"El teletrabajo no altera los derechos ni la seguridad"
-¿Por qué el proyecto de Reforma Laboral ingresa por el Senado y no por la Comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados como se esperaba?
-¿Cuáles son los puntos más importantes del proyecto?
-El nombre del proyecto lo dice todo: Modernización Laboral para el Trabajo, Familia e Inclusión. Se trata de una iniciativa que moderniza la legislación para que se haga cargo de la nueva realidad laboral del Siglo XXI, donde no solo nos encontramos con nuevas formas de empleo que tenemos que ser capaces de aprovechar, sino también con un creciente anhelo de nuestros trabajadores por una vida más humana y más feliz, donde el trabajo y la vida personal y familiar tengan al fin un punto de encuentro. Por eso el proyecto incluye la reducción y la adaptabilidad de la jornada laboral, para que las personas puedan adecuar su trabajo a su vida y no al revés, como sucede hoy, a causa de la rigidez de nuestra legislación. En materia de inclusión, el proyecto entrega herramientas a trabajadores que han sido postergados para que tengan facilidades concretas para acceder al trabajo, como es el caso de las personas con discapacidad, quienes han estado privados de libertad, los adultos mayores y los jóvenes.
-¿Cuál es la principal diferencia del proyecto de Modernización Laboral versus las condiciones de empleabilidad que existen actualmente?
-Las diferencias se dan en dos planos, en los que tienen que ver con trabajo y familia, y las que tienen que ver con inclusión. Respecto de lo primero, el proyecto propone la reducción y la adaptabilidad de la jornada laboral, para que las personas puedan conciliar su vida de trabajo con su vida personal y familiar. Eso hoy es prácticamente imposible de lograr, porque el Código del Trabajo establece una sola jornada, que en muchísimos casos termina siendo una camisa de fuerza para los trabajadores. En materia de inclusión, el proyecto le abre las puertas a trabajadores que en la legislación actual están injustamente postergados, como son las personas con discapacidad -que aún tienen problemas para ingresas al aparato público-, quienes han estado privados de libertad, los adultos mayores y los jóvenes.
-¿Cómo se articulará la negociación entre el trabajador y la empresa, sin que el primero se vea en desmedro frente al segundo? ¿El empleador estará obligado a aceptar los términos del trabajador?
-Tal como sucede hoy, ningún empleador tiene ni tendrá derecho a cambiar unilateralmente las condiciones de un contrato, ni a imponer condiciones en contra de la voluntad del trabajador. Quien abuse de un trabajador o vulnere sus derechos será sancionado como corresponde. Dicho eso, hoy hay muchos trabajadores que para obtener beneficios dependen únicamente de la buena voluntad del empleador. Nosotros queremos que esto deje de ser así y se transforme en un derecho que establezca el Código y que pueda ser materia de negociación tanto en los contratos colectivos como individuales. En algunos casos estas materias las negociará directamente el sindicato en representación de los trabajadores y, en otros, el trabajador querrá negociarlas individualmente. Ojalá siempre se negocie a través de un sindicato, si no se puede o no se quiere, nosotros no somos quienes para obligar a los trabajadores.
- "Cambiar los 2 domingos de trabajo al mes por 12 al semestre…". El cálculo parece dar exactamente lo mismo, entonces, ¿cuál es la diferencia respecto a la cantidad de domingos libres semestrales que se consideran actualmente?
-El proyecto no elimina ningún domingo de descanso que ya esté garantizado en la actual legislación. Lo que nosotros proponemos en el marco de la Modernización Laboral para todos los trabajadores es ampliar la modalidad de uso de los domingos que hoy ya existe para el sector hotelero y de turismo y que, en todo caso, requiere del acuerdo expreso del trabajador. A modo de ejemplo, si en un mes de alto nivel de ventas -como podría ser diciembre- un trabajador decide libremente trabajar 3 domingos, a cambio va a tener 3 domingos de descanso en noviembre o enero, y no 2, que es lo que le correspondería hoy.
-Lo que hace nuestro proyecto es establecer en la ley que cualquier suspensión de contrato siempre devengará antigüedad, con la correspondiente indemnización y las vacaciones del trabajador. Ello, para evitar lo que sucede hoy en que, sin haber una ley expresa, muchos trabajadores que han acordado suspensión de sus contratos deben reclamar judicialmente el reconocimiento de sus vacaciones y antigüedad durante este periodo o quedan entregados a la interpretación de la Dirección del Trabajo.
-¿Se mantendrán los actuales beneficios en caso de despido? (mes de aviso, devolución del AFC, pago de vacaciones pendientes, etc.).
-Absolutamente. Nada en el proyecto altera las indemnizaciones ni los derechos asociados al despido.
-¿Qué beneficios tendrán los trabajadores de plataformas digitales? ¿Puede especificar y dar ejemplos?
-Las personas que presten servicios a través de plataformas digitales y que lo hagan en forma independiente -sin vínculo de subordinación y dependencia, sin exclusividad y sin cumplimiento de horario, entre otros- tendrán acceso a todas las prestaciones de seguridad social, porque así como nosotros queremos decir sí a los trabajos del futuro, con la misma fuerza decimos no la informalidad laboral y a desprotección de nuestros trabajadores. Ahora bien, como no todas las plataformas son lo mismo, el proyecto no presume nada y mantiene intacto el derecho a reclamar relación laboral donde la hay.
-Respecto a la idea del Presidente Piñera de fomentar el teletrabajo, ¿en qué casos o rubros podría funcionar este sistema?
-¿Qué sentido tiene hoy obligar a un trabajador o trabajadora estar 5 días a la semana, 9 horas al día frente al computador, cuando tiene el mismo computador en su casa? ¿Por qué no permitirle que parte de la jornada la pueda realizar en un lugar distinto, haciendo que su vida laboral sea más compatible con su vida familiar y personal? El teletrabajo funciona en cualquier actividad que sea compatible con esa modalidad y por eso la ley no excluye ninguna labor. Lo importante es que los teletrabajadores estén debidamente protegidos y que ellos tendrán los mismos derechos individuales y colectivos que cualquier otro trabajador. Por eso decimos que modernizar no es precarizar, es humanizar.
-Bajo el sistema de teletrabajo, ¿qué pasaría con los recursos que hoy proporcionan los empleadores cuando el trabajo es en un lugar específico? Por ejemplo: computadores, papelería, implementos de seguridad, vales de almuerzo o su equivalente y bonos de movilización.
-El teletrabajo no altera en lo más mínimo los derechos ni la seguridad de los trabajadores. Por ello, las condiciones del contrato no varían y sigue siendo obligación del empleador otorgar todas las condiciones a las que se ha comprometido. Todos los gastos en equipos y demás temas necesarios para trabajar desde la casa o el lugar que se defina, serán siempre de cargo del empleador. El teletrabajo está pensado para mejorar la vida los trabajadores, para hacerla más humana.
-La presidente a de la CUT ha dicho que el proyecto elimina las actuales limitaciones y regulaciones de las jornadas de trabajo y descanso, lo cual precarizaría las condiciones laborales. ¿Qué garantías entrega el proyecto para que ello no ocurra?
-La presidenta de la CUT probablemente no ha leído bien el proyecto. Porque nuestra propuesta no solo mantiene los actuales límites máximos diarios de jornada, sino que además reduce la jornada semanal, aumenta los días de descansos y otorga opciones para que las partes puedan convenir alternativas de jornada que permitan que el trabajador pueda conciliar su vida laboral con su vida personal y familiar. Por ejemplo, permite pactar una jornada de 180 horas al mes, lo que supone una reducción de la jornada semanal anual promedio desde 45 a 41 horas. Además, da la posibilidad de aumentar los días de descanso, ya que se puede distribuir la jornada dentro del mes, trabajando más unos días (siempre respetando el máximo de horas actuales) para descansar otros. También se le permite al trabajador cambiar horas extras por días adicionales de vacaciones.
-Desde la oposición han planteado que el Gobierno está ofreciendo flexibilidad laboral a cambio de sacrificios de los trabajadores. Esto, considerando la posibilidad de rebajar tiempo de colación para salir más temprano del trabajo, más vacaciones por más horas extras, etc. Además, alegan que el nuevo proyecto no contempla un cambio en la jornada máxima de trabajo sino que es un mero traspaso de horas de un día a otro…
-Esa crítica falsa o es por desinformación o por mala intención, porque como le decía anteriormente, nuestra propuesta no solo mantiene los actuales límites máximos diarios de jornada, sino que además imputa la hora ordinaria de colación a la jornada de trabajo, cuando esta es de 10 horas o más, cosa que no ocurre hoy. Y a ello sume que estamos reduciendo la jornada de trabajo a un promedio semanal anual de 41 horas y ofreciendo alternativas de adaptabilidad para que los trabajadores puedan tener un punto de encuentro entre su vida personal, familiar y laboral.
-¿Cuál será el poder de negociación de los sindicatos en un sistema que parece individualizar las relaciones laborales versus la noción colectiva?
-Nosotros queremos que en Chile haya más y mejores sindicatos, con más y mejores herramientas para negociar. Por ello, nuestra propuesta aumenta las posibilidades y las materias de negociación de los sindicatos en representación de sus trabajadores y esperamos que muchas sean incluidas en los procesos de negociación colectiva, porque todas apuntan a mejorar la calidad de los socios. Dicho lo anterior, si un trabajador no está afiliado a un sindicato y quiere pactar estas mejoras individualmente, con qué argumento habríamos de impedírselo. Hoy en la pequeña y mediana empresa la tasa de sindicalización es menor al 10%. ¿Vamos a quitarle el derecho a esos trabajadores de poder pactar una jornada de trabajo más compatible con su vida personal por el solo hecho de no estar afiliados a un sindicato? Eso me parecería injusto y arbitrario.
-¿Cuál es su visión respecto de la propuesta de la oposición para reducir a 40 horas semanales la jornada laboral?
-Si el objetivo realmente es mejorar la calidad de vida de todos los trabajadores, sin que afecte sus remuneraciones ni la productividad del trabajo, no basta con rebajar las horas de trabajo y la jornada. Es fundamental además darle herramientas al trabajador, a los sindicatos y a la empresa, para que puedan distribuir esa jornada, para hacerla más compatible con la vida personal del trabajador y con los ciclos de trabajo de la empresa. Nuestra propuesta, a diferencia de la propuesta del Partido Comunista, no solo rebaja la jornada de trabajo a un promedio de 41 horas semanales promedio, sino que además permite adaptarla a las necesidades de los trabajadores, mejorando la calidad de vida sin afectar las remuneraciones y sin que tenga impacto negativo en la economía.
-¿Qué espera de la votación de mañana lunes?
-Esperamos que los parlamentarios voten como votarían los más de 2 millones y medio de adultos mayores y pensionados en Chile. Esta reforma mejora las pensiones de millones de adultos mayores desde el primer momento; es necesaria, es justa y es urgente, no sólo porque estamos pagando malas pensiones, sino también porque nuestro país envejece mucho más rápido que lo normal. Espero que el día lunes se apruebe la idea de legislar y avancemos rápido a un acuerdo que permita que este proyecto se haga realidad. Eso es lo que espera la inmensa mayoría de los chilenos.
-¿Cuántos puntos exigidos por la oposición están dispuestos a transar?
-Nosotros estamos dispuestos a evaluar con especial atención todas las propuestas que nos han hecho llegar tanto parlamentarios como directivas de partidos. Compartimos con los parlamentarios que nuestro sistema de pensiones requiere más solidaridad. También estamos abiertos a profundizar la idea de una institución pública que administre la cotización adicional, así como a fortalecer y mejorar la fiscalización en el pago de las cotizaciones por parte de los empleadores, y otras materias. Nuestra prioridad es mejorar las pensiones de los adultos mayores, respetando el derecho de propiedad que tienen todos los trabajadores sobre sus ahorros y sobre esa base estamos dispuestos a acoger todas las propuestas que mejoren el proyecto.
-¿Se está trabajando en un proyecto para aumentar la edad de jubilación?
-Jamás ha estado en la idea del gobierno ni del proyecto de ley aumentar la edad de jubilación obligatoria. Por el contrario, lo que nosotros establecemos es un incentivo y un complemento a la pensión para aquellos que voluntariamente quieran y puedan retrasar su edad de jubilación.
"Ningún empleador tiene ni tendrá derecho a cambiar unilateralmente las condiciones de un contrato, ni a imponer condiciones contra la voluntad del trabajador". "Espero que el día lunes se apruebe la idea de legislar (Pensiones) y avancemos rápido a un acuerdo que permita que este proyecto se haga realidad".
emv
Días intensos han marcado la agenda del ministro del trabajo y Previsión Social, Nicolás Monckeberg. Por su cartera pasan dos de las reformas más importantes que contempla el Gobierno del Presidente Sebastián Piñera. Por un lado está el proyecto de Reforma Laboral, que ha abierto un amplio debate respecto de la flexibilidad laboral; por el otro, la modificación al sistema de Pensiones, cuya idea de legislar será votada mañana por la comisión del Trabajo. En esta conversación, el secretario de Estado detalla las modificaciones planteadas por el primer proyecto y llama a abrir la discusión respecto del segundo.
-Lo ingresamos por el Senado porque en la Cámara de Diputados se está discutiendo la reforma que mejora las pensiones a los adultos mayores, y lo que queremos es que estos dos proyectos tan importantes para Chile avancen en paralelo.
-"Suspensión del contrato por mutuo acuerdo…": ¿Se tendrán que recuperar esas horas?
REFORMA DE PENSIONES
la comisión de trabajo de la cámara acordó postergar la votación de la reforma.
PABLO OVALLE ISASMENDI/AGENCIAUNO