Cristián Rodríguez F.

Un momento de bastante tensión fue el que se vivió la tarde del jueves al interior del Consejo Regional (Core) de Valparaíso -según relataron algunos de sus integrantes-, luego que un grupo de consejeros solicitara conformar una comisión fiscalizadora para investigar el estado de avance en los procesos de construcción de los hospitales Gustavo Fricke (Viña del Mar), Carlos Vicuña (San Antonio) y el de Marga Marga, en Villa Alemana.

La sorpresa, sin embargo, no vino solamente por incluir en la indagación a dos proyectos en los cuales el Core no ha destinado recursos (sólo aportaron al de San Antonio), sino porque desde hace algunos meses que se venía rumoreando sobre una serie de problemas que existirían en dichos recintos -en especial en el de la zona interior-, y que por primera vez se hicieron públicos durante el último pleno.

En esa línea, el primero en exponer la situación fue justamente el consejero por la Provincia de Marga Marga, Percy Marín (RN), quien denunció que la construcción del anhelado hospital aún no comenzaba a raíz de un sobreprecio en el proyecto que habría sido detectado por la empresa adjudicataria -Acciona- y que ascendería a los $12 mil millones.

Cabe recordar que a mediados de mayo, la propia compañía inició los primeros movimientos de tierra y el Servicio de Salud Viña del Mar-Quillota (SSVQ) anunció que en junio, una vez concluida la quinta y última etapa del diseño, partiría la construcción (ver recuadro). Pese a ello, el consejero aseguró que hasta ayer "ni siquiera la empresa ha instalado faenas", lo que es posible apreciar al recorrer el sector.

Rebajarían costos

En lo concreto, Marín explicó que desde hace un tiempo hasta ahora que el proyecto "entró en una fase de incertidumbre dado que están pidiendo $12 mil millones adicionales para construir un hospital que ellos mismos diseñaron en base al presupuesto con el que ganaron (casi $102 mil millones)", recordando que la licitación fue precisamente para diseñar y construir el recinto.

El problema, agregó el core, es que ante el impedimento y también la negativa que tendería el Ministerio de Salud para aumentar la inversión, la firma estaría pensando incluso en modificar parte de la obra.

"Sabemos que están proponiendo rebajar algunas partidas, por ejemplo, cambiando las cañerías de cobre por unas de PVC, eliminando un centro para el dolor y dejando algunas partes sin aire acondicionado ni agua caliente, lo que es inaceptable porque la comunidad está pidiendo un hospital de alto estándar", advirtió.

Pero además de ello, el expresidente del órgano también denunció un fuerte lobby en favor de la empresa por parte de personas ligadas a la política en la zona, lo que fue ratificado por el core Roy Crichton (DC).

"Nos han llegado denuncias de que ha existido un fuerte lobby de la compañía para rebajar partidas y queremos saber quiénes están detrás de esta presión que están haciendo, porque entiendo que hay figuras políticas y sociales involucradas en esto", cuestionó el consejero, agregando que la misma fiscalización, aprobada por unanimidad, "arrojará quiénes son los involucrados".

Presiones "políticas"

Respecto a ese punto, el 13 de junio de este año un grupo de representantes de Acciona se reunió con el intendente de Valparaíso, Jorge Martínez, para justamente conversar sobre el futuro hospital. En la audiencia, según los registros de la plataforma de la Ley del Lobby, también participó la gobernadora de Marga Marga, Carolina Corti; el seremi de Salud, Francisco Álvarez; el presidente del Core, Juan Arriagada, y el consejero Marín.

Este Diario contactó al intendente para conocer su opinión al respecto, lo que hasta el cierre de esta edición no fue posible. Sin embargo, el propio Marín aseguró que el jefe regional "fue enfático en señalar que no iban a autorizar la rebaja de algunas partidas".

"La idea del Gobierno es clara: que cumplan con lo que la empresa prometió al momento de postular a la licitación", insistió el core, quien agregó que una de las dificultades de autorizar un proyecto distinto al del contrato "es que el día de mañana podría implicar un juicio de cuentas por parte de la Contraloría".

El core Manuel Millones (UDI) también coincidió respecto a la posición del Gore, asegurando que "el SSVQ ha tomado todos los resguardos para asegurar el patrimonio fiscal y que la obra comience de acuerdo al cronograma".

En caso de no alcanzarse un acuerdo, una de las opciones que ha trascendido es que incluso la compañía podría retirarse del proyecto, puesto que la boleta de garantía bordearía los $7 mil millones; $5 mil millones menos que los costos que deberían "asumir" para llevar adelante la obra.

"Es evidente que hay un riesgo en que la empresa no entregue el diseño y abandone el proyecto. Por lo mismo, hay que tomar todos los resguardos que eviten que entregado el anticipo económico -que es de $17 mil millones- la empresa deje botadas las obra", advirtió el consejero Millones.

En tanto, Marín sostuvo que la eventual salida de la compañía "es una preocupación latente" y coincidió con Crichton al señalar que "la fiscalización nos permitirá conocer los nombres de las personas ligadas a la política que llegan como si nada con el staff de abogados de la empresa".

Tras ser consultados por este Diario, durante la tarde de ayer el SSVQ señaló a través de un comunicado que, pese a no haber tomado conocimiento de la comisión fiscalizadora, "aportaremos todos los antecedentes que sean necesarios al Gore como siempre ha sido la impronta de esta institución".

Aclararon que la empresa se encuentra elaborando la última etapa del diseño, en la cual "se pueden producir las adecuaciones y mejoras necesarias al proyecto bajo el marco regulatorio vigente", agregando que los procesos siempre estarán "apegados a la legalidad vigente y al resguardo de los recursos públicos".

Viña y san antonio

Además del hospital de Marga Marga, la fiscalización también abarcará los proyectos de Viña del Mar y de San Antonio. Este último, a raíz de "distintas denuncias de gremios y personas ligadas al área que nos han dicho que hay una serie de demoras y problemas de infraestructura", indicó Crichton.

"Por ejemplo, en San Antonio las personas no pueden tener acceso a una endoscopía porque el instrumento no se ha podido instalar ya que no se ha comprado una lavadora, lo que fue señalado por el propio director del Servicio Salud Valparaíso-San Antonio. Entonces, no es posible que por esa razón las personas no puedan acudir en forma regular", cuestionó.

En tanto, la core Nataly Campusano (FA) confirmó que el objetivo de la instancia es "solicitar a cada uno de estos hospitales los estados de avance y ejecución, dado que nos hemos enterado de que hay un sinnúmero de problemas en distintas áreas y no queremos que se repitan retrasos como el del Gustavo Fricke".

"En Marga Marga están proponiendo cambiar las cañerías de cobre por unas de PVC, eliminar un centro para el dolor y dejar partes sin aire acondicionado ni agua caliente, lo que no es prudente"

Percy Marín (RN), Core por Marga Marga