Claudio Ramírez

Embarcado en una campaña para enfrentar el comercio ambulante en todas sus aristas se encuentra el presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo, Manuel Melero, que por estos días difunde a lo largo del país la Campaña "Juguemos Limpio", iniciativa que busca fomentar el comercio formal a nivel nacional.

"Acá hay un problema social enorme con casi el millón y medio de trabajadores formales del comercio que ven una amenaza en la informalidad porque están poniendo en peligro su fuente de trabajo y así vemos cómo ha aumentado el desempleo, por ejemplo, en esta región", comentó el líder gremial.

- En particular, en el caso de Valparaíso el comercio da mucho empleo, pero buena parte de los indicadores del sector están a la baja, las ventas minoristas, los índices de victimización, etc. ¿Cómo ve el escenario?

- En Valparaíso en particular, desgraciadamente el tema es más preocupante que en otras partes del país. Se nota que hay una proliferación de comercio en las calles, de inseguridad en la ciudad, de precariedad económica, de vulnerabilidad en la población. En fin, hay una conjunción de factores muy negativa. Es preocupante y por eso creo que la toma de conciencia de las autoridades regionales es muy importante para que empecemos a trabajar en sentido contrario. No podemos tolerar que esto siga cayendo y deteriorándose en variables como la seguridad o la inversión, porque si no el resultado va a ser un deterioro generalizado. Ojalá que logremos revertir esa tendencia y empezar a mejorar de a poco. Es un trabajo complejo, continuo y que hay que hacer en equipo.

Problema estructural

- El tema del comercio ambulante parece muy complejo y con muchas aristas. ¿Cómo cree usted que en definitiva se debe abordar?

- Antes que todo, la verdad que este es un tema país, es estructural y tiene una historia. No es de un gobierno o un alcalde de turno, o de cualquier autoridad de turno, sino que es un tema nacional y que debemos abordar desde esa perspectiva. Para contestar derechamente la pregunta, lo clave es trabajar todos en conjunto, por eso que la campaña "Juguemos Limpio" que estamos difundiendo tiene una importancia enorme porque une a autoridades, a empresarios del mundo del comercio, los medios de comunicación y también algunos emprendedores que se han formalizado. En estos dos meses que llevamos de campaña hemos tenido un resultado impresionante en redes sociales con muchas visitas y, entre ellas, la gran mayoría ha respondido de forma positiva manifestando su interés en formalizar sus actividades. Ahora, tenemos un imperativo nacional y regional de ver cómo acogemos a esas personas que están hoy en la informalidad y que quieren formalizarse, porque ello tiene muchas ventajas.

- ¿Hay que mejorar los procesos de formalización, hacerlos más expeditos para facilitar ese cambio?

- Yo diría que actualmente son ágiles, son fáciles y pienso que no es complicado. Se puede hacer el inicio de actividades en impuestos internos, empresa en un día, de ahí una renta presunta, una patente municipal. No es difícil formalizarse.

- El tema quizás es que son personas que están acostumbradas a trabajar de esa manera.

- Claro y que tienen temor y desconocimiento sobre las facilidades que hay para hacer esto. La formalización no es tan compleja, pero hay que tener la voluntad de hacerlo. Ahora, también es necesario ir al eslabón siguiente de la cadena. Una cosa es formalizarse, pero lo otro es saber cómo puedo aprovechar las ventajas de la formalización y ser un emprendedor exitoso, porque todo este esfuerzo tiene que estar orientado a que la personas que se formalizan y que inicia actividades le vaya bien.

- ¿Y qué pasa si le va mal?

- De lo contrario, va a quebrar, va a desaparecer o va a volver a la informalidad. Entonces, allí creo que deben hacer un esfuerzo los gremios, los centros de negocios, Corfo, Sercotec y sus instrumentos, etc. Por eso que yo decía que es un tema estructural de país, donde tienen que converger todas las voluntades, ya sea empresariales, gremiales, gubernamentales, regionales, municipales, y con ese esfuerzo mancomunado más el monitoreo a los emprendedores, acompañándolos, ayudándolos con herramientas, facilitando su formalización desde el punto de vista administrativo, orientándole en la gestión de su negocio para que salga adelante.

Mayor penalidad

- ¿No sólo se trata de combatirlo entonces?

- También hay que combatirlo porque hay que dar una señal. Nosotros, como gremio, estamos levantando una iniciativa para penalizar el comercio informal y que no sea simplemente una falta, sino que haya una penalidad mayor y además que se le quite a los alcaldes la facultad de dar permisos para comercializar productos en la vía pública.

- A su juicio, hay un vacío legal allí.

- Hay un vacío legal, le entregan permisos precarios y esa es una realidad. Hay alcaldes que no lo hacen por propia voluntad, por decisión política y hay ciudades en que no hay comercio callejero por esta razón. Esos permisos precarios el problema que tienen es que se perpetúan en el tiempo y se transforman prácticamente en un derecho. Es lo que pasa en las ferias libres donde una buena parte está legalizado, pero muchos se meten a la mala y se transforman en competidores desleales.

- En general, hay una serie de delitos asociados.

- Estos, en su mayoría, son productos que vienen del contrabando, del robo, de la receptación. Y en ese sentido, hay un tema de inteligencia policial también para dar con esas mafias y por eso la mancomunión de las autoridades es clave, al igual que la conciencia de los consumidores en el sentido que no debe comprar en el comercio ilícito porque, además del riesgo que corren, le están haciendo un daño al país y a la sociedad, y por supuesto también al comerciante establecido y a los trabajadores (...) El tema de la plataforma de internet para vender también hay que regularlo, poner impuesto a las transacciones digitales tal como se propone en la reforma tributaria.

"En Valparaíso en particular desgraciadamente el tema es más preocupante que en otras partes del país. Se nota que hay una proliferación de comercio en las calles" "Esos permisos precarios (que entregan los alcaldes) el problema que tienen es que se perpetúan en el tiempo y se transforman prácticamente en un derecho"