Pamela Boltei

Viña del Mar, Concón y Valparaíso son las tres comunas del área metropolitana de la Región que más gasto municipal promedio entre los años 2015 a 2017 hicieron por habitante, según el último Informe de Calidad de Vida Urbana (ICVU) 2019, elaborado entre la Universidad Católica y la Cámara Chilena de la Construcción (CChC).

De las once comunas que fueron parte del estudio, que considera ciudades en base al número de habitantes, la que gastó más dinero por persona fue Viña del Mar, con $241,5 mil por vecino, seguida de Concón, con $227 mil y luego Valparaíso, con $205,9 mil.

Lo anterior coincide bastante con el ranking en el propio ICVU, que posiciona en el primer lugar regional a Concón, luego a Viña del Mar y en tercer lugar a Valparaíso.

En cuanto a gasto municipal a estas tres comunas le siguen Quilpué, con $185,8 mil; San Antonio, con $170,2 mil; Los Andes, con $157,3 mil; Limache, con $150,4 mil; Quillota, con $146,7 mil; San Felipe, con $141,1 mil; La Calera, con $139,9 mil; y finalmente Villa Alemana, con $122,6 mil.

Fondo común municipal

Al comparar estos números con el porcentaje de dependencia del Fondo Común Municipal (FCM) hay similitudes entre las comunas que más gastan con las que menos dependen de estos dineros del Estado, aunque existen algunos casos que llaman la atención: Si bien Los Andes tiene un gasto municipal por habitante de $157 millones, depende un 50,8% del FCM, algo similar a lo que ocurre en Quilpué, que depende un 50,7% del FCM, pero es la cuarta comuna a nivel regional con mayor gasto municipal por habitante.

En el caso de las tres primeras ciudades del ICVU 2019 a nivel regional, Concón depende un 12,5% del Fondo Común Municipal; Viña del Mar, un 6,7% -es la que menos depende- y Valparaíso, un 28,6%, ubicándose en este ítem en tercer lugar nuevamente, esta vez detrás de Concón que está en segundo lugar.

Arturo Orellana, director del estudio, dice que "todos los municipios se financian por el Fondo Común Municipal, los aportes que reciben dependen fundamentalmente de tamaño de población, del porcentaje de predios o propiedades que no pagan contribuciones, por lo tanto se compensan un poco y las otras son las asignaciones directas para Educación y Salud y además los ingresos propios. Estos últimos son aquella fracción de cada impuesto territorial, contribuciones, patentes comerciales, permisos de edificación. ¿Cómo se gasta esa plata? No lo sé, no me corresponde evaluarlo, pero evidentemente en un municipio como Viña del Mar probablemente la mayoría de los ingresos son propios, por el turismo, restaurantes, etc, y muchas patentes comerciales que se pagan y también muchos proyectos inmobiliarios y permisos de edificación. A eso hay que sumarle que la mayoría o un porcentaje importante -a diferencia de las otras comunas que componen el área metropolitana de Valparaíso- de los propietarios pagan contribuciones. Por eso es un municipio, entre comillas, más rico que el resto. Ahora, si lo hace mal o no, no tiene que ver con el origen de las platas, y eso no es tema del ICVU".

26% para mantención

De acuerdo al administrador municipal de Viña del Mar, Claudio Boisier, en la comuna "cerca del 60% del presupuesto municipal se destina a obras y servicios directamente relacionados con la comunidad. Cerca del 26% se destina a la mantención de la comuna y a los servicios comunitarios como mantención de aseo, de áreas verdes, alumbrado público, semáforos, etc. Esto implica un gasto cercano a los $ 26 mil millones anuales. En cuanto a gastos del funcionamiento del municipio, poco menos del 40% del presupuesto se destina a recursos humanos, gastos que son relevantes. Un 10% de este presupuesto se gasta directamente en Salud y Educación de las personas más vulnerables de la comuna".

Asimismo, detalla que "el Plan de Obras con recursos propios bordea el 10% del presupuesto municipal. La Municipalidad de Viña del Mar no depende del Fondo Común Municipal, porque sus ingresos propios le permiten financiar las cifras que se acaban de señalar, y contribuir a dicho fondo para el resto de las comunas".

El caso de Valparaíso

En Valparaíso el 63% de las propiedades no pagan contribuciones, por lo tanto el municipio recibe - a juicio de Orellana- "muy poca plata, siendo un municipio con muchos más problemas que Viña del Mar y más encima depende mucho más del Fondo Común Municipal. Cuando un municipio depende mucho de éste significa que tiene menos capacidad y recibe menos ingresos propios en forma autónoma, por lo tanto probablemente menos posibilidades de inversión y de mejorar la calidad de vida".

El presidente de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), Gian Piero Chiappini, dijo que "hay una correlación negativa y directa entre calidad de vida urbana y dependencia del Fondo Común Municipal, lo que por supuesto refuerza la idea que hemos postulado permanentemente como gremio y como privados, en orden a que el desarrollo de ambientes de negocios apropiados en las comunas posibilita una mayor recaudación municipal y, por tanto, permite a las autoridades comunales mayor independencia y autonomía para la planificación y gestión".

Esto -añade- "es especialmente evidente en Valparaíso, donde, pese a tener dimensiones bien evaluadas por el ICVU como 'Condiciones Socioculturales' y 'Conectividad y Movilidad'; evidentemente se está quedando por debajo a nivel país -y de un estándar mínimo que permita ofrecer bienestar a los vecinos-, en dimensiones como 'Condiciones Laborales' y 'Ambiente de Negocios', lo que se refleja claramente en la alta cesantía, el empleo precario, la crisis del comercio y la grave caída de las inversiones (...) es inexplicable que muchos de ellos tengan casi descartada una fuente clave de financiamiento, como el pago de contribuciones".

Sharp: más austeridad

De acuerdo al alcalde porteño Jorge Sharp las cifras del ICVU en las materias señaladas responden a que la Alcaldía Ciudadana ha priorizado diversos proyectos para mejorar la calidad de vida. "Como es de conocimiento público, el municipio porteño estaba inmerso en una gran crisis económica, por lo que debimos organizar una ejecución más austera, renegociando los contratos más onerosos y lesivos para la gestión, los que además fueron cuestionados por la Contraloría", dijo.

En ese sentido, detalla que "se realizaron mejoras en la infraestructura municipal, así como también de los espacios deportivos comunitarios, espacios públicos, mejora y mantención de calles, escalas, barandas, entre muchos otros. Para recaudar recursos hemos trabajado en campañas de sensibilización, donde se pide a los contribuyentes que paguen sus servicios, ya sea patentes, servicios de aseo, permisos de circulación, pues estas son entradas económicas directas que permiten seguir desarrollando las medidas que hemos tomado".

Para Sharp "a diferencia de otras comunas que poseen ingresos extras, la Municipalidad de Valparaíso requiere de diversos pagos y fondos, pues como una gran parte de las viviendas de la comuna se encuentra exenta de contribuciones, debemos orientar nuestra estrategia en generar formas de pagos en aspectos que sí tienen cobro de forma más amables y expedita para los usuarios".

Arturo Orellana aborda también otros casos: "No es culpa de los municipios chicos de Quilpué o Limache que la mayoría de la gente no pague contribuciones, porque es un tema de la ley: No puede ser que los municipios dependan de si hay gente que paga o no las contribuciones para tener recursos, o que dependan de si se instala o no un hotel o un restaurante para tener ingresos propios. Hay un sistema de financiamiento que es un desastre en materia municipal y si se suma a eso una mala gestión el tema es mucho más catastrófico".

Inversión en ciudades

Respecto a las diferencias entre las cifras de gasto municipal y FCM, el experto respondió: ¿Qué porcentaje de las viviendas en Quilpué no paga contribuciones? Un 72%. Ese dato es menor que el de Villa Alemana, que el de Limache. La mayoría no paga contribuciones, pero es una situación un poco mejor que los otros dos municipios. Ha habido inversión y han tenido ingresos propios por permisos de edificación, algunas patentes que han llegado a la zona. Tiene un presupuesto alto pero está bajo los $200 mil de gasto por habitante. El 70% de los municipios en Chile tiene un municipio menor a $200 mil por habitante. Viña del Mar está por sobre eso, pero no se compara con las comunas más ricas de la Región Metropolitana, ni siquiera con Santiago".

En ese sentido, explicó que "el rango entre $150 y $200 mil por habitante es donde está la mayoría de los municipios. En términos del estándar de calidad de vida la V Región tiene uno más bien positivo. No es lo que ocurre con la periferia de Santiago. Salvo San Felipe, que hace rato está en un rango inferior, y Limache, que hay que considerar que es primera vez que la consideramos en el ICVU".

"La evidencia científica nos confirma que hay una correlación negativa y directa entre calidad de vida urbana y dependencia del Fondo Común Municipal"

Gian Piero Chiappini, Presidente CChC Valparaíso

60% de presupuesto se gasta en obras que van en "directo beneficio de la comunidad", dijo el administrador municipal de Viña del Mar, Claudio Boisier.

17,2% de exención de pago de contribuciones es el que registra la comuna costera de Concón, liderando -al igual que el índice del ICVU 2019- el ranking regional en los que menos pierden por pago de predios.

Concón Un 17,2% están exentos de pago de contribuciones.

Viña del Mar Un 33,6% están exentos de pago de contribuciones.

Valparaíso Un 63,6% están exentos de pago de contribuciones.

Quilpué Un 72,9% están exentos de pago de contribuciones.

Limache Un 76% están exentos de pago de contribuciones.

Los Andes Un 78,2% están exentos de pago de contribuciones.

Villa Alemana Un 83,6% están exentos de pago de contribuciones.

Quillota Un 83,9% están exentos de pago de contribuciones.

San Antonio Un 84,7 están exentos de pago de contribuciones.

San Felipe Un 85% están exentos de pago de contribuciones.

La Calera Un 89,9% están exentos de pago de contribuciones.