estará Álvaro Peña, ingeniero en Construcción de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), quien acota que todas las ciudades deben disponer de un desarrollo de infraestructura avanzada y de calidad, lo que va mucho más allá de mejoras en la vialidad urbana, movilidad, conectividad y desarrollo de borde costero.
"Si nos proyectamos al 2030, se hace necesario contar con mayor productividad en los factores de costos y producción, para ser competitivos e incentivar una mayor inversión. Sin embargo, lo más urgente es generar planes de acción que contemplen la vulnerabilidad de las ciudades en cuanto a eventos naturales, la seguridad vial y el aseguramiento del suministro de agua potable en zonas apartadas, entre otras. En realidad, no podemos desarrollar más una arista que otra, todos los aspectos deben ser abordados en su conjunto, sólo así lograremos crecer equitativamente", explica.
PROGRESO PORTUARIO
Es necesario recordar que vivimos en una 'Región Portuaria', hecho que marca el quehacer del territorio. El Puerto de Valparaíso, junto a los de San Antonio y Quintero-Ventanas, conforma una Plataforma Logística que debe ser constantemente reforzada.
"Los puertos cumplen un rol clave en la zona, el cual debe pervivir y proyectarse hacia el futuro. Y para ello deben mantenerse competitivos, con una oferta portuaria acorde al crecimiento del país y a su contexto internacional. Es decir que deben crecer; por lo tanto, este es el principal desafío, y para ello es necesario desarrollar en los puertos la sostenibilidad, la seguridad, la transformación digital, la tecnología logística, la vinculación con sus entornos y el desarrollo de nueva y mejor infraestructura", precisa el gerente general de la Empresa Portuaria de Valparaíso, Gonzalo Davagnino, otro de los expositores.
Para el director de El Mercurio de Valparaíso y moderador del panel, Carlos Vergara, un tema relevante es la mejora de la infraestructura portuaria en la capital regional, la optimización del manejo de las cargas y el contar con un muelle exclusivo para la recalada de cruceros. "Además se debe pensar en cómo se mejora la infraestructura ferroviaria, para facilitar el traslado de las cargas hacia los principales puertos de la Región, y de esta manera descongestionar la Ruta 68 y con ello optimizar la logística portuaria", añade.
Mejorar la infraestructura y logística de la Región requiere pensar en esta Región como una zona de desarrollo portuario, ya que, tal como menciona Davagnino, lo que Chile necesita para funcionar pasa por Valparaíso, San Antonio y Ventanas. Un ejemplo: los puertos de todo Chile transfirieron poco menos de 48 millones de toneladas el último año, y de ese total 35 millones de toneladas pasaron por la V Región, de la cual depende un 60% del comercio exterior.