Bolsonaro vuelve a defender la renuncia de Brasil a organizar la Cumbre del Clima 2019
DECISIÓN. Presidente electo aseguró que no cuentan con el presupuesto para hacerlo, además de que fecha es muy próxima.
El Presidente electo brasileño, Jair Bolsonaro, volvió ayer a defender la renuncia de su país a organizar la Cumbre del Clima de 2019 (COP25) por su coste y proximidad en el calendario, lo que "podría constreñir" a su futuro Gobierno.
"Renunciamos a albergar la Conferencia Climática Mundial de la ONU porque costaría más de 500 millones (de reales, 130 millones de dólares) a Brasil y sería realizada en breve", señaló el mandatario electo en sus redes sociales, su principal medio de comunicación con los brasileños.
En su opinión, albergar la COP25 en esas condiciones "podría constreñir" al Gobierno que asumirá el 1 de enero, cuando será investido Presidente, "a adoptar posiciones que requieren un tiempo mayor de análisis y estudio". La COP25 se celebrará finalmente en Chile en noviembre de 2019.
El actual Gobierno brasileño justificó la retirada de su oferta para acoger la cumbre con base en dificultades presupuestarias y en el "proceso de transición" para Bolsonaro, quien se ha mostrado permanentemente crítico con el Acuerdo de París, del que incluso ha advertido que podría abandonarlo.
Bolsonaro, capitán en la reserva del Ejército, admitió semanas atrás que tuvo injerencia directa en la decisión del actual Ejecutivo a la hora de desistir de acoger la reunión. En esa ocasión, también citó problemas "presupuestarios", si bien reconoció que no deseaba "la realización de ese evento" en Brasil.
"Nuestra diplomacia actuó contra la COP25 porque no es de nuestro interés y porque lo que está en juego es nuestra soberanía: a cambio del acuerdo de clima (de París), que aceptamos por ser favorables a la preservación del medioambiente, quieren entregar gran parte de la Amazonía a la administración externa", sostuvo Bolsonaro entonces.
En tanto, el plenario de la cumbre de Katowice que debe sentar las bases para que entre en vigor el Acuerdo de París contra el cambio climático se ha retrasado en varias ocasiones por la falta de consenso en el texto final, mientras continúan las negociaciones para superar los escollos.
La 24 Conferencia de las Partes de la Convención de Naciones Unidas para el Cambio Climático (COP24), que reúne en Katowice (Polonia) a representantes de 197 países, tenía que haber finalizado este viernes pero las conversaciones se prolongaron durante toda la noche y continúan hoy a la espera de que se reanude la reunión.
El plenario de la conferencia se ha suspendido ya varias veces, mientras las reuniones maratonianas se suceden en diferentes grupos de trabajo en un intento de consensuar finalmente un acuerdo definitivo.
Los principales escollos estaban relacionados con el grado de ambición que recoja finalmente el texto, la financiación de los países desarrollados a los menos desarrollados y vulnerables, y el Libro de reglas que, pese a ser común a todos, comprometa a los países en función de sus capacidades y emisiones históricas.
Hoy, la negociación se ha estancado en lo referente a las reglas del Artículo 6 del Acuerdo de París, donde se establece un complejo marco legal con mecanismos de mitigación basados, esencialmente, en el mercado de comercio de carbono, ante la negativa de Brasil a aceptar cambios en el sistema vigente.
También las reivindicaciones de Turquía para mejorar sus condiciones de financiación demoran la consecución de un acuerdo en Katowice.
El texto final de la COP24, la más importante desde la de París en 2015, debe servir para hacer operativo a partir de 2020 el Acuerdo de París, donde la comunidad internacional se comprometió a frenar el aumento de las temperaturas por debajo de los 2 grados.