Incentivos tributarios regionales
Valparaíso es una región con recursos y potencial, pero el crecimiento, empleo y bienestar señalan lo contrario. Los recursos fiscales que llegan a la región son altos comparativamente a otras regiones; entonces, pareciera ser que el desempleo no es sólo un problema productivo o de recursos fiscales, sino del tipo de empleos que necesitamos. Minería, logística, puertos, producción hortofrutícola y vitivinícola, más algunas industrias, destacan en el potencial regional, pero son insuficientes para una población urbana cada vez más sofisticada que se ha concentrado en las cinco comunas que conforman el Gran Valparaíso. Las comunas de Valparaíso, Viña del Mar, Quilpué, Villa Alemana y Concón agrupan al 52% de la población regional. Casi un millón de habitantes que requiere empleos de calidad, como los del sector servicios, abundantes en Santiago, que es donde están las casas matrices de las empresas y sus centros operacionales. Quizás sea tiempo de extraer de la capital lo que necesitamos, con los incentivos correctos y qué mejor que los tributarios para ello.
¿Qué pasaría si las empresas que instalan su casa matriz y operacional en nuestra región pagaran menos impuestos? Imagine una rebaja de impuestos a la banca si sus operaciones y decisiones se realizan en el Gran Valparaíso: ¿cuántos bancos se vendrían?, ¿cuántos empleos de calidad se generarían en la región?
Con los incentivos tributarios correctos podríamos traer a una industria completa a nuestra región: la banca, los medios y un largo etcétera.
El dilema actual que enfrentamos es que los recursos fiscales son insuficientes para crear los empleos que necesitamos, el impulso industrial está bien, pero necesitamos más. Corfo ha hecho su parte promoviendo las iniciativas que han creado Valparaíso Universitario, Tecnológico y Turístico, industrias que han crecido en los últimos 20 años, pero que no responden al apremio por respuestas rápidas.
La promoción y desarrollo industrial y productivo son siempre bienvenidos, pero se debe considerar que estas industrias son sensibles a los vaivenes económicos y a los precios internacionales, por lo que expanden y contraen su empleo con rapidez, sin posibilidad de entregar estabilidad de largo plazo en el empleo.
Lo que necesitamos en la región son mejores empleos permanentes, es decir, trabajos que usen mano de obra calificada y que trascienden en el tiempo, especialmente a los vaivenes económicos. Esos empleos se concentran en la capital. Tenemos la experiencia de las universidades y el bienestar que ellas entregan a la región, con empleo directo calificado y una alta demanda de empleo indirecto. Junto a Valparaíso Universitario, podríamos exigir un Valparaíso Financiero o Valparaíso de Medios, o ambos, u otros. El objetivo es tener una industria de servicios adicional que nos ayude con nuestras necesidades y desafíos económicos y ello es posible y factible si logramos entregar los incentivos tributarios correctos a industrias específicas.
Economista
Alejandro Maureira Butcher