Pamela Boltei
Los cuestionamientos que hace un mes surgieron respecto a la auditoría realizada en Viña del Mar -y en otras comunas del país- por la Contraloría volvieron a tomar fuerza luego que tres funcionarios del organismo que habrían denunciado los eventuales errores de cálculo en los déficits municipales fueran desvinculados.
Las "esquirlas" del caso alcanzan, incluso, al contralor regional Víctor Hugo Merino, pues en un requerimiento de integridad presentado por los funcionarios Patricio Barra, Pablo Soto e Ignacio Tapia, en el que acusan al contralor nacional Jorge Bermúdez de ocultar las diferencias de criterio con que el organismo evalúa los déficit y superávit municipales, se pone como ejemplo la remoción de uno de los miembros del equipo que hizo la auditoría en Viña del Mar por haber dado a conocer los eventuales errores en la misma.
Se menciona que el analista contable regional (ACR) de la Contraloría Regional de Valparaíso, Andrés Espinoza, había sido removido de su cargo y trasladado a otra función por el contralor regional de Valparaíso, Víctor Hugo Merino, y se advierte que esto sería en represalia porque el funcionario le habría hecho ver errores de fórmula con que se había elaborado el Informe de Viña del Mar.
La denuncia, que aborda varias otras materias, fue dirigida a la oficial de Integridad, Tamara Loyola, escrito en el que Merino no es denunciado directamente, sino que forma parte del contexto de los hechos que apuntan a Bermúdez.
Un reportaje de La Tercera encendió la luz respecto a posibles criterios dispares y eventualmente sesgados respecto a la contabilidad que los distintos equipos de la Contraloría en regiones tenían para realizar las auditorías, y puso como ejemplo el caso de Viña del Mar. El contralor nacional explicó la metodología a varios diputados en la Comisión de Constitución en ese momento.
El pasado lunes, el mismo medio dio a conocer que Bermúdez pidió la renuncia a Patricio Barra, jefe de la Dirección de Análisis Contable (DAC); Pablo Soto, jefe del Área de Información Contable y de apoyo a la Planificación, de la DAC; e Ignacio Tapia, jefe del Área de Estudios Financieros; el 31 de mayo y que estos dos últimos la firmaron, mientras que el primero, pese a tener un cargo de confianza, volvió a trabajar ayer.
La Tercera informó parte de la conversación que habrían tenido los exempleados con su jefe, y cita en voz de ellos lo que les habría dicho Bermúdez: "¿Ustedes no han visto que Carter (Rodolfo, alcalde de La Florida) puso un inserto a página completa en el diario en mi contra? Se imaginan las consecuencias para mí si se filtra que el cálculo está mal".
Luego, ellos concluyeron: "La preocupación de Bermúdez siempre estuvo en cubrir los casos de esos dos municipios (Viña del Mar y La Florida), al menos a nosotros jamás nos preguntó o planteó algo respecto de los otros municipios".
Esto generó reacciones principalmente de la UDI. La presidenta del partido, Jacqueline van Rysselberghe, volvió a cuestionar duramente a Bermúdez: "Esto que pasa ahora es gravísimo, porque podemos tener un contralor que despide gente porque le llevan la contra. Nosotros vemos que acá hay una obsesión, por parte del contralor, de ir tras municipios que no son de izquierda". En tanto, Juan Manuel Fuenzalida, diputado y vicepresidente de la UDI, pidió citarlo a la comisión de Constitución nuevamente y también solicitó que se abra una comisión investigadora sobre este tema. Bermúdez está invitado para hoy a las 15:30 a dicha comisión.
"Exclusiva confianza"
La Contraloría, por su parte, respondió en un comunicado que "los jefes de división son cargos de exclusiva confianza y están en permanente evaluación", razón por la cual se le pidió la renuncia a Barra "atendida su mala evaluación".
Respecto de la denuncia, el escrito dice que "antes de ser notificado de su desvinculación, el Sr. Barra y su equipo de confianza (quienes firmaron su renuncia voluntaria), no presentó ni formalizó ningún tipo de denuncia que diera cuenta de eventuales irregularidades en el trabajo de los equipos de auditoría de la CGR".
Esto también afecta directamente a la oficina regional de la Contraloría. La denuncia hecha por los funcionarios de la sede metropolitana aborda una materia en específico de la Quinta Región, afirmando que se removió a Andrés Espinoza por hacer ver "los errores de fórmula con que se había elaborado el informe de déficit de Viña del Mar".
Sin embargo, de acuerdo a fuentes relacionadas con el tema, Espinoza no habría sido removido sino más bien promovido de analista contable regional a la Unidad Técnica de Control Externo para apoyar la preparación de auditorías, debido a su buen trabajo en Viña del Mar. Incluso, todavía sigue colaborando en el área contable en algunos casos.
Aunque en la denuncia se afirma que encontró errores en el trabajo en Viña del Mar y los dio a conocer, Espinoza aparece firmando el Informe final de Auditoría a la Municipalidad de Viña del Mar de enero pasado. Es que él fue clave en la resolución de dudas contables en la ejecución del trabajo de Viña del Mar y, de hecho, cuando había situaciones más complicadas de resolver, era quien se comunicaba con el nivel central para hacer las aclaraciones pertinentes.
Por todo esto el contralor regional Víctor Hugo Merino deberá inhabilitarse del Consejo Superior de Integridad, del que es parte junto a otro contralor de regiones más varios directivos de nivel nacional -entre ellos la subcontralora Dorothy Pérez-, si es que el comité estima los argumentos de la denuncia.
La Contraloría General de la República, al ser consultada sobre el tema, explicó que "ante una denuncia o posible irregularidad el Consejo Superior de Integridad propondrá al contralor una posible resolución, y el contralor podrá instruir un procedimiento disciplinario o bien desestimarlo. También podrá disponer la realización de actividades de difusión y capacitación, entre otros".
El diputado Andrés Celis (RN) dijo que confía en las cifras de la Contraloría en el caso de Viña del Mar y no cree que el organismo tenga un afán político, aunque aseguró que sí apoyará la creación de una comisión investigadora -y pedirá ser parte de ella- para que se despejen las dudas de la UDI.
Además, defendió a Merino: "Yo lo conozco; es más, fue compañero de curso de un hermano mío en la Escuela de Derecho de la Católica, y yo tengo una muy buena opinión de él en cuanto a su formación jurídica y en la manera en que ha dirigido la Contraloría Regional. Y para los que no saben este contralor regional en el gobierno de Piñera 1 fue solicitado por el Ministerio del Interior para que trabajara justamente ahí. Entonces, algunos ven intereses políticos donde no los hay".
En tanto, para el diputado UDI Osvaldo Urrutia "no puede ser que se tome la determinación de despedir a un funcionario por el simple hecho de decir que el cálculo estaba mal hecho en Viña y por eso creo que la Contraloría tiene que explicar qué pasó en esta situación".
"Antes de ser notificado de su desvinculación, el Sr. Barra y su equipo de confianza, no presentó ni formalizó ningún tipo de denuncia"
Contraloría
"Esto que pasa ahora es gravísimo, porque podemos tener un contralor que despide gente porque le llevan la contra"
Jacqueline van Rysselberghe, Presidenta UDI
"Fue solicitado por el Ministerio del Interior para que trabajara justamente ahí. Entonces, algunos ven intereses políticos donde no los hay"
Andrés Celis, Diputado RN
