Juan Carlos Soto jugó apenas 45 minutos en el primer semestre en Santiago Wanderers (ante San Luis en Quillota) y cada vez que Miguel Ramírez mencionaba su nombre, era como parte de la lista de lesionados.
Sin embargo, el nacido en Papudo se repuso y hoy es uno de los fijos en el sistema de tres defensas -junto a Ezequiel Luna y Luis García- que utiliza el Decano en la recta final del torneo de Primera B.
Para Soto fueron tiempos difíciles. "Estuve muy mal", reconoce, recordando que en años anteriores las lesiones musculares también le habían impedido tener regularidad.
"Ya me había pasado en años anteriores, la verdad es que en un momento llegué a pensar en tirar la toalla", asume, aunque de inmediato agradece que en ese instante estuvo acompañado del cuerpo técnico liderado por Miguel Ramírez, del psicólogo Enrique Aguayo, del kinesiólogo Mauricio Martínez, compañeros y de la familia: "Son momentos súper complejos, uno quiere dejar todo, pero hay un segundo en que uno piensa más fríamente y también recuerda lo que pasé para estar en Mantagua, a tantos amigos y el esfuerzo personal y familiar para cumplir el sueño de estar en Santiago Wanderers".
"Después de todo lo que pasé en el primer semestre no me esperaba ser titular de cara a la recta final del torneo, pero el fútbol es así, es parte del trabajo", sostiene, insistiendo en su agradecimiento hacia la confianza que en su momento tuvieron el técnico y sus compañeros: "Uno siempre tiene ganas y aportar aunque sea con un grano de trabajo, después los 'profes' me dieron su confianza, al igual que todos en el vestuario, especialmente aquellos que también en su momento estuvieron lesionados y se recuperaban junto a mí".
Respecto de la experiencia vivida luego de haber sufrido tres desgarros y un esguince de tobillo en los primeros seis meses de la presente campaña, algunos por haber buscado un retorno anticipado a las canchas, Soto es categórico al afirmar que "son cosas que van a pasar por la ansiedad y el deseo de aportar, son cosas que uno hace de manera inconsciente, pero obvio que hoy con más experiencia espero que sean situaciones que no se vuelvan a repetir".
Ormeño y cobreloa
Sobre los elogios de Jorge Ormeño en estas mismas páginas, quien lo comparó en términos de despliegue físico y futbolístico con Agustín Parra, el zaguero de los verdes asume que "jugar de central o de stopper me acomoda, lo que es la marca y después dársela a un verde, que es lo que nos pide el cuerpo técnico".
Sobre el partido del domingo ante Cobreloa en Playa Ancha, duelo que seguramente estará marcado por una enorme cantidad de espectadores en las tribunas del estadio Elías Figueroa, Juan Soto sostiene que "siempre existirá una presión, pero es el momento de disfrutar el apoyo de la gente, ya estamos bastante grandes como para poder jugar con eso, debemos ser lo suficientemente responsables como para convivir con una condición que sabemos existe desde el primer día en Wanderers, un club popular y que tiene a todo Valparaíso respaldándolo".
Finalmente, y de cara a la recta final del certamen, el zaguero también se refirió a la posibilidad de lograr el anhelado ascenso: "Lo conversamos, está el trabajo de la semana y saber que hoy el foco es Cobreloa, pero sabiendo que de seguir así los resultados se nos tienen que dar sí o sí".
"Después de todo lo que pasé en el primer semestre no me esperaba ser titular de cara a la recta final del torneo, pero el fútbol es así, es parte del trabajo"
Juan Carlos Soto, Defensa de Santiago Wanderers
Ramírez llena de elogios al papudino
Miguel Ramírez reconoce sentir una satisfacción muy especial por el presente que Juan Carlos Soto se encuentra viviendo como titular en Santiago Wanderers, admitiendo que en su momento el cuerpo técnico debió conversar con el jugador durante el primer semestre de este año. "Todos hablamos, especialmente quienes hemos tenido la experiencia de lesiones, muchas veces uno pasa por esta situación y esa 'nube negra' que se instala y que no te deja trabajar, pero deja de llover y ese es el momento para seguir potenciándote y no tirar la toalla. Afortunadamente nos escuchó, porque es un pedazo de jugador", reconoce el entrenador del Decano, añadiendo que "su calidad techo no tiene y lo que hoy está haciendo pasa porque su cabeza está muy fuerte, junto a (Luis) García es un perro de presa en nuestra defensa".
45 minutos jugó Juan Carlos Soto en el primer semestre con la camiseta de Wanderers: Fueron ante San Luis en Quillota.