Pese a que en su regreso a Everton él mismo descartó ser una suerte de salvador, esa es justamente la imagen que muchos hinchas oro y cielo tienen de Javier Torrente.

El recuerdo del turbulento 2018 todavía está fresco en la retina de los fanáticos viñamarinos: el rosarino tomó al equipo prácticamente descendido a Primera B y en una segunda rueda de infarto lo hizo resurgir para cuajar un rendimiento que llevó al cuadro auriazul no sólo a evitar la catástrofe, sino que también a ser uno de los cinco mejores de esa segunda parte de la temporada.

Por eso el afecto que día a día le transmiten los hinchas en la Ciudad Jardín, algo que él intentará devolver consumando la misma tarea del año pasado.

"En todos lados la gente que me saluda me transmite su cariño y su alegría de que esté de regreso. Quiero devolverles a ellos todo ese cariño y esos buenos augurios que me dan tratando de conseguir rápidamente puntos que nos alejen de la zona difícil y nos hagan pensar en otra cosa", confesó el entrenador argentino.

Ahora bien, hoy, con Everton en el duodécimo puesto del campeonato nacional con 25 puntos (quedan 24 en disputa), a cuatro unidades de la zona de descenso integrada por Universidad de Chile (21) y Universidad de Concepción (19), ¿qué distancia hace falta recorrer para asegurar la anhelada salvación? El propio Torrente ya hizo su cómputo.

"Por algunos cálculos que hicieron, me decían que con 32 o 33. Yo quiero 34 puntos para arriba para pensarme ya tranquilo, y de ahí en más todo lo que podamos conseguir, que nos arrime para pelear por otros objetivos, bienvenido", detalló el DT oro y cielo, cuyo objetivo está a 9 unidades.

En ese escenario, más allá de que cada partido entregue un máximo de tres puntos, los próximos tres encuentros del campeonato nacional, ante Iquique, Curicó Unido y Universidad de Chile, irán encaminando la lucha en la zona roja. "Trataremos de dar nuestro mejor esfuerzo para sacar ventaja y siempre pensando en los tres puntos", dijo Torrente, agregando que "sería muy lindo ganar ese partido".

Iquique, segunda parada

El domingo a las 12:30 horas en el estadio Cavancha, Javier Torrente comandará su segundo partido tras su regreso a Everton. El año pasado, su equipo rescató un empate 1-1 en ese mismo reducto, pero esta vez son los nortinos los que se encuentran más complicados al estar dos puntos debajo de los oro y cielo. Es más, los dirigidos por Jaime Vera vienen de ser goleados por 4-0 en Santa Laura.

"Iquique viene de sufrir un duro golpe contra Unión Española. Nosotros tenemos que tratar de capitalizar este partido que nos tocó ganar, afrontar ese encuentro con serenidad y tranquilidad, y poder lograr hacer un partido similar al que pudimos hacer con U. de Concepción, donde en todas las líneas, en la cantidad de remates al arco y llegadas, en la recuperación y posesión en campo rival, en todo eso fuimos amplios dominadores. Hacer un partido similar contra Iquique nos acerca a la posibilidad de ganar", anticipó el adiestrador evertoniano, con la idea también de jugar y manejar la ansiedad que seguramente tendrán los nortinos ante la necesidad de ganar en su casa.

"Es una cancha que tiene sus dificultades en el terreno, pero tenemos que intentar hacer el juego que le conviene hacer al equipo, sacar provecho de que ellos están buscando respirar y nosotros tenemos que saber utilizar eso a nuestro favor y lograr traernos algo desde allá", agregó Torrente.

Persiguen las lesiones

Para el partido contra Deportes Iquique, Javier Torrente seguirá lidiando con las bajas. A las sabidas ausencias de Juan Cuevas, Benjamín Rivera y Gonzalo Freitas se sumó Álvaro Ramos por un esguince de tobillo sufrido ante el Campanil.

Tampoco estarán Camilo Rodríguez, quien se resintió de una molestia muscular el pasado viernes, cuando apenas jugó algunos minutos por lo mismo, y Marcos Velásquez, quien todavía no se encuentra en óptimas condiciones por la fractura sufrida en el dedo pulgar de una mano.

¿Una buena para Torrente? El argentino podrá contar con Maximiliano Cerato, ya recuperado de un desgarro en el isquiotibial.

El rosarino opta por mirar el lado positivo. "A pesar de las dificultades vamos con un equipo competitivo", avisó el DT, apuntando a lograr pronto su objetivo de 34 puntos.

"La gente me transmite su cariño y su alegría de que esté de regreso. Quiero devolverles a ellos todo ese cariño tratando de conseguir rápidamente puntos que nos alejen de la zona difícil"

Javier Torrente, DT oro y cielo

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