Pamela Boltei

La Municipalidad de Viña del Mar aclaró que la actividad que la concejala Laura Giannici (DC) pidió investigar por el pago de $5.500.000 ante la Dirección de Control Interno de la casa consistorial, bajo la sospecha de que se trataría de una reunión de la agrupación "Ciudad de Dios", se trató de un evento para presentar fondos concursables a la comunidad.

La concejala pidió al departamento municipal este lunes que se audite "la orden de compra 2424-1172- CM 19 de fecha 24 de julio del presente año por un costo de $5.500.000 que es coincidente con una serie de actividades que habría realizado en Viña del Mar el conferencista cristiano Marcos Brunet en conjunto con el gabinete de la alcaldesa".

Además, solicitó investigar todos los gastos que el municipio haya realizado este año en arriendo de salones, almuerzos, desayunos y cenas en el hotel O'Higgins y revisar las órdenes de atención y servicio que la casa consistorial ha solicitado a los hoteles Sheraton Miramar y Del Mar (Casino municipal) durante este año.

Al respecto, el administrador municipal, Claudio Boisier, explicó que "efectivamente el día 24 de julio del 2019 se generó una factura con orden de compra 2424-1172-CM19 que corresponde a la actividad informativa de "Lanzamiento de Fondos Concursables 2019" y que se enmarca dentro de las funciones municipales. Dicha actividad se realizó en los salones del Hotel O'Higgins y fueron invitados todas las organizaciones territoriales y sociales de Viña del Mar y a la que, además, asistieron los concejales Macarena Urenda, Carlos Williams, Sandro Puebla y Laura Giannici".

Organización paralela

Al respecto, la concejala Giannici dijo que "se habla de la orden de compra, pero se pide revisar todas las actividades realizadas en hotel O'Higgins del municipio y del altar "Ciudad de Dios" para saber su financiamiento. De todas formas, $ 5.500.000 por una actividad de una hora es mucho. El tema no sólo es la plata, si lo reducimos solo a eso no tiene mucho sentido".

Pero además, añadió, "nuestro interés es que se conozca que al interior del municipio existe una organización paralela que funciona desde el círculo más cercano a la alcaldía por afinidad religiosa, algo que en un Estado laico no puede ocurrir".

Provistos de lienzos y bombos, los funcionarios del Servicio de Vivienda y Urbanización (Serviu) de Valparaíso iniciaron un paro indefinido debido a los nulos resultados obtenidos en una mesa de negociación que busca mejorar las actuales condiciones laborales de dichos trabajadores.

Así lo precisó Johanna Lagos, presidenta de la asociación de funcionarios del Serviu de Valparaíso, quien declaró que "nos cansamos de seguir dialogando con las autoridades, pues lo único que hacen es entregar información errónea sobre las deficiencias que tenemos como ministerio, pues hoy no tenemos una estabilidad laboral".

Ante esto, Tomás Ochoa, director del Serviu, precisó que "podemos entender que existan inquietudes, pero no compartimos la paralización, particularmente porque hoy (ayer) se iniciaba el proceso de postulación al subsidio de arriendo de la clase media, y por lo mismo, como servicio tomamos todas las medidas de contingencia y hemos podido atender de manera normal".