El Primer Ministro británico, el conservador Boris Johnson, sufrió dos nuevas derrotas en la Cámara de los Comunes, que dio luz verde a una ley para bloquear un Brexit sin acuerdo y rehusó por ahora convocar unas elecciones el 15 de octubre, como quería el jefe de Gobierno.
La legislación para forzar a Johnson a solicitar una nueva prórroga a la salida de la Unión Europea debe pasar todavía por la Cámara de los Lores, donde la oposición teme que los conservadores busquen demorar el debate.
Si la tramitación queda obstaculizada, el Parlamento podría no llegar a tiempo para que la reina Isabel II otorgue su asentimiento oficial antes de que las cámaras queden clausuradas a mediados de la próxima semana, tal como ordenó el Primer Ministro. Decisión que ayer el Alto Tribunal de Edimburgo, la máxima instancia judicial-civil de Escocia, dictaminó que es legal.
Ante esa posibilidad, el líder del Partido Laborista, Jeremy Corbyn, afirmó que no aceptará unos comicios al menos hasta que la ley haya superado todos los trámites parlamentarios.
Al tratarse de unas elecciones anticipadas, el Primer Ministro necesitaba el respaldo de dos tercios de los diputados para sacar adelante la convocatoria, pero sólo recibió 298 de los 434 votos necesarios.
Temores
Entre los críticos con el mandatario conservador no sólo hay dudas sobre la posibilidad de que los Lores obstaculicen la ley. Algunos temen que el Gobierno intente retrasar las elecciones, una vez aprobadas, más allá del 31 de octubre, la fecha prevista para que el Reino Unido abandone la UE. Con esa estrategia, Johnson evitaría el escrutinio del Poder Legislativo hasta después de haber materializado el Brexit.
También han surgido conjeturas sobre la posibilidad de que Johnson busque una estrategia para evitar pedir una prórroga a Bruselas, aunque estuviera obligado legalmente.
Ante esas opciones, algunos laboristas expresaron que preferirían mantener el bloqueo a unas elecciones al menos hasta el 19 de octubre, cuando la ley instará al Primer Ministro a remitir una carta pidiendo más tiempo para negociar un acuerdo de salida, en caso de no haber ratificado uno para entonces.
Johnson se quedó esta semana sin mayoría parlamentaria en los Comunes, por lo que difícilmente podrá aprobar propuesta alguna sin haber pasado antes por las urnas.