Cristián Rojas M.
Si bien este año hubo una caída a nivel regional en los puntajes nacionales de la Prueba de Selección Universitaria (PSU), la diputada Camila Rojas (Izquierda Autónoma), integrante de la comisión de Educación de la Cámara Baja, estima que hay otros temas más preocupantes, como la necesidad de mejorar la PSU para hacerla más ecuánime; y anticipa el debate que habrá en torno al sistema que reemplazará al Crédito con Aval del Estado (CAE), enfatizando que debe haber condonación para los deudores, así como reparación para aquellos alumnos de universidades que cerraron o cerrarán.
Sobre la baja en los puntajes, la parlamentaria recordó que "no es primera vez que nos enfrentamos a una situación similar", aunque subrayó que "hay otras cuestiones más generales y que no tienen que ver con cuántos puntajes nacionales hay, que son preocupantes, que tienen que ver con la brecha que se genera por la PSU; entonces me parece que si bien es interesante mirar el por qué de la baja de los puntajes este año, hay otros temas que son más profundos que es necesario mirar".
- Uno de esos temas es precisamente esa brecha, que hace que muchos califiquen a la PSU como injusta para los egresados de colegios municipales. El próximo año se inicia un proceso de modificación a este instrumento. ¿Hacia dónde cree que debieran apuntar los cambios?
- Ya a mediados de año, Leonor Varas, directora del Demre, que es el departamento que ve la medición de esta prueba, mencionaba la necesidad de hacer cambios a la PSU. Se hablaba de siete u ocho cambios que se habían propuesto al CRUCh y en ese sentido, una de las cuestiones que se consideran más perjudiciales es que esta prueba se hace una vez al año, entonces los niveles de estrés que se generan por esa situación son relevantes, y el cambio ahí, por ejemplo, es que se rinda más de una vez al año. Hay otros que son referidos a qué se mide en términos de currículo, y ahí hay injusticias bien relevantes, porque ésta es una prueba que mide sobre todo el currículo científico - humanista, generando una discriminación importante hacia un número no menor de estudiantes que hoy día están en la educación técnico - profesional. Entonces hay una serie de inequidades de las cuales es necesario hacerse cargo, que lo que hacen es, por un lado, sacar una foto de la segregación que es evidente en el sistema educativo chileno, pero que al mismo tiempo, las aumentan en algunos casos, en lo que tiene que ver con las brechas por sexo, las brechas socioeconómicas e incluso brechas que son de carácter rural - urbano.
- La ministra de Educación, Marcela Cubillos, también se refirió a la desventaja con que rinden la PSU los egresados de colegios técnico - profesionales. ¿Ese debiera ser un aspecto ineludible en el proceso de cambios al instrumento?
- Lo que se ha propuesto es que hasta segundo medio los estudiantes, más allá de la modalidad de educación, reciben los mismos contenidos, por lo tanto, la propuesta que está sobre la mesa y que puso el Demre tiene que ver con medir los contenidos hasta segundo medio, y al mismo tiempo poder hacerse cargo también de la parte más estable de ese contenido, es decir, la que se sostiene durante los años, porque hay cambios al currículo año a a año y hay un grupo de personas que da esta prueba de manera rezagada. Por eso tú no puedes estar midiendo a quienes van a rendir la prueba este año, pero que estudiaron hace diez años.
- Uno de los cambios que han planteado autoridades universitarias e incluso uno de los alumnos que obtuvo puntaje nacional, es que la PSU mida el currículo que efectivamente se alcanza a pasar en los colegios municipales, de modo de acortar la brecha y que sea un instrumento más ecuánime...
- Claro, porque hay una diferencia entre medir el currículo que es el obligatorio, versus el que se implementa, entonces hay que hacerse cargo de cuál es el currículo que efectivamente se implementa, y que la prueba mida ese contenido y no el contenido que se exige, precisamente porque si no las brechas socioeconómicas se acrecientan.
- Cuando se cambió la Prueba de Aptitud Académica por la PSU, el objetivo era corregir estas desigualdades. Sin embargo, en Verbal, por ejemplo, que ahora se llama Lenguaje, se mantuvieron las secciones que efectivamente miden aptitudes, como Plan de Redacción, Uso de Ilativos o Comprensión de Lectura, pero se creó la sección Géneros Literarios, que no mide aptitudes, sino que conocimientos específicos, lo que finalmente introdujo aún más inequidad al instrumento...
- Precisamente, el contenido de la PSU año a año, cada vez es más específico, y eso genera discriminaciones y además no le agrega valor predictivo, porque una prueba tan específica, claro, puede que las personas que quieran estudiar algo relacionado, por ejemplo, con una cuestión muy específica de Matemática, se le realice una prueba de ese estilo, pero hacérsela a todos los estudiantes que rinden la prueba no tiene sentido. Entonces se necesitan pruebas que sean más generales, de contenidos estables, y por lo tanto, reducir los contenidos que actualmente mide la PSU, y se pueden generar pruebas más específicas, dependiendo de lo que tú quieras estudiar.
- La PSU dejará de ser administrada por el CRUCh a través del Demre y pasará a manos de la Subsecretaría de Educación Superior. ¿Qué expectativas tiene sobre la próxima administración?
- Es necesario tener una discusión profunda y sustantiva sobre los mecanismos de selección para la educación superior, y ahí tiene que jugar un rol el Ministerio, un rol el Demre y por supuesto el CRUCh mediante el Sistema Único de Admisión, y tiene que ser una discusión profunda para no cometer los mismos errores que ha habido hasta ahora. A mí me parece vital que estos cambios se empiecen a discutir desde ya, porque las fechas apremian. Si no, seguimos teniendo generaciones que rinden esta prueba tal y como está hoy día, que como sabemos, tiene discriminaciones profundas. Por eso, entre más tiempo se demore esta discusión, más personas son perjudicadas.
- La ministra Cubillos adelantó que una de las prioridades legislativas del 2019 será el proyecto del sistema que reemplazará al CAE. Desde la oposición ustedes han planteado una condonación para los deudores, sin embargo, el gobierno lo descarta. ¿Viene un debate duro?
- Sí, y es preocupante en lo que quedó el sistema nuevo de crédito este año, pues había una promesa de que iba a ser una discusión muy presente. Sin embargo, se retrasó significativamente y no estuvo dentro de las prioridades del Gobierno. Y por otro lado, tenemos situaciones que apremian en educación superior, como lo que tiene que ver con el cierre de instituciones. Estamos frente al caso de la Universidad del Pacífico por lo que me parece que, tanto en materia del CAE, como en el cierre de instituciones, tenemos que habilitar la posibilidad de reparación, porque lo que tenemos es una serie de estudiantes que han sido perjudicados por este sistema y que hoy día se enfrentan a situaciones bien trágicas. Por lo tanto, no tener considerado eso en el mapa, a mí me parece que es perjudicial, y vamos a insistir al Ministerio que en el caso del endeudamiento y en el caso del cierre de instituciones es necesario habilitar la posibilidad de reparación.
"El contenido de la PSU año a año, cada vez es más específico, y eso genera discriminaciones y además no le agrega valor predictivo".