El eterno viaje de la judoca Allyson Quevedo
DEPORTES. La deportista de Curacaví fue elegida la mejor del año en la PUCV.
Allyson Quevedo ha vivido desde siempre en Curacaví. Sin embargo, al repasar su historia, ella misma saca cuentas y dice que siempre ha debido viajar. Primero para sus estudios primarios y secundarios en Casablanca. Luego para cursar la carrera de ingeniería comercial en la Universidad Católica de Valparaíso.
"Mi vida, como puede ver, ha sido de permanentes viajes, quizás eso me ha ayudado a ser constante", reflexiona la judoca, quien a los 10 años tuvo su primer acercamiento con el deporte que hoy la llevó a ser elegida como la Mejor Deportista de la PUCV en 2018.
Cuando Quevedo ingresó a la universidad se integró a la rama de judo, con la cual consiguió grandes logros. Los de este año que termina son la coronación de su carrera: oro en el Open Panamericano de Santiago, campeona panamericana universitaria y ganadora en categoría -63 kilos en la Copa Corea. Además, en junio fue nominada a la selección nacional de su disciplina.
"El 2019 viene lleno de nuevos desafíos, así que pretendo seguir en el alto rendimiento. Ahora tenemos la gira de los Open, que son en Chile, Perú y Argentina. Luego viene la Copa Panamericana y los Juegos Panamericanos. Con mi séptimo lugar del año pasado logré la mitad de la clasificación para los Juegos de Lima", comenta.
La judoca afirma que "yo siempre uso una frase que me enseñó mi primer sensei, que me decía que la derrota comienza con el temor al fracaso. Creo que esa enseñanza es y será la que utilizaré en todos los aspectos de mi vida, puede ser en el judo o en otras metas que uno tenga", recordando también las enseñanzas de su técnico en la UCV, Daniel Galaz.
"El judo es un deporte solitario, pero de mucho apoyo en el equipo, porque para practicarlo, para entrenar y para aprender, necesitas del otro"
Allyson Quevedo, Mejor deportista de la PUCV"
lugar en la próxima Copa Panamericana necesita Quevedo para clasificar a los Juegos de Lima 2019. 7°