Medición de expertos noruegos descarta niveles peligrosos del aire
REGIÓN. Estudio para hacer una "huella digital" en la zona de Quintero, Puchuncaví y Concón no detectó altas concentraciones de compuestos nocivos para la salud. Análisis continuarán.
Luego de tres meses de arduo trabajo, con la toma de muestras en los 28 lugares más sensibles de Quintero, Puchuncaví y Concón, a objeto de pesquisar la "huella digital" de la zona y la medición de compuestos contaminantes específicos, el equipo de profesionales del Ministerio de Medio Ambiente, en conjunto con expertos del Instituto Noruego de Investigación del Aire (NILU), concluyeron que no hay concentración en niveles peligrosos para la salud.
El trabajo de monitoreo y medición era uno de los compromisos presidenciales tras la crisis ambiental ocurrida en Quintero-Puchuncaví a contar del 21 de agosto del año pasado, con tres grandes episodios que dejaron como saldo más de 1.500 personas, entre niños y adultos, con síntomas de intoxicación.
Pese a que el estudio arrojó que durante el periodo de medición no se detectaron niveles peligrosos de diversos compuestos, los alcaldes de las comunas ubicadas en la denominada zona de sacrificio insistieron en que las investigación relacionada con la crisis ambiental del año pasado aún no arroja responsables en relación a las industrias contaminantes que funcionan en el lugar y esperan la celeridad del gobierno para la toma de razón e implementación del anunciado Plan de Descontaminación Ambiental (ver nota en página 3).
En las mediciones que efectuó el NILU, laboratorio de referencia de la Unión Europea, se utilizó equipamiento especializado (cánisters y tenax samplers), conectados a pocos metros de instalaciones industriales, áreas residenciales y escuelas del sector (Santa Filomena de Quintero; La Greda de Puchuncaví y Sargento Aldea de Las Ventanas).
Según se informó, el estudio servirá para tomar medidas concretas para que estos episodios de contaminación no vuelvan a ocurrir. Se analizaron concentraciones de Metilcloroformo, Nitrobenceno, Iso-Butano, Tolueno y Sulfuro de Hidrógeno. En todos los casos se concluyó que "no hay presencia en niveles peligrosos".
Se explicó que un nivel peligroso sería encontrar estos compuestos en partes por millón (ppm), lo que no ocurrió.
En el caso del metilcloroformo, los niveles de concentración fueron menores a dos partes por trillón. El Nitrobenceno no se detectó en ninguna medición. Los niveles de Iso-butano fueron del rango 0,1 a 15 ppb (partes por billón), por tanto, no peligrosos.
En tanto, en Concón, los niveles de Tolueno detectados fueron de 0,2 hasta 5 ppb y en el de Sulfuro de Hidrógeno de 0,1 a 0,4 ppb, también rangos no peligrosos pero relevantes, en especial en las zonas residenciales cercanas a la refinería, según detalló el Dr. Norbert Schmidbauer.
Una vez expuesto el informe a las autoridades comunales y regionales, el ministro (s) de Medio Ambiente, Felipe Riesco, argumentó que "según señalan los resultados del NILU, no existen concentraciones que representen riesgos para la salud de compuestos que habían generado aprensiones en la población, tales como metilcloroformo, nitrobenceno, iso-butano, tolueno y sulfuro de hidrógeno".
Con los resultados del informe en mano, la autoridad subrayó que la presencia de estos gases en el aire de Concón, Quintero y Puchuncaví no es más alta de la que hoy existe en ciudades europeas.
Junto con adelantar una videoconferencia que se realizará la próxima semana con Noruega, donde participarán los nueve expertos de la región que están trabajando en el tema, el intendente Jorge Martínez resaltó la construcción de un laboratorio que el ministerio del ramo va a construir y equipar.
"Será un laboratorio de toma de muestras que va estar en la zona entre Quintero y Puchuncaví para poder traer expertos y tener equipos permanentes que estén midiendo estos gases y otros, y asegurando lo que dijo el Presidente, un antes y un después en Quintero y Puchuncaví que se está cumpliendo", recalcó.
El estudio identificó una relación entre los olores que se han percibido en algunos sectores con un aumento en la concentración de ciertos compuestos como el propano, butano, pentano y hexano, asociados principalmente con emisiones de gas. Durante el proceso de medición, estos gases no alcanzaron la concentración requerida para producir síntomas como dolor de cabeza o nauseas.
Al respecto, el ministro (s) Riesco enfatizó que el nuevo Plan de Descontaminación Atmosférica para Concón, Quintero y Puchuncaví establece el control de emisión de compuestos orgánicos volátiles (COVs) que actualmente no cuentan con una regulación. "El plan señala que las empresas deberán implementar las mejores técnicas disponibles para controlar las emisiones de estos compuestos", subrayó la autoridad.
Para el senador Francisco Chahuán (RN), luego de escuchar la presentación de la investigación de huella digital del aire de Concón, Quintero y Puchuncaví realizada por el instituto noruego, "se cumple compromiso del Gobierno, se valora la investigación seria, pero sigue siendo un diagnóstico. Lo que falta en nuestro país es dictar una nueva norma de emisión y que se instalen sistemas de medición creíbles en la zona para evitar nuevos episodios de contaminación. Se debe ampliar este tipo de investigaciones al agua y tierra de la zona".
El diputado Pablo Kast (Evópoli) relevó la importancia de explicarle a la ciudadanía "con este nivel de rigurosidad y claridad, con un instituto prestigioso que garantizara la imparcialidad. Las conclusiones le ponen un sello de tranquilidad a las comunidades, primero que el proceso se está enfrentando con este nivel de seriedad, sin populismo ni exitismo. De los componentes que tenían más asustados a la población, las comunidades de Quintero, Puchuncaví y Concón no están expuestas a niveles distintos a los de otras ciudades desarrolladas".
Para la diputada Camila Flores (RN), el informe noruego también permite reforzar la línea investigativa sobre las causas de la crisis medioambiental que se desató en agosto pasado. "Viene a reforzar una tesis que varios hemos sostenido desde el primer día, que tiene que ver con que la responsabilidad primaria de este hecho en particular de contaminación -que agravó la situación que viven permanentemente los vecinos de Quintero, Puchuncaví y Concón-, se relaciona con un barco de petróleo iraní. Además, es la misma línea investigativa que está llevando adelante la Fiscalía, relacionada con el petróleo iraní, el material más contaminante de este tipo en el mundo". Para la legisladora, el análisis a las condiciones del aire entre noviembre y enero de este año, "refuerza que estamos en una situación permanente de contaminación en los últimos 50 años, pero que se agudizó con el derrame de petróleo iraní y la responsabilidad de las empresas que ingresan ese tipo de crudo al país".