Everton quiere celebrar su aniversario 110 en grande y quizá por ello no es casual que ayer el club inaugurara, con la presencia de diversas autoridades, el Centro Integral de Alto Rendimiento y Rehabilitación (CIARR).

El recinto no es una construcción aislada, se enmarca dentro del masterplan presentado hace un par de años, y que será desarrollado en diversas etapas para mejorar la accesibilidad en el CDE e incorporar el edificio deportivo que en un futuro albergará la Casa del Jugador, que con cerca de 500 metros cuadrados tendrá la capacidad para alojar a 24 niños, contando con diversas instalaciones como salas múltiples, de estudio, baños y casino.

Es por ello que el CIARR fue anexado al edificio principal del CDE, y cuenta con una superficie de 220 metros cuadrados divididos en gimnasio (100 m2), clínica (40 m2) y bodega de utilería (80 m2).

La gran novedad dentro de todo es que el gimnasio contará con maquinaria de tecnología isoinercial, que trabaja la fuerza excéntrica y concéntrica de cada persona y permite desarrollar una metodología de entrenamiento distinta y no convencional, y que funciona en base a los movimientos que se dan en el campo de juego. A futuro, se espera que el recinto incluso pueda ser abierto a la comunidad en general y que el club pueda seguir aportando en el ámbito social.

"Es un gran paso que estamos dando como institución. Dentro de un masterplan que se presentó hace un par de años atrás, este es el primer paso. Un orgullo poder presentar un proyecto de esta envergadura, de clase mundial, único en su tipo, innovador en Chile", remarcó el presidente oro y cielo Pedro Cedillo, detallando que son muy pocos los clubes a nivel global que cuenta con esta tecnología, como Barcelona, Real Madrid, River Plate, Cruzeiro y Pachuca.

"Hay prioridades del club que afectan directamente el giro de la institución, que es el deportista, y poco a poco iremos creciendo dentro de este plan estratégico donde también tenemos como objetivo ser el cuarto grande de Chile no sólo en la cancha, sino que también fuera de ella. Y esto es parte de este crecimiento institucional", añadió Cedillo.

Los beneficios

A la hora de explicar en palabras simples las ventajas y beneficios de esta tecnología, Robert Paredes, director de Ciencias del Deporte de Everton, sostuvo que "nos va a permitir poder realizar y mejorar la fuerza en base a movimientos propios del juego, y a la vez poder prevenir distintos tipos de lesiones que pueden tener nuestros jugadores. Es algo novedoso e innovador".

La inversión en maquinaria isoinercial alcanzó los 30 millones de pesos, contemplando ocho yo-yo cónicas, ocho poleas, y dos cuadriceras.

"Sirven también para rehabilitar más rápido a los jugadores debido a que al trabajar tanto la fase concéntrica como excéntrica del músculo, provoco que no solamente un grupo muscular principal trabaje, sino que distintos grupos musculares", explicó Paredes, dando cuenta, a modo de ejemplo, que cuando en halterofilia se trabaja el cuádriceps, sólo se ejercita esa parte. En cambio, con la tecnología isoinercial se puede, por ejemplo, simular una patada fuerte al balón para trabajar distintos tipos de musculatura, como glúteo, isquiotibial, gemelo, entre otros. "Lo que apuntamos es a hacer más específico el trabajo de la fuerza en el fútbol", añadió.

Christian González, traumatólogo del plantel y jefe del área de salud, remarcó el hito que marca este centro que da la posibilidad de integrar sitios de entrenamiento, rehabilitación y salud, con personal idóneo manejando cada esfera del proceso.

"Con esto damos un paso firme en el entrenamiento y rehabilitación de series inferiores y jugadores del primer plantel", aseguró el médico del club.

"Un orgullo poder presentar un proyecto de esta envergadura, de clase mundial, único en su tipo, innovador en Chile"

Pedro Cedillo, Presidente de Everton

"Nos va a permitir mejorar la fuerza en base a movimientos propios del juego y, a la vez, poder prevenir distintos tipos de lesiones"

Robert Paredes, Director Ciencias del Deporte

"Con esto damos un paso firme en el entrenamiento y rehabilitación de series inferiores y jugadores del primer plantel"

Christian González, Traumatólogo del plantel y jefe del área de salud del club

uso del Sausalito

La presencia en el CDE de la alcaldesa de Viña del Mar, Virginia Reginato, y varios concejales de la Ciudad Jardín, es un indicio de lo recompuestas que están las relaciones con Everton después de los roces del último tiempo, sobre todo entre el Departamento Jurídico y de Control del municipio y el club. "Siempre hemos tenido las mejores relaciones y estamos siempre dispuestos a apoyar a Everton, y así lo vamos a seguir haciendo", recalcó Reginato. Las palabras de la autoridad se enmarcan en un escenario en el cual ambas partes están cerca de renovar el convenio por el uso de Sausalito. Al respecto, pero sin ahondar en detalles, la alcaldesa dijo que "está todo solucionado, no hay nada más que hablar".

En tanto, Javier Aravena, director de la Casa del Deporte, complementó que las reuniones están cerca de llegar a buen puerto, y puso énfasis en que "hemos demostrado que sentándonos a conversar y trabajando en conjunto, teniendo miradas de ciudad, podemos construir un buen futuro". Según el abogado, en general el contrato mantiene disposiciones antiguas como el entrenamiento semanal y las 1.500 entradas cedidas al municipio, "pero que tiene algunas variaciones que son específicas".

En ese sentido, la intención es que Everton pueda efectuar partidos preliminares con fútbol joven o femenino, e incluso realizar modificaciones al camarín de modo tal que quede personalizado y con los colores oro y cielo.

Carlos Oliver, gerente general auriazul, agregó que dentro de un acuerdo que fue establecido hace muchos años, se busca incorporar realidades y lógicas actuales de la industria, relativas a cómo opera el estadio y requerimientos del espectáculo y de seguridad. "Va súper bien encaminado, está la mejor disposición de ambas partes y próximos a firmar un nuevo contrato", dijo el ejecutivo.