El consorcio chino chileno TVS, que busca adjudicarse la construcción de un tren rápido para pasajeros y carga entre Santiago, Valparaíso y San Antonio, salió a referirse a las advertencias que realizó a este Diario la ministra de Transportes, Gloria Hutt, quien sostuvo que la decisión de TCVAL de no continuar con la concesión del Terminal Dos (T2) en el puerto podría desencadenar en que los proyectos de transporte de carga se vean postergados o modificados.

"Las estimaciones de carga del proyecto de conexión ferroviaria mejorada al puerto se sustentaban con la transferencia prevista de esta iniciativa, entonces también tiene un impacto y es necesario revisar cuándo va a estar la capacidad activa para saber si tiene o no impacto en esa conexión", dijo el fin de semana la ministra, agregando que "las consecuencias de no hacer este proyecto (T2) en el tiempo que está previsto son importantes".

Al respecto, el gerente general de TVS, Álvaro González, reiteró su confianza en la continuidad de la expansión portuaria de Valparaíso, asegurando que como consorcio se iban a remitir exclusivamente a la versión que por estos días ha entregado el Gobierno, que a juicio de ellos "está comprometido en sacar el T2".

Pese a ello, González dio a entender que la expansión portuaria en Valparaíso sí es relevante a la hora de justificar la construcción de un tren rápido, que actualmente está siendo evaluado como una iniciativa privada en el Consejo de Concesiones del Ministerio de Obras Públicas (MOP).

"Nosotros tenemos que atenernos a lo que ha informado el Gobierno, en cuanto a que la expansión portuaria está garantizada ya que el T2 continuará a través de EPV (Empresa Portuaria Valparaíso), además de que es un proyecto prioritario dado que el Puerto de Gran Escala (PGE) requiere aún de muchos años para que entre en operación", comentó el gerente general.

Una posición en la que, sin embargo, no coincidió del todo el expresidente de la Empresa de los Ferrocarriles del Estado (EFE), Jorge Inostroza, quien aseguró que la capacidad de transferencia actual del Puerto de Valparaíso ya es razón suficiente para la construcción de un tren de carga.

"Tengo la impresión de que lo que ocurre con el T2 es una situación coyuntural para un proyecto de esta magnitud. El T2 probablemente se resuelva en el tiempo de otra forma, pero no creo que sea algo impactante en el tema ferroviario. Con la capacidad de transferencia que tiene hoy el Puerto de Valparaíso, el tren ya se hace necesario. Incluso, su construcción es urgente y no hay más tiempo que perder", indicó la exautoridad.

De todas formas, el debate sobre el impacto o no que tendrá la caída del T2 en el eventual proyecto entre Valparaíso y la capital deberá continuar, sobre todo luego que surgieran las primeras voces de emplazamiento hacia la ministra Hutt, para que aclare si las postergaciones o modificaciones a la que hizo referencia afectarán justamente la licitación del tren rápido, que fue anunciada por el Presidente Sebastián Piñera para este año.

"Creo que el Gobierno debe confirmar la palabra comprometida por el Presidente de la República. Aquí, la ministra relativizó el anuncio y señaló que podía haber una postergación o modificación, pero cuando el Presidente en octubre pasado lo anunció junto al Plan de Desarrollo Regional de Valparaíso, nunca lo condicionó a otras obras", comentó este lunes el senador Ricardo Lagos Weber (PPD).

En medio de la discusión, durante los últimos días el Consejo de Concesiones del MOP también dio a conocer los detalles de la sesión que realizaron el pasado 28 de febrero, donde uno de los proyectos a evaluar fue precisamente el tren rápido que presentó TVS.

En la reunión, que contó con la presencia de la presidenta de la instancia, María Soledad Arellano, y los consejeros Juan Andrés Varas, Tomás Flores y Rodrigo Delgadillo, se confirmaron los primeros datos sobre el servicio que propuso el consorcio, como por ejemplo usar trenes con capacidad para 890 personas y que alcanzarán una velocidad máxima de 200 km/h, una frecuencia en horario punta de 15 minutos, y una tarifa base de $5.000 por tramo que variaría según el horario y los pasajes tipo "estándar" o "superior".

Además, los consejeros tomaron conocimiento sobre el tipo de operación y contrato que solicita TVS: sin subsidios, 50 años de concesión, e ingresos mínimos equivalentes a un 70% de la inversión durante los primeros 25 años, más los costos de operación que corresponden al 55% de los ingresos estimados. ¿En conclusión? El Consejo de Concesiones decidió solicitarle a la empresa más antecedentes que estimaron como "imprescindibles" para evaluar si la iniciativa es o no de interés público.

Consultado sobre la primera impresión, el expresidente de EFE comentó que uno de los puntos que faltó durante la región -de acuerdo a lo consignado en el acta- es la demanda del proyecto. "Cuando se hace una presentación se debe dar a conocer la demanda para poder justificarla con los costos que aparecen. Tiene que existir una relación que en este caso no la hay", dijo Inostroza, agregando que "el proyecto que estudiamos en EFE arrojó que la demanda era de 17 millones de pasajeros al año; sin eso no tiene rentabilidad social".

Además, la exautoridad reitero que la inversión definida por TVS (US$ 2.635 millones) se aleja de los US$ 4.500 millones que cifró un estudio de prefactibilidad en 2016.

"El T2 es un proyecto prioritario dado que el PGE requiere aún de muchos años para que entre en operación"

Álvaro González, Gerente general de TVS"

US$ 2.635 millones La mayor inversión del proyecto se debe a la construcción de nuevas líneas y túneles, y la compra de trenes.

200 kilómetros por hora Es la velocidades máxima que alcanzarían los trenes de pasajeros; mientras que los de carga viajarían a 80 km/h.

$5.000 por tramo Es el precio definido como tarifa base, que variará según el tipo de pasaje (estándar o superior) y el horario.

15 minutos Corresponde al intervalo definido para el horario punta.