Claudio Ramírez

El visitante nacional es el objetivo al que apunta el turismo regional para enfrentar una temporada veraniega que se prevé difícil. Y es que el estallido social, que generó una sensación de inseguridad en los destinos, además de otros factores que venían erosionando la actividad, como la disminución de los turistas argentinos, golpean fuerte esta área de la economía.

Es así que todas las proyecciones entregadas por los actores ligados al sector tienden a la baja, aun cuando presentan algunas variaciones.

Abrupta caída

De acuerdo a un sondeo realizado por el departamento de estudios de la Cámara Regional del Comercio de Valparaíso (CRCP), las perspectivas para enero, en términos de ocupación, se ubican por debajo de los resultados registrados a igual mes de 2019, alcanzando hasta el momento sólo un 48%.

Para febrero, en tanto, el mismo índice bordea el 38,5% según las reservas ya existentes en los distintos establecimientos de alojamiento turísticos de la región. Hay que consignar que el periodo estival 2019 ponderó una ocupación sobre el 70%, el cual ya evidenciaba una caída en la actividad con respecto al 2018.

"Este año tendremos mayor afluencia de turistas nacionales que en temporadas anteriores y esperemos que podamos mejorar la baja experimentada en el comercio y turismo desde el pasado 18 de octubre", comentó el presidente de la CRCP, Pier-Paolo Zaccarelli, quien reconoce que la situación actual afecta las perspectivas de la actividad de cara a la temporada estival.

"Sabemos que las expectativas son moderadas, dado que los chilenos están tomando decisiones con menos anticipación que de costumbre, pero esperamos que en la medida que avance la temporada estival, vaya aumentando la llegada de turistas a nuestra región", enfatizó.

Para la presidenta de Hovi Corporación de Turismo, María Teresa Solís, el escenario es complejo en términos generales, sobre todo por la incertidumbre, y advierte que no recuerda ningún periodo en que la situación haya sido parecida a la actual.

"El tema nos ha pegado fuerte", subrayó la gerenta general del Hotel Gala, añadiendo en relación a los efectos del estallido social que se reflejaron de inmediato. "Octubre y noviembre son normalmente meses que para Viña, Valparaíso y Concón se generan bastantes congresos, seminarios y convenciones, y todo eso se bajó", manifestó.

Y aunque reconoce que el Año Nuevo convocó a una gran cantidad de gente en la zona y en especial en la Ciudad Jardín, fue con características distintas a las habituales para la fecha. "No todo el mundo salió a la calle y estaban todos en hoteles, casas de amigos, es decir, se hizo mucho al interior y no afuera, producto de la misma incertidumbre", puntualizó.

Poco más del 30%

Para enero y febrero por ahora las proyecciones del gremio son más que moderadas. "Las reservas van sobre un poco más del 30% de ocupación en el mes de enero. Ahora, estamos recién a inicios de mes y tenemos la esperanza de que eso crezca", remarcó la líder gremial, recordando que, en el caso del turista nacional, la mayor parte de las reservas se realizan en el último momento, lo que se acentúa con la situación actual.

"El año pasado tuvimos ya una baja importante por los argentinos, pero hubo una diversidad de nacionalidades que hizo cambiar los números, pero creo que nunca hemos enfrentado antes una situación como esta", confesó la ejecutiva que, para febrero, advierte que las perspectivas no son mucho mayores con una ocupación que no llega al 20%.

En cuanto a la estrategia para poder incrementar esos números apunta a la creatividad en el sentido de potenciar las experiencias. "Creo que hoy los turistas en general de distinta índole, de convenciones o de ocio, tienen una característica distinta y es que no sólo esperan alojar en un hotel, sino que buscan una experiencia distinta y pienso que en eso debemos trabajar muchísimo. Tenemos las herramientas y hay que trabajar en eso".

Lo que sí advierte Solís es la necesidad de ir armando paquetes con los atractivos que existen, de tal forma de ofrecer una diversidad de cosas a los visitantes. "Pienso que hace bastante tiempo Viña del Mar dejó de ser un destino de playa y sol, pero sigue siendo muy atractiva porque igual se pueden generar otras actividades, dependiendo de los intereses de cada grupo de personas que vengan", apuntó subrayando opciones como Valparaíso con patrimonio y parques naturales; Casablanca con el enoturismo; y Concón con su oferta gastronómica, entre otros destinos locales. "Creo que tenemos que preocuparnos de dar a conocer y promocionar la región".

Para el gerente general de la Corporación Regional de Turismo, Francisco Godoy, la situación es compleja, destacando las cifras locales de la Encuesta Mensual de Alojamiento Turístico (EMAT) entregadas ayer por el INE (ver recuadro). "Ha sido difícil para el sector desde el estallido social, las cifras del EMAT de noviembre muestran una baja superior al 30% en el mes de noviembre respecto al año pasado por lo que es preocupante", dijo.

Sostuvo que el sector hotelero está muy afectado con lo que está pasando, precisando que enero "viene mostrando una ocupación de algo más de un 30% en Viña del Mar, en Concón es levemente superior y en Valparaíso es menor".

Pese a ello, confía en que los números mejoren. "Sabemos que el turista nacional reserva a última hora y esperamos que esas proyecciones vayan al alza y de esa forma cerrar un mejor enero y febrero".

Añadió que la Corporación está realizando una serie de campañas de promoción que se basa fundamentalmente en las experiencias.

En cuanto a la opción de hacer inversiones para sumar atractivos a la región opinó que "siempre se pueden hacer más cosas (...) por ejemplo Viña del Mar hace mucho que viene hablando del turismo de convenciones y como corporación estamos trabajando en estudios que incentiven y avalen estos proyectos".

También destacó que existe una página (valparaisoregion.org) que reunirá en un sólo lugar todas las alternativas, promociones e información para los visitantes.

Escenario complicado

En tanto, el director regional de Sernatur, Marcelo Vidal, señaló que las expectativas son moderadas aunque subrayó que para enero hay un 50% de ocupación lo que es 10 puntos más bajo que el año pasado. "El escenario es complicado considerando que la tarifa promedio también ha bajado (...) menor ocupación y menor tarifa no es bueno".

"El año pasado tuvimos ya una baja importante por los argentinos (...), pero creo que nunca hemos enfrentado antes una situación como esta".

María Teresa Solís, Presidenta Hovi, Corporación de Turismo

"Sabemos que el turista nacional reserva a última hora y esperamos que esas proyecciones vayan al alza".

Francisco Godoy, Gerente general Corporación Regional de Turismo