Pamela Boltei

A 13 años de comprarla y luego de vivir en ella un periodo largo, Óscar Cuevas Rivadeneira puso en arriendo la tradicional Casa Losada de Viña del Mar, por un valor 800 Unidades de Fomento (UF) mensuales, equivalentes a $ 22 millones.

La casona, ubicada en la esquina de avenida Libertad con 8 Norte, fue construida en 1929 con un estilo español y perteneció desde 1948 y hasta 2006 a la conocida familia viñamarina Losada. Uno de sus miembros, Manuel Losada, fue condenado por la denominada "Operación Océano".

La propiedad es una de las más antiguas de la comuna y antes de ser vendida al actual dueño fue cotizada por Senexco -sociedad ligada al empresario Abraham Senerman- para la construcción de un edificio.

Cuevas decidió ponerla en arriendo en julio de este año. "Hace un mes me llamaron de la Corporación Municipal por más antecedentes de la casa y también de la Corporación Cultural del municipio. También me han llamado todos los corredores de Viña, he recibido más de 200 llamados y hasta ahora existe un real interés de un banco que se podría concretar en las próximas semanas", contó.

Óscar Cuevas Rivadeneira espera que el contrato dure, al menos, 10 años. "La condición es que sea una empresa sólida, no está considerada para emprendimientos particulares, se descarta toda posibilidad de hoteles, residenciales, casas de ancianos. Esto es para empresas sólidas, instituciones. La casa está en perfecto estado, no hay que hacer reparaciones", expuso.

Además, aseguró que no irá más allá del arriendo. "Me he negado en estos 13 años a vender la propiedad, antes y después de ser declarada Inmueble de Conservación Histórica (ICH). No existe ningún interés en vender".

Tal como menciona el propietario, la Casa Losada es la única del sector de la Población Vergara catalogada como ICH, denominación otorgada por el Concejo Municipal y la alcaldesa Virginia Reginato en 2016 a través de la aprobación del seccional que buscaba ordenar el lugar.

Patricia Contreras, coordinadora de la Unidad de Patrimonio de la Municipalidad de Viña del Mar, explica que la denominación obliga al dueño a "informar a quien corresponda las modificaciones en la parte estructural, no es más que eso", y comenta que "si el propietario quiere arrendarla, está en todo su derecho y el municipio en ese aspecto está con las manos atadas".

Jaime Varas, concejal UDI, puntualiza que "es una buena noticia que se encuentre en arriendo y ojalá sea una institución importante la que se instale ahí, ya sea banco u otro tipo de instituciones, que más allá del giro comercial que puedan tener, lo más importante es que se conserve ese inmueble y se genere todo un entorno, porque pude apreciar desde la calle sus jardines, y creo que puede formar parte del quehacer de avenida Libertad".

Marcela Varas (PPD), presidenta de la Comisión de Cultura del Concejo, precisa: "Entiendo que el hecho de que haya sido declarada como Inmueble de Conservación Histórica no implica un congelamiento de la propiedad, es por eso que espero que cualquier restauración, remodelación o ampliación se realice bajo los parámetros que se exigen".

"Se descarta toda posibilidad de hoteles, residenciales, casas de ancianos, esto es para empresas sólidas, instituciones"

Óscar Cuevas Rivadeneira, Propietario