Con una mirada de futuro están en marcha estudios para la renovación de dos tradicionales hospitales de Valparaíso. Así, el Consejo Regional (Core) destinó $420 millones para la ejecución de estudios preinversionales en relación a los hospitales Van Buren y Eduardo Pereira.
Para el caso del Van Buren se consideran primariamente alternativas como su ampliación o bien su reubicación en puntos como Placilla o Rodelillo.
Sobre lo que no hay discusión es en cuanto a la necesidad de ampliación de ese centro de alta complejidad médica. En la idea de una expansión se ha anotado un fracaso, ya que no se pudo avanzar en la habilitación de 40 nuevas camas debido al colapso de la empresa ejecutora. Como solución alternativa se está licitando la instalación de 20 camas dedicadas a pacientes críticos, posibilidad que se debe ajustar a las condiciones estructurales del actual edificio.
El consejero regional Manuel Millones, planteando la posibilidad de ampliar el hospital en su actual emplazamiento, aludió al Centro Macrorregional del Cáncer, que será trasladado al hospital Eduardo Pereira, liberándose así espacios que permitirían levantar una torre para expandir el Van Buren en su actual ubicación.
En cuanto al hospital Pereira, antiguo sanatorio originalmente destinado a tratar tuberculosos, a la atención de casos de cáncer sumaría condiciones de "hotelería" para casos de baja complejidad y de recuperación de pacientes intervenidos en el Van Buren. Los estudios en marcha deben terminar entre octubre y noviembre próximos, estima el presidente de la Comisión de Salud del Core, doctor Roberto Burgos. Por su parte, el director del Servicio de Salud Valparaíso San Antonio, Eugenio de la Cerda, aterrizó el tema advirtiendo que una vez finalicen esos estudios y sean aprobados por los ministerios de Salud y Desarrollo Social, viene la etapa de obtención de recursos para entrar en la fase de diseño, que no sería breve debido a la magnitud de los hospitales, indicando que "los plazos que se pudieran estimar para que tuviéramos funcionando estos hospitales debe andar por entre 6 y 8 años".
Plazos demasiado largos ante la expansión de la población y urgentes requerimientos en salud, donde se mantiene una inexcusable deuda histórica con la comunidad.
El Ministerio de Obras Públicas licitaría diseño y ejecución de las obras, aspecto en el que la capacidad técnica y económica de quien se adjudique el trabajo es fundamental para asegurar la continuidad del proyecto en una materia de alto alcance social como es la salud, que no acepta errores ni nuevas postergaciones como ha ocurrido con otros centros asistenciales situaciones que, al final del día, castigan a sectores de menos ingresos de la población.