La Iglesia de San Francisco de Borja, ubicada a pocas cuadras de Plaza Italia, en Santiago, es donde se realizan los oficios religiosos de Carabineros y durante la tarde del viernes fue saqueada e incendiada por desconocido. Ayer, dos personas fueron formalizadas como sospechosas del ataque.

El primer detenido fue un joven de 26 años que contaba con antecedentes previos por desórdenes y daños, y efectivos del OS9 lo señalaron como presunto autor del incendio, pues al ser perseguido por uniformados, "cambió su ropa, intentó desprenderse de la misma y arrojó su polerón con un logo bastante peculiar en una fogata, precisamente para no ser identificado, y posteriormente a esto, lanzó una bomba molotov", detalló la fiscal jefe de flagrancia Centro Norte, Macarena Cañas.

El hombre, que quedó en prisión preventiva, "fue filmado en los momentos en que generaba focos de fuego y avivaba otros, lo que causó finalmente daños de proporciones en la estructura de la iglesia. Gracias a Dios no hubo personas lesionadas", detalló la persecutora y dijo que arriesga 5 años de presidio mayor en su grado mínimo.

El detenido no actuó encapuchado y el polerón fue incautado, "de hecho, presenta incluso los destrozos por quemadura, por cuanto él trató de eliminar una de las maneras por las que podría ser identificado".

La segunda persona arrestada fue quien "vulneró las resistencias de la puerta de la iglesia, causándole daños, para efectos de permitir el ingreso de un volumen mayor de personas", sostuvo Cañas. Quedó con firma mensual, prohibición de acercarse al recinto y la medida cautelar de arraigo nacional.

Sin muebles

Tras este último, un grupo de personas ingresó a la iglesia de casi 150 años, causando destrozos incluso a la galería comercial frente al recinto religioso, que también fue saqueada.

El coronel Juan González, del OS9, respondió al respecto que "esa información es materia de análisis, toda vez que se está haciendo un catastro de la existencia que había en la iglesia, los materiales que habían, implementos, bienes muebles".

"vándalos"

El ministro del Interior, Gonzalo Blumel, ayer visitó San Francisco de Borja acompañado por el subsecretario de la cartera, Juan Francisco Galli; el intendente de la Región Metropolitana, Felipe Guevara, y el general director de Carabineros, Mario Rozas.

"Quiero hacer un llamado a todos quienes creen en la democracia, a quienes creen y tienen la convicción de que la paz social depende fundamentalmente de defender el orden público, a que nos unamos contra estos delincuentes", afirmó Blumel.

"Cuando presentamos acusaciones constitucionales a los intendentes por ejercer su labor mandatada por la ley -de resguardar la tranquilidad, el orden público, la integridad y los bienes de las personas-, lo que estamos haciendo es dar una señal de que el orden público se va a debilitar y estamos amparando, de alguna manera, a aquellos delincuentes violentos que lo único que quieren es causar daño", continuó el secretario de Estado, en alusión a la medida presentada esta semana por diputados de oposición, contra Guevara por la estrategia de "copamiento policial" de Plaza Baquedano.

Rozas, por su parte, agregó que "estamos muy golpeados, pero también esto es una esperanza como institución para seguir cohesionados. (...) Queremos hacer un llamado a nuestros compatriotas para apartar a todos estos delincuentes, a todos estos vándalos"

Galli explicó que "como Ejecutivo vamos a iniciar acciones judiciales. El delito de incendio es uno de los más graves".

"(Uno de los detenidos) fue filmado en los momentos en que generaba focos de fuego y avivaba otros".

Macarena Cañas, Fiscal jefe de flagrancia

"Queremos hacer un llamado a nuestros compatriotas para apartar a todos estos delincuentes, a todos estos vándalos".

Mario Rozas, General director de Carabineros