Flor Arbulú

En 1983, Andrés Pérez Araya se convirtió en discípulo de Arianne Mnouchkine en la compañía francesa Théâtre du Soleil. Tres años después "vino a vernos y se dio cuenta del abandono absoluto creativo en que estábamos los creadores en Chile", comenta la actriz Ximena Rivas.

Fue así como nació el montaje de teatro callejero "Todos estos años", en el que "él instaló la pregunta ¿qué ha sido para ti todos estos años? Obviamente en época de dictadura, se subentendía en esta pregunta lo que había sido nuestra experiencia en los últimos años de haber vivido en dictadura", recuerda la intérprete que formó parte de la puesta en escena junto a María Izquierdo, Roxana Campos, Willy Semler y Francisco Reyes por nombrar algunos.

El montaje fue presentado en diferentes comunas de la Región Metropolitana en el verano de 1986, lo cual quedó registrado por Carlos Flores, quien en el marco del Festival de Santiago a Mil de 2012 estrenó el documental "Teatro callejero, mi capitán", el cual podrá ser visto hoy (18.30 horas) en el Centro Cultural Leopoldo Silva Reynoard como parte de las actividades del Día del Patrimonio del Teatro.

Posibilidad única

Ximena Rivas, quien también es la vocera de la Fundación Teatro a Mil para la región, será la encargada de presentar la pieza así como la llamada "Andrés Pérez de memoria". Desde su mirada, la posibilidad de "escuchar Andrés, ver sus montajes, es ver la perspectiva de una poética creativa".

Sobre todo porque "yo creo que Andrés Pérez Araya es un referente teatral indudable dentro de nuestro país. Aportó un proceso creativo que fue muy transformador y generó una escuela de formas de entender el teatro y entenderlo como una fiesta, que el teatro esté cerca de la gente".

La actriz considera que el documental realizado por Flores "es muy impresionante", pues "más allá del valor artístico que tiene el seguimiento, tiene un valor histórico y político tremendo".

"O sea, para mí, lo más impresionante de ese documental es ver a la gente en el año 86, cuando se sorprendían al vernos en las calles llamando a un espectáculo callejero, cuando estaban prohibidas las reuniones de más de cinco personas, había mucha restricciones y mucha persecución. Entonces, volver a descubrir la sonrisa de las personas, darse cuenta del miedo que estaba instalado en aquella época y lo que Andrés vino a aportar, yo creo que eso en sí mismo ya tiene un valor histórico importantísimo", destaca la actriz.

En este sentido, asegura que estos documentales serán "una oportunidad muy hermosa para todas las nuevas generaciones que no lo han visto o al público en general que sólo conoce a Andrés por 'La negra Ester', pero no conoce a fondo su pensamiento, que tiene una poética muy sólida de cómo él entendía las artes escénicas y la cultura en general".

"Él era muy claro en decir que el teatro siempre debía reflejar algo que nos quedara a los espectadores, una forma de crecimiento dentro de la sociedad como el desarrollo de pensamiento o de conversación, entonces escuchar a Andrés es escuchar a un maestro, realmente", sostiene.

Rivas asegura, desde esta perspectiva, que trabajar con el director teatral significó "dimensionar, hacerte cargo y responsable de lo que significa decir algo que te atañe como persona, como ciudadano, como ser político y llevarlo a un escenario para que el público realmente tenga una experiencia única y trascendente en el teatro".

"Es un estigma -continúa- que todos los que pasamos por las manos de Andrés Pérez, lo tenemos. Y es muy claro ver a todos los creadores que estuvimos ahí funcionando hoy. Todos tenemos, creo, una perspectiva de lo que hacemos, una claridad y una necesidad de trabajar en proyectos que nos impliquen, que nos hagan sentido, que sean siempre reflexivos, siempre muy llenadores, siempre críticos y muy profundos en la investigación".

Ximena Rivas también formó parte del elenco de "La negra Ester", el montaje más emblemático de Pérez, ya que ha sido el más visto en la historia del teatro nacional. Estrenada en 1988 se convirtió en un referente del teatro callejero.

Para la actriz esta forma de trabajar "fue la gran posibilidad de llevar el teatro a la gente, porque la gente no estaba yendo al teatro. Ya no era una alternativa viable, no existía, había muy poco, y todo texto que se hacía había que camuflarlo, porque había un riesgo, un riesgo real de perder la vida".

"Nosotros que vivíamos en el oscurantismo cultural total, el teatro callejero tuvo la posibilidad de sacarnos del cascarón en que estábamos encerrados sin muchas posibilidades de hacer nada y de llevarlo a la gente", acota.

El tras bambalinas

El Día del Patrimonio del Teatro es una iniciativa que impulsa la Fundación Teatro a Mil desde el año pasado, y que permite conocer teatros y centros culturales, y que este año considera actividades en Quillota, San Felipe -donde habrá visitas guidas en el Teatro Municipal- y Valparaíso, siendo el Parque Cultural el que abrirá sus puertas.

"Creo que es la gran oportunidad para el público de tener una experiencia práctica de lo que significa un espacio teatral y todas las posibilidades que éste tiene", comenta Ximena Rivas, asegurando que para los asistentes el tras bambalinas generalmente se mantiene oculto "por esta suerte de mantener la sorpresa, el misterio de lo que significa atrás del teatro".

Por lo mismo, considera que "es un mundo muy mágico para quienes desconocen nuestra profesión, nuestro trabajo; y puede ser muy marcador y muy significativos en términos de descubrir el velo, de cómo se hacen las cosas, de cuáles son todos los elementos técnicos que se usan para lograr la magia que es el teatro".