El plantel 2020, o lo que hasta el momento existe del camarín que enfrentará el retorno de Santiago Wanderers a la Primera División, se reunió ayer por la tarde en el Complejo Deportivo de Mantagua, ocasión que sirvió para organizar lo que será hoy la visita del equipo a los cerros San Roque y Rocuant, pero también para proyectar la próxima temporada, que arrancaría en enero.

¿La novedad de la jornada? La presencia del delantero Gustavo Lanaro, goleador de los verdes en la temporada 2019 con ocho anotaciones, quien renovó contrato y se suma a la continuidad de Bernardo Cerezo, Francisco Alarcón y Marco Medel, que fueron confirmados la semana pasada.

Cabe recordar que la permanencia del nacionalizado chileno fue por expresa petición del técnico Miguel Ramírez, dentro del grupo de futbolistas que terminó su vínculo con los caturros, restando ahora saber el futuro de Ezequiel Luna, Néstor Canelón, Enzo Gutiérrez, y los canteranos Luis García y Adrián Cuadra.

Lo que viene

Santiago Wanderers sigue buscando delanteros, y uno de los que se mencionaba como posibilidad era el argentino Leandro Benegas, sin embargo el argentino finalmente se sumaría a Palestino.

Con la permanencia de Gustavo Lanaro, claramente se complica la permanencia de Enzo Gutiérrez, ya que el 9 titular para el 2020 estaría fuera del camarín que acaba de lograr el ascenso.

Además de ello, desde el Decano se insiste con la necesidad de una "columna vertebral", a excepción del portero (Viana es el único fijo en el once titular). Eso significa que la búsqueda es de un defensa central, de dos volantes (uno de quite y otro con más llegada), un goleador y dos delanteros que desborden.

Los verdes se reunirán hoy en Mantagua desde las 10 horas para iniciar una serie de mediciones lideradas por Marcelo Oyarzún (preparador físico), las que servirán de cara a la próxima temporada 2020.

Matías Marín llegó temprano a la sede de calle Independencia. El volante de Santiago Wanderers fue el primer miembro del actual plantel del Decano que arribó ayer a la casona caturra para agradecer con un saludo o una fotografía la solidaridad demostrada por los hinchas porteños hacia quienes sufrieron por el incendio ocurrido en vísperas de Nochebuena en los cerros San Roque y Rocuant.

"No podía faltar. Valparaíso y su gente la está pasando mal, y más en esta fecha", admite el joven volante, quien de inmediato muestra la cantidad de ropa y alimentos que han sido entregados y señala que "no tengo dudas que esta ciudad y su gente se van a volver a levantar".

Marín insiste en que "el Puerto sabe de incendios y tragedias, todos sabemos de estos temas y siempre volvemos a levantarnos. La gente ha llegado en montones acá (a la sede), dejando ropa, útiles de aseo, alimentos no perecibles, pero hay que seguir apoyando y levantar a la gente".

"Más que nunca Wanderers es Valparaíso y Valparaíso es Wanderers, el apoyo es total, en estos momentos no hay colores de equipos, sean de Viña del Mar o de Santiago. Acá hay personas y niños que nos necesitan y para eso estamos todos disponibles", sostiene el mediocampista.

A la cancha

En materia futbolística, Matías Marín se sonríe cuando habla del regreso al trabajo, asegurando que "las vacaciones fueron cortas, pero tampoco se necesitaba más, porque hay que prepararse para lo que viene, y que claramente no será sencillo".

Y lo que viene es el regreso de los porteños a la Primera División. "Claramente estamos con la presión, pero sabemos que la ansiedad de la gente de Valparaíso es muy buena. Es un lindo desafío que debemos saber afrontar", sostiene el mediocampista de 20 años y quien es una de las opciones de Miguel Ramírez para sumar minutos por el nuevo reglamento sub-21.

Sobre el objetivo para el 2020, Marín no tiene mayores dudas, coincidiendo con las primeras palabras de "Cheíto" tras ser confirmada su continuidad al frente del grupo: "Hay que consolidarse en Primera y si se puede, el deseo es meternos en un torneo internacional".

"Las metas hay que ponérselas difíciles para poder cumplirlas y volver a la competencia internacional sería un tremendo objetivo", agrega, mostrándose también satisfecho por la continuidad del cuerpo técnico liderado por Ramírez, manifestando "que se quedaran era importante, porque fueron quienes primero entregaron su grano de arena para poder subir a Primera División".

Finalmente, el volante también confiesa sus objetivos personales, asumiendo que "quiero jugar mucho, agarrar minutos y confianza, y demostrar lo que soy porque siento que he quedado un poco en deuda con la gente y conmigo mismo".

"Jugar con Santiago Wanderers en Primera División es el sueño de todo hincha en Valparaíso... será tan emocionante como lo que fue debutar con esta camiseta", añadió, comparando lo que ha sido su corta carrera con lo que se encuentra viviendo Valparaíso: "Es como lo que pasa con la ciudad. Si uno cae hay que levantarse y jamás pensar en aburrirse para cumplir con las metas trazadas, más allá de los problemas, había que seguir jugando".

"Más que nunca Wanderers es Valparaíso. El apoyo es total, en estos momentos no hay colores de equipos, sean de Viña del Mar o de Santiago".

Matías Marín, Volante de Santiago Wanderers