La receta del Wanderers de "Yemo" Díaz para lograr el ascenso a Primera
FÚTBOL. Cuarenta y un años han pasado desde que el entrenador lideró en 1978 un grupo de jugadores que lograron el primer retorno del Decano a la División de Honor.
Cuando Santiago Wandrers se encuentra hoy con la obligación de retornar a la Primera División, es bueno recordar a quienes hace unas décadas mostraron el camino para conseguir ese objetivo.
Fue hace 41 años y 15 días. Era el 5 de marzo de 1978 y los porteños arrancaban su primera temporada en el Ascenso con la ilusión de volver lo antes posible a Primera División.
Un empate sin goles con Magallanes en Sausalito marcaba el inicio de una ruta que, tal como hoy, no fue sencilla en un comienzo, con una seguidilla de cinco igualdades (el primer triunfo llegó recién frente a Antofagasta), pero que luego fue tomando forma gracias a la experiencia de un técnico como Guillermo Díaz y un plantel marcado por la buena mezcla entre jugadores avezados y jóvenes salidos de la cantera.
Fue así como los verdes concluyeron la primera rueda de esa campaña en el primer lugar y en calidad de invictos, para el sábado 18 de noviembre ganar 3-0 a San Antonio en Sausalito con goles de Reinaldo Hoffman, el argentino Alfredo Quinteros y el mediocampista José Illescas, desatando la euforia en el Puerto por el retorno a la Serie de Honor.
El éxito de un equipo marcado por el liderazgo de "Yemo" Díaz, puntero izquierdo de los verdes entre 1948 y 1952, y la presencia de un experimentado Juan Olivares en la portería, además de jugadores como Guillermo Arriagada, Reinaldo Hoffman, Fernando Osorio, José Illescas, Alfredo Quinteros, Francisco Espinoza, Raúl "Chichí" Aravena, Juan Rivero, José Orellana, Juan Carlos Letelier, Rubén Díaz, Eduardo Cordero, Raúl González y Armando Muñoz, entre otros.
Una temporada que dejó como registro 17 partidos ganados, 15 empatados y sólo 4 derrotas, siendo el goleador Francisco Espinoza, con 10 tantos, seguido de Alfredo Quinteros con 9.
Las claves del éxito
Reinaldo Hoffman recuerda que tras un paso por Naval de Talcahuano fue llamado desde Valparaíso para participar del equipo de Santiago Wanderers que buscaría su inmediato ascenso a la Primera División.
"Había una mezcla de juventud y experiencia", explica el delantero, quien había sido campeón con el Decano en 1968, destacando que "nos hicimos muy fuertes de locales en Sausalito y eso fue clave para el ascenso".
El "Colorado Chico" insiste en que ganar los tres puntos en Viña del Mar era importantísimo "ya que cuando nos tocaba ir de visitantes nos encontrábamos con canchas que eran verdaderos potreros y allí lo único en que pensábamos era en no perder".
"Tal como ahora, nuestro comienzo con cinco empates tampoco fue sencillo y por eso le tengo confianza a Miguel Ramírez en esta campaña, pero hay que tener en claro que de locales en Playa Ancha no hay derecho a empatar, porque esos son puntos perdidos", sostiene.
Por su parte, Juan Carlos Letelier, quien hace 41 años recién se forjaba como el gran jugador que luego fue, recuerda también que "ese camarín de Santiago Wanderers fue espectacular, porque todos sabíamos y asumíamos que teníamos una enorme responsabilidad".
Para el mundialista en España 1982 otra de las claves para el éxito fue el ascendiente del entrenador sobre el vestuario.
"Había un total respeto hacia lo que se planteaba desde el cuerpo técnico y convencimiento de que podíamos lograr algo importante", sostiene, mostrándose confiado en que en este 2019 la "Operación Retorno" puede ver la luz al final del túnel.
Y Letelier es tajante. "El inicio no ha sido sencillo, pero está claro que no ascender en esta campaña sería un desastre, incluso peor que el descenso y el fracaso de la temporada anterior".
Juan "Carmelo" Rivero fue otro de los integrantes de aquella planilla que volvió en 1978 a Primera División.
Y coincidiendo con el "Lete", el lateral habla de la importancia del entrenador: "Con don Guillermo (Díaz) hablábamos el mismo idioma. Él había sido un tremendo jugador para Santiago Wanderers y el respeto era enorme... nos hablaba como uno tan wanderino como nosotros y eso se sentía en el grupo".
Respecto del presente de los verdes, Rivero no deja de mostrarse preocupado, asumiendo que "me parece que nos sobran delanteros y nos falta gente que los habilite. Puede ser la idea de Ramírez, pero creo que acá falta un '10', el cerebro del equipo".
Una localía en Sausalito
Una de las situaciones que no deja de llamar la atención al revisar la campaña de Santiago Wanderers en 1978 fue que su localía la ejerció en el estadio Sausalito. ¿Qué pasaba con Playa Ancha? El historiador del deporte y comentarista de Radio Portales, Patricio Leal, recuerda que en aquella época en el coloso de subida Carvallo se instalaba la nueva pista atlética. "Llegaba el rekortán a Playa Ancha, pero no había la tecnología suficiente como para que los trabajos se llevaran a cabo de una manera más acelerada", sostiene, aunque dejando en claro que de todas formas los hinchas acompañaron de manera "muy importante" a los dirigidos por Guillermo Díaz en Viña del Mar.
"Había una mezcla de juventud y experiencia. Nos hicimos fuertes en Sausalito y eso fue clave"
Reinaldo Hoffman, Exdelantero de Wanderers"
"Con Guillermo Díaz hablábamos el mismo idioma. Él había sido un tremendo jugador y el respeto era enorme"
Juan Rivero, Exlateral de Wanderers"
Arancibia: "La clave fue el grupo"
Alejandro Arancibia tenía apenas 16 años en 1978. El delantero explica que si bien no era parte del plantel liderado por el técnico Guillermo Díaz, sin embargo sí tuvo la posibilidad de jugar un par de amistosos y entrenar con el primer equipo dos veces a la semana en aquella temporada, preparando su debut unos meses más tarde. "La clave del ascenso en esa campaña fue el grupo", rememora con nostalgia, coincidiendo en que "se trató de un vestuario muy bien elegido por el entrenador y en donde la mezcla de experiencia y juventud fue casi perfecta". Para "Pecho de Palo" se trata de momentos "imborrables" en el inicio de una trayectoria que luego le vio vestir las camisetas de Audax Italiano, San Luis y el ochentero Súper Lo Miranda.
partidos ganados, 15 empates y cuatro derrotas fue el registro de la triunfal campaña de Santiago Wanderers en 1978. 17
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Arturo (Vidal) ha hecho una carrera brillante, demuestra en Barcelona que es uno de los mejores del mundo y es difícil reemplazar a ese tipo de jugadores" gabriel arias, arquero de la Selección Nacional