La irregularidad extrema del campeonato nacional ha configurado un escenario que tiene a Everton en una situación intermedia. Los oro y cielo se encuentran en la decimotercera plaza, a cinco puntos de la zona de descenso, pero también a tan sólo siete unidades del último cupo a una copa internacional.

Por eso, pese a que el equipo entrenado por Gustavo Díaz no gana desde el 10 de agosto, cuando venció por 1-0 a Unión Española en el estadio Sausalito, el plantel auriazul se mantiene firme con el mismo objetivo de comienzos de temporada: clasificar a un certamen continental.

"Everton a mí me desconcierta. Tiene un equipo que es competitivo, lo demostró contra Católica, frente a Colo Colo en el Monumental... pero no sé qué le pasa", sostiene Leonardo Véliz, agregando que "a este equipo hay que tenerle un poquito más de paciencia, y no es porque le tenga mucho afecto a Everton. Reitero, es un equipo que no es fácil de vencer, pero algo le falta".

El exportero y actual comentarista deportivo Waldemar Méndez piensar de manera similar. A su juicio, hay dos maneras de ver el fútbol: una es basada en el resultado y otra en el juego, aspectos que no siempre se logran unir y que hoy tiene a los viñamarinos complicados.

"Everton es un equipo que normalmente tiene una idea de juego internalizada, un criterio de trato al balón de buen gusto, y no siempre los resultados se le muestran tan beneficiosos como lo que expresa en lo futbolístico", afirma el argentino.

De todas formas, cree que el plantel tiene los argumentos como para seguir ilusionándose. "Desde el juego pueden sustentar un poco aquella opinión. Pero claro, hay dos miradas para medir el rendimiento de un equipo y de un técnico, que son los resultados y el fondo futbolístico. Muchas veces lo que sostiene a los técnicos, independiente de los resultados, es el fondo futbolístico, y no me cabe dudas que Díaz está sustentado en su cargo por la idea de juego más que por el resultado en sí", recalca Méndez.

El exmeta de Unión La Calera, tomando distancia de lo emocional, cree que es importante rescatar el fondo y la idea, lo que hay detrás de lo que se ve a simple vista. Sin embargo, entiende el sentir de los fanáticos oro y cielo.

"Es cuestión de tiempo, quienes no somos hinchas tenemos un poquito más de paciencia para poder esperar mejores resultados", añade.

De todas formas, considera que los fantasmas de años anteriores, como el del 2018, donde se peleó hasta el final por evitar el descenso, pesan mucho en este caso.

"Viene con una mochila cargada con lo que ha sufrido con la pérdida de categoría y ese tipo de cosas, hay obviamente una tendencia a mirar más hacia abajo que hacia arriba. Yo imagino que los jugadores estarán más pensando en meterse en una copa internacional que en salvarse del descenso", asegura Méndez, insistiendo en que si en Universidad de Chile cambiaron el "switch" considerando que quedan 30 puntos en disputa, perfectamente Everton también puede seguir firme en sus convicciones.

Para el periodista Leonardo Burgueño el gran objetivo de Everton debiera ser pensar en evitar el descenso, incluso considerando la irregularidad del campeonato, que tiene a Universidad Católica como una notable excepción.

"El principal objetivo de Everton tiene que ser mantener la categoría, porque se empezó a complicar más con los últimos resultados, pero claramente ese debe ser el discurso hacia afuera (el de decir que van por el cupo a la copa internacional). Más allá de que si ganas tres partidos seguidos, como le pasó a O'Higgins, puedes meterte en puestos de avanzada", enfatiza el profesional argentino radicado en Chile.

El comentarista de CDF también cree que pese a mostrar un juego claro, a Everton muchas veces no le han acompañado los resultados.

"Tiene un juego bien definido. Uno sabe a lo que juega Everton. Es un equipo de transiciones rápidas y los entrenadores rivales respetan mucho eso, porque si se descuidan, los puede sorprender", reconoce Burgueño, añadiendo que "para mí es el equipo que mejor maneja las transiciones ofensivas, lo que antiguamente se llamaba contragolpe. Con Juan Cuevas en la cancha es el que mejor manejaba esa faceta del juego".

Pero el periodista oriundo de Pergamino pone la voz de alerta ante el corto plantel viñamarino, que recientemente sumó la baja sensible de Juan Cuevas, además de la de Álvaro Madrid y Benjamín Rivera, algo que a su juicio puede provocar que el equipo tenga que readaptar su fisonomía de juego.

"El plantel corto al final te marca. Los equipos que sostienen una cierta campaña es porque tienen una posibilidad de recambio como para poder pelear", señala Burgueño.

Y Leonardo Véliz suma otros aspectos que complican a los oro y cielo, además de su baja capacidad goleadora.

"Están en una posición incómoda, y eso hace que el nivel de juego se resienta en el ánimo y autoestima de los jugadores. No es lo que ellos prometieron en acciones, no solamente de palabra", cierra el "Pollo".

"A este equipo hay que tenerle un poquito más de paciencia. No es fácil de vencer, pero algo le falta"

Leonardo Véliz, Exdelantero evertoniano

"No siempre los resultados se le muestran tan beneficiosos como lo que expresa en lo futbolístico"

Waldemar Méndez, Comentarista de Fox Sports

"El principal objetivo tiene que ser mantener la categoría, porque se empezó a complicar"

Leonardo Burgueño, Comentarista de CDF