La última estadística entregada por el ministro de Salud, Jaime Mañalich, sobre los accidentes de tránsito ocurridos en Fiestas Patrias a nivel nacional ha vuelto a marcar una tendencia en la disminución de fallecidos. Aunque siempre resulta complejo hablar de "positivo" cuando de todas formas hay un número significativo de personas muertas de por medio, las cifras se suman a las estadísticas entregadas por Carabineros que marcan una reducción de los accidentes de tránsito.
Aunque todavía no se puede hablar de cifras globales sobre las Fiestas Patrias, las estadísticas regionales, no obstante, indican un aumento significativo de los accidentes ocurridos por manejo distraído, en otras palabras, conductores que chocan por estar más preocupados del celular que del manejo.
La realidad evidencia que las comunicaciones han cambiado dramáticamente durante los últimos años y el uso de WhatsApp ha monopolizado las comunicaciones, desplazando los llamados telefónicos a un segundo plano.
Lamentablemente, esto ocurre justo cuando ya se había desarrollado la tecnología para evitar que los conductores manejaran con un teléfono en la mano gracias a la incorporación de sistemas bluetooth en los automóviles.
Hoy en día, y pese a que se han hecho muy buenas campañas publicitarias a nivel internacional respecto a los riesgos que significa manejar y perder la concentración un par de segundos mirando un mensaje en el teléfono, todavía no es suficiente como para crear una conciencia real.
Asimismo, el anuncio de las penas del infierno para los conductores que manejen distraídos al teléfono tampoco pareciera ser una solución que evite erradicar este pésimo hábito, más aún cuando existen aplicaciones como Waze, que además de facilitar la vida de los conductores, permiten una mejor distribución del tránsito en las ciudades.
Tal como ocurrió con la tecnología bluetooth, da la sensación de que lo único que puede salvar esta pésima práctica que posee la mayoría de los conductores de girar la vista hacia los teléfonos cada vez que reciben un mensaje mientras manejan, sea la misma tecnología, ya sea bloqueando los celulares mientras se está en movimiento o, bien, desarrollando o masificando sistemas de lectura de mensajes para los conductores.
Mientras esto no suceda, lo único queda es el autocuidado, ser conscientes de los peligros que implica, que cada uno sea responsable en el manejo y, en forma paralela, la fiscalización de parte de Carabineros como un disuasivo a esta peligrosa práctica de quienes están al volante.