Transporte opera en un 80% y estiman que normalización del Metro será lenta
REGIÓN. Últimas micros parten tres horas antes del toque de queda y no transitan entre comunas.
El centro de Valparaíso completamente desolado a plena luz del día, con delincuentes a pie y también en auto intentando saquear de manera indiscriminada cualquier local comercial, ha sido una imagen que ha marcado la mayoría de las jornadas de esta semana, contrastado con las multitudinarias marchas pacíficas por las calles de Viña del Mar que, de igual forma, han terminado con algunos enfrentamientos con las fuerzas policiales.
Pero dentro de todas las diferencias que existieron, siempre hubo una similitud entre ambas comunas a eso de las cuatro de la tarde: ninguna micro ni colectivo circulaba por las calles a esa hora, lo que se repitió a lo largo del Gran Valparaíso.
Lo mismo ocurrió con Metro de Valparaíso, que debió suspender su servicio el domingo pasado a raíz de los graves daños que sufrieron las estaciones Bellavista, Quilpué y Miramar, manteniendo desde el lunes hasta la fecha una operación acotada, producto del toque de queda.
Y si bien ayer reabrió la estación viñamarina, el seremi de Transportes de Valparaíso, José Emilio Guzmán, explicó a este Diario que el proceso de normalización de las otras dos paradas será más lento de lo normal, considerando que la de Valparaíso fue incendiada por completo y la de Quilpué sufrió serios daños en sus boleterías y torniquetes.
Más de dos semanas
"En la estación Bellavista hay que hacer instalaciones nuevas porque se quemó completamente. Esa estación tiene para largo aliento y creo que será un poco más (de dos semanas) porque hay que reconstruir todo", explicó la autoridad.
En esa línea, el seremi agregó que aún no está dimensionado el daño completo que sufrió la red ni cuál es la inversión que deberá realizar la compañía. De todas formas, agregó que durante las primeras horas de iniciada las protestas "lo importante era que el Metro continuara operando independiente de las complicaciones en estas dos estaciones, que en el caso de Bellavista se suple con la de Francia y Puerto".
Cabe recordar que desde inicios de semana que el servicio ha funcionado en ambos sentidos, aunque sin detenerse en esas dos paradas. Ayer, la operación comenzó a las 7 horas, en tanto que el último tren con dirección a Valparaíso partió a las 18.54, mientras que hacia Limache lo hizo a las 20 horas.
Respecto al sistema Bus+Metro, la última salida desde La Calera fue a las 17.40 horas y desde Quillota a las 18.10 horas.
Este Diario solicitó a Metro Valparaíso un estimativo del tiempo que tardaría la reparación de las estaciones y en cuánto fueron avaluados los daños. Sin embargo, hasta el cierre de esta edición no atendieron los requerimientos, esgrimiendo estar concentrados en la normalización de la red.
Operación al 80%
En el caso de los buses, el seremi confirmó que desde que se decretó zona de emergencia -la noche del sábado- la locomoción pública comenzó a operar en un 80% en las mañanas y en un 70% durante las tardes.
El problema, sin embargo, es que producto del toque de queda - que el lunes partió a las 20 horas, pero el martes y miércoles se adelantó a las 18 horas - debieron suspender los servicios con mayor anticipación. "En los trayectos más largos, la última salida de la garita es tres horas antes del toque de queda, y en los servicios más cortos es de dos horas para que los conductores puedan terminar el recorrido y regresar a sus casas", explicó el seremi.
Otra complicación que han sumado es la interrupción de algunas arterias producto de las grandes movilizaciones.
"Cuando se producen las marchas decidimos que se realicen sólo trayectos locales y que las micros no tengan que transitar entre comunas. Eso quiere decir que no hay servicios entre Valparaíso y Viña del Mar, o desde Villa Alemana hacia Quilpué, por ejemplo", agregó Guzmán, quien para esos efectos justamente llamó a utilizar el servicio de Metro "en los trayectos entre las comunas o provincias".
En el caso del transporte rural, el seremi precisó que se ha mantenido inalterable salvo en la última jornada en Catemu, y durante algunas horas en la comuna de Llay Llay.
"Estamos monitoreando permanentemente la situación de tal forma que los buses no se tengan que meter entremedio de las manifestaciones y así no corran riesgo los conductores ni los pasajeros. Esperamos que el escenario se vaya normalizando y que la gente sienta que si va al trabajo o a comprar su transporte estará disponible", indicó la autoridad.
Perjuicios económicos
El presidente de la Confederación de Conductores del Transporte Público de Valparaíso, Óscar Cantero, confirmó que los últimos servicios se están realizando entre tres y dos horas antes del toque de queda, lo que explica la ausencia de locomoción antes de lo normal.
El dirigente también aseguró que hasta ayer no había reportado ningún daño a los buses ni a los conductores, por lo que "seguiremos prestando el servicio como corresponde mientras estén dadas las condiciones de seguridad".
"Estamos tratando de que los buses en la garita no queden tan a la vista. Las empresas han prevenido esa situación y por eso no hemos tenido inconvenientes", expuso Cantero, quien de todas formas alertó sobre el "grave" prejuicio económico que han sufrido los conductores producto de la crisis que enfrenta el país.
"Hay una pérdida importante. El conductor vive del día a día, no tiene un sueldo fijo y gana por boleto cortado. Por lo mismo, una vez superada la emergencia, vamos a tratar de ver algún tipo de compensación de parte de los empleadores", comentó el dirigente.
En esa misma línea, el dueño de la empresa Bus Viña, Reinaldo Sánchez, ratificó que "el mayor impacto es a los conductores que no pueden trabajar bien", agregando que "seguiremos operando normalmente mientras estén dadas las condiciones de seguridad".
Taxis y colectivos
A diferencia de los buses, el presidente regional de la Asociación de Taxis y Colectivos, Sergio Sánchez, aseguró que han estado funcionando hasta casi el inicio del toque de queda, lo que los obligó a definir nuevas rutas a medida que las calles van siendo cortadas.
En esa línea, valoró el acuerdo alcanzado con el ministerio de dejar sin efecto la restricción vehicular en el Gran Valparaíso. Además, sostuvo que "le pedí a los propietarios de vehículos que puedan compartir los ingresos con los conductores dada la situación".
"Necesitamos hacer instalaciones nuevas en Bellavista porque se quemó completa. Esa estación tiene para largo aliento y creo que será un poco más (de dos semanas)"
José Emilio Guzmán, Seremi de Transportes
"Seguiremos prestando el servicio como corresponde mientras estén dadas las condiciones de seguridad. Estamos saliendo a trabajar como debe ser"
Óscar Cantero, Pdte. Confederación de Conductores del Transporte Público
Descartan supuesto paro de conductores
El presidente de la Confederación de Conductores del Transporte Público de Valparaíso descartó que se encuentren llamando a un paro en la región, como fue divulgado durante las últimas horas en redes sociales. "Eso es falso. Nosotros no tenemos ninguna movilización preparada para ese día ni en el corto plazo. Tampoco lo hemos analizado ni discutido. Casi todos los días parados antes de tiempo ya es suficiente, y sería ilógico dada la situación que enfrenta nuestro país. Con el impacto económico que hemos tenido ya es suficiente", indicó Cantero. Desde el Gobierno Regional también lo descartaron.