Investigadoras UV buscan certificar la medicina ancestral de Rapa Nui
INNOVACIÓN. Proyecto Etnofarmacia analiza en laboratorio el poder curativo de plantas endémicas de la isla.
Cuenta un antiguo relato rapanui que cuando los niños se enfermaban, eran sanados con la planta Matua pua'a, un helecho silvestre que crece en el cráter del volcán Rano Kau. Pero su recolección no era sencilla: quienes iban a buscarlo debían pasar un tiempo previo en estado de pureza absoluta, sin beber alcohol, sin tener sexo, sin decir improperios, e incluso sin tener rencillas. Solo de esa forma, la planta podría entregar su propiedad curativa. En la actualidad, su extracto se sigue fabricando de forma casera, pero no se puede vender, porque según la creencia isleña, también pierde su esencia.
Tal como el Matua pua'a, hay muchas otras plantas a las que se le atribuyen poderes curativos en la isla, tales como tratamiento del cáncer, la regeneración cutánea, el fortalecimiento del sistema inmune y hasta la fertilidad, las cuales están siendo analizadas por un grupo de investigadoras de la Universidad de Valparaíso como parte del proyecto Etnofarmacia Rapa Nui. Ellas fabricarán extractos en la Farmacopea, para luego analizarlos en el laboratorio de Innovación Terapéutica y Diagnóstico Molecular.
El proyecto cuenta con la participación y apoyo de instituciones isleñas entre las que se cuentan la Gobernación, el Liceo Aldea Educativa, el hospital Hanga Roa, emprendedoras jóvenes y el grupo de mujeres sanadoras Papa Ra'au, poseedoras del conocimiento ancestral de las propiedades curativas de las plantas.
La iniciativa, que cuenta con financiamiento FIC-R, es integrada por académicos de las facultades de Farmacia, Medicina y Arquitectura de la UV, quienes hace un par de semanas estuvieron en la isla realizando una serie de talleres para la comunidad isleña. El proyecto instalará además dos contenedores en el hospital Hanga Roa, uno para masoterapia y otro como laboratorio de producción.
De este último viaje se trajeron diversas especies, en colaboración con agrupaciones locales de la isla y con la debida autorización del SAG, entre las que se cuentan hojas de papaya, piñas, las flores y tallos del Miri vahi, el tubérculo Uhi, el rizoma del Matua pua'a, el piri piri, la pua y los frutos congelados del poporo, entre otros.
Cecilia Rubio, académica de Farmacia y directora del proyecto, explica que se "fabricarán los extractos, realizando una determinación botánica de las plantas y una genotipificación. En la parte química se va a determinar qué compuestos tienen y cuáles son los principios activos de las plantas, para probar su actividad biológica en cultivos de células cancerosas, como cáncer de mamas o capacidad antioxidante".
En tanto, Marcela Escobar, investigadora del proyecto, señala que esperan "validar algunas propiedades que se le atribuyen a estos productos y conocer cuáles serían los compuestos químicos que serían responsables de sus cualidades medicinales". Mientras que Caroline Weinstein, también investigadora del proyecto, añade que buscará "evaluar la actividad proliferativa sobre líneas celulares cancerosas y un segundo análisis para evaluar fines de regeneración cutánea".
Las voces de la isla
Pamela Huke, presidenta de las mujeres sanadoras Papa Ra'au, señala que "si bien tenemos conocimiento transmitido oralmente y llevamos años de práctica, la Universidad de Valparaíso nos da la parte teórica desde lo científico occidental. Somos originarios polinésicos y nuestro conocimiento no está reconocido dentro de la salud, pero con este proyecto hay un respaldo, más adelante nuestros hijos y nietos tendrán esta parte avanzada. Creemos que será positivo para el pueblo Rapa Nui".
En tanto, Juan Pakomio, director del Hospital Hanga Roa y titulado de Obstetricia y Puericultura en la UV, señaló que "el apoyo de una universidad prestigiosa, de la cual me siento orgulloso de ser exalumno, busca poner en práctica conocimientos científicos que hoy estamos haciendo por transmisión de la experiencia ancestral, pero le estamos dando valor a través de un soporte científico que es potente".
Similar opinión expresó Katherine Ringeling, directora del Liceo Aldea Educativa, para quien "el conocimiento ancestral sobre las plantas medicinales se ha transmitido desde siempre a nuestros alumnos, pero nos faltaba la parte científica. Con este proyecto podemos verificar que toda la información cultural que tenemos sea realmente científica y patentar las plantas que son propias de las isla".
Transmisión generacional
Tarita Alarcón Rapu, gobernadora de Rapa Nui, destacó la iniciativa ya que según su visión "tiene un impacto educativo, porque el proyecto está instalado en el Liceo Aldea Educativa, buscando una transmisión generacional; tiene un impacto con las mujeres emprendedoras, que son de un rango etáreo entre 20 y 30 años, quienes son las nuevas mamás de Rapa Nui y que serán las encargadas de llevar adelante diversas iniciativas y, finalmente, certificará de manera científica el trabajo ancestral que han realizado desde siempre las mujeres sanadoras del grupo Papa Ra'au".