Ayer, por la mañana, Cristián Riquelme entrenó por primera vez con el plantel de honor de Everton. El lateral izquierdo, que viene de jugar con la selección chilena en el Mundial Sub 17 en Brasil, vive un momento soñado.

"Fueron mis primeros roces con el primer equipo. Fueron buena onda, me trataron bien", cuenta el carrilero, agregando que "juegan a otro ritmo. Tengo que seguir esforzándome por mantenerme ahí".

Un joven humilde y de pocas palabras, pese a sus 16 años (nació el 14 de octubre del 2003) mantiene los pies en la tierra y no se nubla en medio de un año que podría marcar un antes y un después en su carrera deportiva.

Oriundo de Casablanca, Riquelme se sumó allá por el 2015 a la Sub 13 oro y cielo. Se había probado sin éxito en la Sub 11 y la Sub 12 de Santiago Wanderers, y sin perder la esperanza de entrar a un club profesional se dedicó a jugar fútbol amateur en el Estrella de Chacabuco. No fue hasta que en un amistoso entre una selección Sub 13 de Casablanca y su símil evertoniano que pegó el salto.

"Ahí como que me motivé más a tomarme en serio el cuento", recuerda, reconociendo que era muy chico en ese entonces como para saber con certeza lo que implicaba la tradicional rivalidad entre porteños y viñamarinos.

Con un tesón inquebrantable, Riquelme se dedicó a perseguir su sueño: ni los extenuantes viajes desde Casablanca se interponían en el camino. Hoy ya está acostumbrado a los largos viajes, y también a compatibilizar el fútbol con sus estudios en el Seminario San Rafael de Valparaíso.

A la Roja

Si bien en un principio jugaba como puntero izquierdo, una vez en la Sub 15 de Everton pasó a actuar de lateral. Casi como si estuviera destinado a ello, el hoy defensor auriazul cuenta que "había que tomárselo de buena manera", y así es como toma como referencia a Andrew Robertson, del Liverpool, y él mismo se define como un futbolista disciplinado, rápido y de buen juego aéreo, con gran vocación ofensiva.

Fue en esa posición que a principios del 2018 captó la atención del cuerpo técnico de la selección chilena Sub 17, en ese entonces liderado por Hernán Caputto. Así inició su proceso en la Roja, que recientemente culminó con su activa participación en el Mundial de la categoría disputado en Brasil, donde fue titular en todos los partidos donde el equipo dirigido por Cristián Leiva cayó por 3-2 ante los dueños de casa en octavos de final.

A una semana de la eliminación de la cita planetaria, Riquelme todavía guarda cierto amargor. "Íbamos 2-1 ganando y teníamos la sensación y las ganas de poder ganar el partido. Haberlo perdido fue muy duro para nosotros", admite, aunque de inmediato reconoce que "el objetivo era pasar de fase y llegar lo más lejos posible, pero no se cumplió, aunque hicimos lo mejor de nosotros y lo dimos todo".

De todas maneras, el lateral intenta, como siempre, encontrarle el lado positivo: "Fue un sueño cumplido, son bonitas experiencias que dan estas oportunidades, y te favorecen para la carrera".

Y quizá lo que más valora es que pese a ser un año menor que la mayoría de sus compañeros de categoría, ha sabido desenvolverse activamente en la selección y en la Sub 17 de Everton.

En el primer equipo

Todavía masticando lo que fue su primer entrenamiento con el plantel de honor de Everton, hay una cosa que Cristián Riquelme tiene clara: es sólo el comienzo.

"Tiene que incentivarme más a seguir creciendo y a no quedarme solamente con esto", dice el defensor, añadiendo que "la idea es consolidarme en el primer equipo y no sólo conformarme con un paso, o con a veces no estar y en otras sí. Quiero destacar en el primer equipo".

Ni siquiera su paso por la selección lo deja tranquilo. Y es que Riquelme sabe que su salto al profesionalismo dependerá más de su propia voluntad, del esfuerzo y el trabajo, que del azar.

"Creo que hay que ir paso a paso para prepararme bien para el debut si es que tengo la oportunidad, y si me la dan no desaprovecharla", sostiene el lateral, quien tras conocer de cerca a Javier Torrente confía plenamente en que Everton no caerá en el descenso. "Es un hombre exigente, que sabe harto de fútbol", confiesa el lateral, mirando con ilusión hacia el 2020.

"La idea es consolidarme en el primer equipo y no sólo conformarme con un paso"

Cristián Riquelme, Lateral sub 17 de Everton

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