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Temas como "En un rincón del alma", "Cuando un amigo se va", "Callejero" y "A partir de mañana" son parte del cancionero iberoamericano, por lo que el deceso de su autor, el argentino Alberto Cortez, causó gran desazón. El artista, de 79 años, conocido como el compositor de las cosas simples, falleció ayer en el hospital HM Puerta del Sur de Madrid -ciudad en la que vivía hace más de 50 años-, debido a unas úlceras gástricas cuyo tratamiento se complicó, según informó Efe citando fuentes próximas al artista.

El Presidente de Ecuador, Lenín Moreno, escribió en su cuenta de Twitter que el "continente está de duelo" por la muerte de "el cantor-poeta del amor en todas sus dimensiones: a la patria, a la pareja, al prójimo, a las causas justas, a la vida... un ejemplo de optimismo". Su antecesor, Rafael Correa, también mostró su pesar en la misma red social: "Cuando un amigo se va queda un espacio vacío, que no lo puede llenar la llegada de otro amigo".

No fueron los únicos. Evo Morales, Presidente de Bolivia, también ocupó Twitter para lamentar el fallecimiento del cantautor, del cual dijo era "reconocido por su sensibilidad social y sus canciones dedicadas al amor, la esperanza y la amistad"; mientras que Ricardo Arjona utilizó Instagram para alabar a quien "fue tan puro, noble y transparente como lo fueron sus canciones", recordando que "cuando nadie quería darme una oportunidad en ningún programa argentino, él intercedió por mí".

Su salto a la fama

Cortez, cuyo verdadero nombre era José Alberto García Gallo, nació el 11 de marzo de 1940 en Rancul, un pueblo situado en la provincia argentina de La Pampa. A los 18, eso sí, ya había decidido cambiar su nombre a Alberto Cortez, cuando empezó a incursionar en una carrera profesional de cantante en Buenos Aires con la orquesta Jazz de San Francisco.

Según consta en "La vida", biografía de más de 500 páginas escrita por Laura Etcheverry, compuso su primera canción a los 12 años, cuando descubrió el erotismo, "Un cigarrillo, la lluvia y tú"; mientras que a los 20 tomó un barco rumbo a Europa tras los pasos de grandes maestros de la música popular, en especial de Jacques Brel. Fue en este continente donde grabó su primer disco, "Welcome to the Latin Club" (1961). A éste le seguirían más de cuarenta trabajos, entre ellos "No soy de aquí" (1971), "A mis amigos" (1975) y "Castillos en el aire" (1980).

Todos ellos tienen la singularidad de mezclar música y poesía sin problemas, siguiendo su premisa de que la primera era la manera de acercar la segunda "al pueblo", de donde "nunca debió salir".

Tras un paso por Bélgica -donde conoció a su esposa, la pintora Renée Gevaert-, instaló su residencia en España en la década del 60, participando en el Festival de Palma de Mallorca con la canción "Me lo dijo Pérez" y donde en 1967 protagonizó un concierto sin micrófonos en el Teatro de la Zarzuela de Madrid, que resultó fundamental en su carrera.

En los ochenta, consolidada su carrera musical, realizó diversas giras por Chile, Perú, Colombia, Venezuela, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, México y EE.UU., donde tuvo la oportunidad de cantar en el célebre Carnegie Hall de Nueva York.

En 1992 celebró sus 25 años como cantante con un concierto en el Teatro Colón de Buenos Aires y dos años después presentó un espectáculo con su amigo Facundo Cabral llamado "Lo Cortez no quita lo Cabral", una puesta en escena que recorrió México, España y Argentina y que se tradujo en la producción de dos discos homónimos (1994 y 1995).

Sus nuevos desafíos

Fue en 1996, mientras se encontraba en el balneario argentino de Mar del Plata, cuando el autor sufrió un accidente cerebrovascular. Luego de ser operado pudo retomar su carrera, aunque debido a las secuelas no pudo volver a tocar la guitarra.

Dos años después lanzó un disco de recopilación de sus 70 mejores canciones titulado "Cortez al desnudo", en el que están algunos de sus temas más conocidos, como "Las palmeras", "El vagabundo", "Renato", "Prima donna" y "Mi amigo Manuel".

Con el disco "En un rincón del alma", el artista celebró en 2001 sus cuarenta años en España y tres años después editó "Alberto Cortez Sinfónico", grabado en directo con la Orquesta Sinfónica de Houston. A éste le siguió "Identidad", con el que realizó una gira por España en 2005, mismo año en que realizó un histórico concierto en el estadio Luna Park de Buenos Aires.

En 2011, en una visita a Buenos Aires durante la cual se presentó en el Teatro Coliseo, le confesó al diario Clarín que aunque se sentía "pionero en la cantautoría" en España, la mayor parte de la prensa no le tenía "en cuenta".

Su disco "Tener en cuenta" -lanzado ese mismo año y que le mereció una nominación al Grammy- era una reivindicación de "los que están olvidados", sostuvo, mencionando entre ellos a grandes autores de tango, como Homero Manzi.

A principios de marzo del año siguiente regresó a los escenarios españoles con el espectáculo "Alberto Cortez en estado puro", con el cual también viajó a Estados Unidos. Tras un descanso de los escenarios por tres años, volvió en gloria y majestad al Teatro Nuevo Apolo de Madrid en abril de 2016, con un recital que formó parte de una gira a la que llamó "El retorno".

Pese a su edad y los múltiples achaques acumulados, Cortez no había abandonado su carrera. De hecho, según las mismas fuentes, tenía compromisos en Puerto Rico, en República Dominicana y en México, tras concluir a fines de 2018 otra gira, y preparaba un nuevo disco con temas diferentes al que fue su último espectáculo, "Boleros".

"Canto porque no tengo otro remedio", declaró hace cinco años sobre su negativa a jubilar en una entrevista en la que se tomó con humor el número de veces que la "rumorología" había acabado con él: "Son tantas las veces que me han matado que, ya ven, lo han hecho tan mal que aquí sigo muy vivo y sin retirarme".

Fue nominado al Grammy Latino 2011 y galardonado con la Medalla de Plata en el New York Film Festival de Estados Unidos (1980) al cantante extranjero más popular en Cuba (1982) y con la Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes en España. También obtuvo cuatro discos de oro y un Grammy a la Excelencia Musical en 2007.

A pesar de todo ello, el artista se consideraba más poeta o letrista que músico y escribió varios libros de poemas recopilando aquellos temas que no llegaron a ser canciones: "Equipaje", "Soy un ser humano" y "Almacén de almas".

El adiós

El artista había ingresado de urgencia el 27 de marzo pasado en el Hospital Universitario HM Puerta del Sur, en Móstoles, a las afueras de Madrid, debido a una hemorragia gástrica, cuadro que empeoró el miércoles por la noche.

La noticia de su muerte fue confirmada por la Sociedad General de Autores y Editores de España y la Asociación Argentina de Actores en sus respectivas cuentas de Twitter. "Consternados por el fallecimiento de Alberto Cortez, un autor único que hizo de la Música su vida y que convirtió la vida de todos en una música y una poesía que nos acompañará siempre", expresó la SGAE.

El gremio argentino, en tanto, lamentó el deceso del artista, enviando condolencias "a sus familiares, amigos y a la comunidad musical".

La capilla ardiente se instalará hoy en la sede de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), mientras que sus parientes harán una misa en Rancul. Luego, sus restos serán cremados.

de marzo el autor y compositor había cumplido los 79 años. Llevaba más de 50 radicado en España. 11

de marzo fue ingresado de urgencia a un hospital de Madrid, donde ayer falleció por úlceras gástricas. 27

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Este año tengo previsto comenzar (...) una gran obra utilizando todo lo que he aprendido durante mi carrera"

Francis Ford Coppola, anunciando que hará "Megalópolis"