Luego que la Contraloría Regional detectara que en Valparaíso existe un superávit de 184 patentes de alcohol, incumpliendo así la actual normativa que establece un máximo de un permiso por cada 600 habitantes, el presidente de la Asociación de Locatarios Nocturnos de la comuna, Víctor Ramírez, se mostró a favor de que la administración local persista en un plan para reducir dichas autorizaciones, aunque a su juicio debe ser bajo ciertos criterios y no de manera aleatoria.

"Hemos dicho que todas las patentes que sean de botillerías, salones de baile, discotecas o cabaret tienen que ser restringidas. Las personas que tienen ya no pueden insistir más al municipio y si después no quieren seguir funcionando, simplemente se pierde la patente", comentó a este Diario el dirigente gremial.

En ese sentido, Ramírez rechazó que, por ejemplo, se prohíba una patente a locales como restaurantes, en especial si corresponde a alguna cadena que ya esté establecida.

"A un restaurat no le puedes restringir un permiso. Qué pasaría si un local de renombre se quiere instalar en el cerro Concepción, ninguna persona va a querer ir a almorzar sin poder tomar algo, y con eso se perdería la inversión",dijo.

Además, se mostró a favor de que se permitan los traspaso de patente. "Si tengo un local nocturno que siempre ha funcionado en regla pero lo quiero vender, tengo todo el derecho a hacerlo porque es mi inversión", dijo Ramírez.